He descubierto uno de los mejores survival horror del año y lo tienes en Game Pass. Análisis de Signalis

He descubierto uno de los mejores survival horror del año y lo tienes en Game Pass. Análisis de Signalis

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Signalis Analisis

Mis queridos lectores, debéis saber que tengo una obsesión; bueno, tengo varias, pero una de las principales es seguir la evolución de la baja definición, lo pixelado y lo indefinido como recurso estético en el videojuego. Todo comenzó cuando leí el libro Atrapa el pez dorado de David Lynch. Entre sus páginas, el director se quejaba de que la alta definición permitía ver demasiado, rompía el misterio y le retiraba la capacidad de imaginar al espectador. Os cuento esto porque Signalis se apoya en esta idea. Su propuesta de terror clásico funciona tan bien porque el low poly, las texturas pixeladas, la oscuridad y la baja definición ocultan al monstruo, acentúan el misterio y apoyan una narración abstracta, confusa y totalmente seductora.

Signalis no oculta sus referentes. Su estructura de niveles es la del primer Resident Evil pero con una cámara tirando a lo cenital. Su narración y presentación de personajes está a caballo entre Silent Hill 2 y Silent Hill 4, y su ambientación es espacial y anime. Hay destellos de Dead Space, Alien y hasta de Blade Runner. Pero lo que hace bien este videojuego de terror y supervivencia es que no se recrea en sus referentes, sino que los toma para construir su propio discurso, personal y cautivador. Signalis dura unas nueve horas y, por cómo hace las cosas, te tendrá enganchado hasta el final y más allá.

Un juego de terror muy recomendable

Despertamos en una estación abandonada. Al poco de iniciar nuestra aventura se nos revela que en este mundo hay replicas de las personas, que algo ha salido mal, que habitan seres monstruosos y más o menos inmortales, y que lo mejor sería que huyéramos. Pero nosotros avanzamos porque tenemos que encontrarla a ella. Aunque ella puede que ya esté muerta.

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Esta misión nos obliga a internarnos por una serie de niveles en forma de pisos; por supuesto que está un hospital, una cocina… Y todos esos sitios que te imaginas. La forma de avanzar es mediante tarjetas de acceso, tal y como haríamos con las llaves de picas y tréboles de un Resident Evil. También será frecuente desbloquear una puerta para volver a aparecer en un lugar que ya habíamos visto. De esta forma se suaviza muchísimo el típico backtracking de estos títulos.

Por supuesto, la munición será muy escasa y encontraremos muchísimos puzles y notas. Habrá que administrar muy bien nuestros productos curativos y aprender a esquivar a los monstruos más que a matarlos. Esto es lo típico, lo de siempre, así que, ¿dónde está la magia de Signalis? Para empezar, en cómo alterna la cámara cenital con la primera persona. Sin que sepamos cómo ni por qué, al tocar una televisión, escuchar una onda de radio o de otra forma, cambia la perspectiva de la acción. De pronto, vemos a través de los ojos de su protagonista y viajamos a lugares remotos, ¿será su pasado o su presente? ¿Aquí o allá? ¿Estamos soñando o todo es real?

Signalis Analisis

En estas secuencias se detalla más el universo de juego, nuestra misión y quiénes somos. Y lo curioso es que podemos recoger elementos en estos trances que se pueden usar cuando regresamos a la base, ¿cómo es posible? Estos momentos usan esa baja definición con una maestría maravillosa, devolviéndome a las mejores ideas de Silent HIll 4.

Esta idea cimienta una narrativa muy interesante que se complementa con los personajes que nos encontramos. De pronto entramos en una sala y allí hay alguien. Los polígonos texturizados hacen que no sepamos si es amigo o enemigo, qué hace ahí exactamente. Y cuando nos habla tampoco nos lo aclara demasiado. Sus frases son crípticas, poco descriptivas, y consiguen aumentar ese tremendo misterio que rodea al juego.

Signalis Analisis

Gráficos al estilo de la primera PlayStation

Pero no os penséis que con esto de la baja resolución estamos ante un juego feo, al contrario. Signalis es precioso. Trabaja maravillosamente bien con las luces, con las animaciones de sus personajes y con el diseño de sus ambientes. Además, recurre a un estilo anime para representar los rostros de sus personajes. Es un continuo contraste: movimientos fluidos con modelados muy duros, escenas tenebrosas con caras de anime, perspectivas cenitales con otra en primera persona. Y todo se complementa con una música y unos gritos que asustan.

Hay giros de guion, mucha interpretación y jugueteo con las reglas de los videojuegos. Merece la pena llegar al final

Y, por cierto, hay giros de guion, mucha interpretación y jugueteo con las reglas de los videojuegos. Merece la pena llegar al final. Pero no os penséis que Signalis solo es bueno por sus movidas narrativas. El título hace cosas muy interesantes con su jugabilidad. Algo que me ha gustado es que el botón de correr es el mismo que el de apretar el gatillo. Para disparar el arma tienes que apuntar y luego apretarlo. De esta forma, el juego se asegura que no puedas correr mientras apuntas y lo explica a través de su esquema de control.

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Los monstruos son maravillosos porque actúan de formas inesperadas. Aparecen del suelo, reviven, se multplican, se… Y hay algo genial con la aparición de nuevas armas e ítems relacionado con esto. Cuando te sientes superado por cómo se comportan, el juego sabe darte un nuevo utensilio para acabar con ellos de forma más eficiente, pero luego estos te hacen jugadas nuevas.

Estas criaturas tienen un comportamiento muy interesante. Puedes asaltarlos por la espalda, ser sigiloso contra ellos o ir de frente, y reaccionan muy bien a todo lo que haces. Son erráticos, pero precisos. A través de sus movimientos, uno cree que los puede llegar a conocer. Y todo es gracias al fino trabajo que hay con sus animaciones.

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Así que sí, Signalis me ha cautivado por su diseño narrativo, por su jugabilidad, por sus monstruos y por su desarrollo, pero no es perfecto. Sus puzles son a veces algo obtusos, cuesta comprenderlos o te obligan a dar más vueltas de la cuenta para entender qué demonios quieren que hagas. Puede que tenga yo poca comprensión lectora, claro está, pero me ocurrió esto unas tres veces. La solución estaba ante mis narices pero no era capaz de entenderla.

Además, tiene otro problemita raro y es que a veces cuesta interactuar correctamente con algo, y esto es un incordio porque los enemigos siguen corriendo hacia ti mientras lo intentas. Pero estas son dos chorraditas perfectamente salvables a cambio de todo lo que Signalis ofrece. Me parece una de las propuestas mejor resueltas de este terror clásico nuevo. Sabe proponer algo nuevo sobre los referentes que toma, es muy divertido, su presentación es brillante y lo que cuenta y cómo lo cuenta está genial. Así que a poco que te gusté el survival horror, ni te lo pienses.

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Signalis análisis

Signalis

Por: Adrián Suárez
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Signalis es ese juego que tienes que jugar. Más allá de que te guste o no el género, hace cosas muy interesantes en lo narrativo y en el planteamiento de sus puzles, diseño de niveles y jugabilidad. El empleo de la baja definición, la manera en la que se desarrolla la historia o cómo se distribuyen los objetos y armas, sabe generar un estupendo bucle jugable. Te atrapará hasta el final.

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5 cosas que debes saber:
  • Ideas de survival horror clásicas con mucha personalidad.
  • Su uso de la baja definición es excelente.
  • Te atrapará por su misteriosa historia y ambientación.
  • Los recursos son escasos, te tocará ahorrar.
  • Los personajes que te encuentran son muy Silent Hill.
Jugadores: 1
Idioma: Textos: Español Voces: Inglés
Duración: 8-10 horas
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