Hay un momento del E3: La película, el documental de los compañeros de Eurogamer grabado durante la difunta feria del videojuego de Los Angeles en 2017 en el que, tras una hora de metraje en la que cada vez se ve a los protagonistas más cansados, apesadumbrados y derrotados por el tute que supone trabajar en un evento de este tipo, todos se reúnen en el sofá del apartamento alquilado para ver la presentación de Nintendo (tradicionalmente la última).
Las caras de todos empiezan a tornarse en sonrisas, aparecen divertidas onomatopeyas y se pronuncian animadas frases sobre lo que están viendo en pantalla… Que no es otra cosa que Super Mario Odyssey. Durante mi visita a Gamescom no he podido más que pensar en mis compañeros Pep o Enrique, cuando después de dos días infernales de trabajo, llego la mañana de mi último día en Colonia a una cita con Nintendo para probar Super Mario Bros Wonder.
Porque sí, uno de los grandes videojuegos que hemos podido probar en esta Gamescom 2023, la mayor feria del videojuego de Europa, ha sido Super Mario Bros. Wonder. La apuesta de Nintendo Switch para este final de año es una nueva aventura 2D, aunque con un toque muy especial. Desde su presentación el pasado mes de junio, cosas como las tuberías que tienen vida propia o el Mario Elefante dejaron claro que Nintendo buscaba salir de su zona de confort y hacer el juego más loco posible.
El poder de sacarte una sonrisa del nuevo juego del fontanero es directamente proporcional a la cantidad de detalles, a veces pequeñísimos como una animación de entrada en una tubería, a veces gigantes como las Flores Maravilla y sus transformaciones del escenario, que tiene el título.
Nintendo sigue sin quedarse sin ideas
En cerca de 45 minutos de juego, pudimos disfrutar de unos seis niveles y una pantalla bonus. El tiempo más que suficiente como para ver que Nintendo sigue sin quedarse sin ideas de mecánicas con las que crear sus niveles, así como para decir sin ningún tipo de dudas que fue la experiencia más divertida que vivimos durante esta Gamescom.
De lo que no vimos demasiado es de la historia, aunque sí que se nos contó por encima lo que había pasado para que los protagonistas tengan que salir de aventuras. Resulta que no estamos en el archiconocido Reino Champiñón, sino que nos toca ir al Reino Flor, donde el Príncipe Florian, esa simpática oruga que seguramente habréis visto a hombros de Mario en los artes del juego, necesita nuestra ayuda para detener a Bowser. Sí, el Rey de los Koopas la está liando por allí sometiendo a sus habitantes.
Mediante un sistema de mundos que nos recordó al de Kirby y la Tierra Olvidada, en el que podemos explorar un poco antes de elegir qué nivel jugar, es posible ver la dificultad y algún que otro detalle de las pantallas disponibles. No esperéis un mundo abierto repleto de mecánicas, sino más bien un hub jugable que cumple el papel de divertido menú.
Y una vez que seleccionamos un nivel, es el momento de elegir nuestro personaje. Hay un total de 12 divididos en dos categorías: un total de 7 “normales” como Mario, Luigi o Peach y otros 5 integrados por los distintos colores de Yoshis y Nabbit. Este último grupo no sufre daño, pero tampoco pueden conseguir powerups. Perfecto para los más pequeños.
"Es una pena que alguien se pierda los powerups en Mario Wonder, porque posiblemente son lo más divertido"
Eso sí, es una pena que alguien se pierda los powerups en Mario Wonder, porque posiblemente son lo más divertido. Durante este rato pudimos convertirnos en elefante, lo cual aumenta tu tamaño y fuerza, pero también usar un gorro taladro y transformarnos en ojo al dato, un goomba. Sí, hasta ese punto de locura va el nuevo juego de Nintendo.
Como habéis visto en tráilers anteriores, el elefante te permite romper bloques como si nada, pero también puede almacenar agua en su trompa y lanzarla en tres ocasiones para interactuar con el entorno. El taladro, por su parte, te hará posible avanzar por el suelo o por el techo, evitando peligros de todo tipo, así como accediendo a zonas que de otra forma serían prácticamente inalcanzables. Además, podremos llevar powerups en una especie de reserva: imagínate que soy Mario de Fuego y necesito el elefante para acabar con una plataforma… Pues pulso el botón asignado y aparece esa transformación.
Cada nivel tiene una idea más loca que el anterior
Y lo del Goomba no es un powerup, ahí os he mentido… Pero me sirve para presentaros otra gran mecánica de Super Mario Bros Wonder como son las Flores Maravilla. Como también habréis visto en el material promocional, son unos objetos que cambian de forma temporal la forma del nivel. A veces estarán visibles, y otras necesitarás hacer algo concreto para desbloquearlas.
Sus efectos son completamente impredecibles, y van desde tuberías que se mueven, a estampidas de toros y sí, a transformarte en Goomba. Aunque puedan ser divertidas, lo cierto es que siempre buscarás parar su efecto para poder completar el nivel. Y para hacerlo necesitas encontrar una Semilla Maravilla.
El caso de la Flor que te transforma en Goomba es muy evidente. Pasarás a no poder saltar, por mucho que tu personaje lo intente de una forma tan ridícula como divertida, pero tendrás beneficios como poder andar por los pinchos sin debilitarte. El problema es que en ese nivel se nos presenta a MawMaw, un enemigo que no distingue entre aliados y rivales: todo lo que ve, se lo traga. Por ello, la forma de jugar cambia completamente al obligarte a esconderte detrás de setos y a usar plataformas para poder subir.
El desafío de salto en pared nos permitirá conseguir la medalla que desbloquea la habilidad
Con esto ya tendrías un juego más que apañado, pero Super Mario Bros Wonder tiene más ases bajo la manga. Gracias a un sistema de medallas que desbloquearemos tras completar diversos niveles y desafíos, Florian nos equipará una habilidad adicional. Quizás sea planear con el gorro, el salto en pared o el salto hacia atrás que todos recordamos de Mario 64. Usando esto y los Powerups, podemos articular una especie de builds para nuestro personaje que quizás nos permita acceder a nuevas zonas o conseguir alguno de los coleccionables.
De esta forma, no tenemos personajes que salten más o que puedan flotar en el aire como Luigi en otros Marios 2D, sino que todos pueden hacer de todo. Además, con este sistema se añade rejugabilidad a los niveles a buen seguro hace que el juego gane en duración sin perder su chispa.
También pudimos saber más sobre el juego online, que funciona gracias a una especie de “servidores”. Si estamos conectados a internet, podremos encontrarnos con otros 11 jugadores en el mundo en el que estemos, y hasta un total de 3 en el nivel. Estos jugadores aparecerán con el aspecto de una “vuelta fantasma” de los títulos de carreras y no afectarán demasiado a nuestra partida, más allá de que pueden ayudarnos a ver el camino a seguir, o incluso echarnos un cable si caemos derrotados.
De igual forma, se puede jugar online con amigos, y también en cooperativo local, algo que hicimos en Gamescom con otro compañero de la prensa y un responsable de Nintendo. Las dos modalidades son refrescantes, y prometen muchas risas en el sofá de casa.
Super Mario Bros. Wonder saldrá a la venta el próximo 20 de noviembre para Nintendo Switch y apunta a ser uno de los títulos más divertidos del año.
En 3DJuegos | Todos los juegos de Super Mario, ordenados de peor a mejor
Ver 4 comentarios