Ha sido el jugador Karsto quien ha batido el anterior récord y lo ha hecho con una diferencia de apenas un segundo.
El speedrun es una de las aficiones más dedicadas del mundo de los videojuegos, requiere por lo general, haber terminado el mismo juego cientos de veces, conocer cada palmo del escenario, cada pequeño fallo y formar parte de comunidades de jugadores que contribuyan a bajar la marca, un esfuerzo tan colectivo como competitivo que nos deja nuevas marcas increíbles en cada nuevo título que llega al mercado.
En esta ocasión ha sido uno de los grandes clásicos de Bethesda el que ha vivido un nuevo récord, The Elder Scrolls IV Oblivion, y lo ha hecho por apenas un segundo de diferencia con la anterior marca, así de justas se viven las victorias en el speedrun. Su protagonista, tal y como ha compartido Exputer, ha sido el speedrunner Karsto, en una hazaña que ha publicado en su canal de YouTube.
El método empleado ha requerido años de investigación
Realmente, para quien no esté familiarizado con este tipo de speedruns, es difícil entender lo que está ocurriendo en pantalla y es difícil seguir los pasos del jugador en su avance para llegar al final del juego. Dezmone, el speedrunner que mantenía el anterior récord, explicó cómo debía realizarse esta ruta, indicando que podíamos salir de los límites realizando 'wall clipping', aunque el juego intentará devolverte cuando hayas caído suficiente.
Esta no es una maniobra fácil, ya que los desarrolladores se esforzaron en que esto no ocurriera y es posible caer infinitamente si no se ejecuta con cuidado. "Al abrir y cerrar la puerta se activa otro glitch donde podemos llevar el personaje de un guardado diferente a través de la puerta en lugar del personaje que estamos jugando actualmente", explicaba Dezmone.
Karsto también ostenta el récord sin emplear glitches para salir del escenario
Los speedrunners también descubrieron que al cargar una partida en la que el personaje está sentado, se pueden transferir las 'coordenadas XYZ' de ese personaje también, quedando fuera de los límites, en las alcantarillas, muy lejos bajo el nivel, a partir de ahí, el jugador nada hacia la salida para volver a los límites. Cuando la pantalla se queda en negro, Dezmone guarda y carga rápido para evitar a la escolta. A partir de ahí, emplea una técnica llamada Dragonfire skip o DFS que le lleva a la última misión, donde accede a una de las puertas haciendo clipping en la pared junto a una de ellas.
Como veis, realizar muchas de estas técnicas no sólo requieren habilidad, también necesitan de años de investigación. Tal y como comenta Dezmone, algunos de los movimientos que se han ido ejecutando en estos speedruns se conocen desde 2007, siendo tarea de décadas conseguir superar las marcas. El mismo speedrunner que ha conseguido el nuevo récord, Karsto, es también quien mantiene el actual récord sin emplear glitches para salir del escenario, situando esta marca en 23 minutos y un segundo. Hace apenas unos días, otro speedrunner consiguió batir el récord mundial en Minecraft, pero un error en la grabación le arruinó el logro.