Si pensamos en un héroe del anime y el manga, seguramente el primero que viene a nuestra mente sea Goku; y posiblemente por lo grande que es Dragon Ball. Hemos perdido la cuenta de las veces en las que ha salvado a la Tierra de la destrucción completa, además de tener un carácter bondadoso conocido por todos que le lleva a ayudar a quien le pide auxilio.
Sin embargo, esto no es correcto del todo. No es que Goku sea un villano, tampoco vamos a ir por ese camino, pero sí es cierto que está muy lejos de ser perfecto al 100%. No se trata de un personaje gris como esos que están tan de moda en las series de televisión actuales, si no que simplemente ha cometido errores muy importantes impropios de un héroe con un currículo impoluto.
No es el mejor padre de la historia, eso está claro
Todos sabemos cómo es la sociedad japonesa, y más la de hace unas décadas, momento en el que se escribió y también se emitió Dragon Ball en sus múltiples iteraciones. Por ello, Goku es un ejemplo de lo que podíamos esperar en el resto de animes y mangas.
No hay momentos concretos a destacar, porque son muchos. Desde ser bastante machista con su mujer Chi-chí, ayudando en cero unidades de tareas en casa, a animar a su hijo Gohan a no estudiar. Este último plan le salió bien, porque de no llevárselo a entrenar a la Cámara del Tiempo y el Espacio o dejarlo con Piccolo durante todo un año, no habría salvado a la humanidad de amenazas como Cell.
Goku y su orgullo de luchador traicionándole
Nuestro Guerrero Z favorito tiene varios problemas. Es tan bueno, que nunca querrá derrotar a un enemigo formidable estando él en ventaja. De esta forma, llegamos a momentos totalmente increíbles en los que Goku deja irse o recuperarse a rivales que son una amenaza para toda la humanidad.
El caso más evidente es en el que arroja a Célula una semilla del ermitaño (también conocida como senzu), las habas que una vez consumidas, recuperan toda la energía de quien se la come. ¿La razón? Para hacerse el chulo con el poder de su hijo Gohan.
Esta no es la única vez en la que hace esto, porque ya en Dragon Ball Super realizó la misma maniobra con Moro, una amenaza que podría haber acabado con el planeta. Aunque la primera ocasión fue con Piccolo, antes de Z, y le salió bien; porque pasó a ser un aliado.
Goku es, literalmente, un genocida
Aunque la cuenta le sale positiva a Goku, porque ha salvado a una ingente cantidad de personas, la realidad es que no siempre ha priorizado salvar a todo el mundo. Eso es lo que sucedió en la Saga de Buu, en la que directamente acabó con un décimo de la población de la Tierra
Durante la pelea con Buu, en la que este le lanza un poderoso Kame a Goku, nuestro Saiyano refleja el ataque. Esta onda de energía se pierde en el horizonte y explota a lo lejos. Según cuenta Babidí, el ataque acaba con un décimo de la población mundial de Dragon Ball.
No sabemos cuantos millones son. Podemos entender que son menos que en nuestro mundo, porque están expuestos a constantes masacres por parte de los villanos y a su lucha con los héroes. Pero también es verdad que en ese planeta hay población animal con inteligencia y que conviven con los humanos, por lo que posiblemente sea similar. Y un décimo son 700 millones de personas.
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