La noticia de hoy es sobradamente dura de comentar, pero con un final feliz. Y es que si bien la tecnología tiene sus desventajas, como cierto apego a los "cacharros" que nos apartan del mundo real, sirven para acercar a familiares, amigos o parejas, incluso para conocer gente o como medio para socializar sin tener que salir de casa. Además, también para salvar vidas, y es que una Nintendo Switch ha servido para que el FBI rescate a una niña de 14 años secuestrada.
En este caso, nos remontamos a agosto de 2022 cuando la adolescente (el FBI no ha revelado el nombre para mantener la seguridad de la pequeña) del Estado de Virginia conoció a un hombre de 28 años llamado Ethan Roberts a través de Omegle. Una relación de "amistad" que duró desde enero de ese año y que llevó a Roberts a viajar a Virginia donde la secuestró y se la llevó a la fuerza a Arizona, Estado donde vivía el hombre.
Según recoge Kotaku, a través de la información del propio FBI, Roberts coaccionó a la niña secuestrada para vender imágenes de contenido sexual a través de la red ese mismo mes de agosto, todo ello mientras permanecía en la casa de él. El problema fue que al haberse llevado a la pequeña a la otra punta del país, a nada menos que 3.403 kilómetros de su casa, la investigación policial se dio de bruces con la cruda realidad: no podían encontrarla.
"Inmediatamente nos comunicamos con su familia y hablamos con su abuela y su padrastro, y al día siguiente estábamos con las botas en el suelo", recoge Keitra Coleman, voluntaria de la organización local sin fines de lucro Hear Their Voices. Una investigación que comenzó como un caso de violencia doméstica y donde nadie podría imaginar que la joven se encontraba secuestrada y obligada a vender su cuerpo al mejor postor.
Una situación de desesperación que, sin embargo, cambió drásticamente cuando la niña encendió su Nintendo Switch para ver videos de YouTube y descargar un juego. En ese momento, un amigo de la víctima la vio conectada y en lugar de asumir que podría tratarse de un error, habló con las autoridades. El FBI rastreó la dirección IP de la consola para ubicar a la pequeña e iniciar el rescate, uno que acabó con Roberts entre rejas.
"El hecho de que alguien más, otro niño, fuera lo suficientemente inteligente como para decir: 'Oye, mira, mi amiga está en línea, ha estado desaparecida y necesito decírselo a alguien'. Los malos necesitan saber que la policía está vigilando y que estás dejando una huella digital dondequiera que vayas. Te encontraremos", añadió Frank Milstead, director jubilado del DPS, Departamento de Seguridad Pública de Arizona.
El medio Kotaku contactó con el FBI para obtener más información. El Buró Federal de Investigaciones adelantó que "gracias a la rápida respuesta del departamento de policía local y al ingenio del FBI Norfolk, pudimos ubicar a la víctima desaparecida a través de su cuenta de juego y reunirla con su familia". Un caso que acabó con un reencuentro familiar y que llevó a Ethan Roberts a enfrentar 30 años de prisión con cargos secuestro de un menor y pornografía infantil.
Foto de Erik Mclean en Unsplash
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