La decisión se debe al mismo motivo que el retraso de The Last of Us Part 2.
En las últimas horas, Sony Interactive Entertainment anunció que The Last of Us: Part II, uno de los juegos más esperados del año entre el público de PlayStation 4, se aplaza de forma indefinida como resultado de las dificultades logísticas que entraña la crisis del coronavirus. Resulta que no es la única víctima de esta decisión: Iron Man VR, anteriormente programado para el 15 de mayo, correrá exactamente la misma suerte.
La pandemia ya ha afectado a otros grandes títulos cuyo lanzamiento estaba previsto para este año, incluyendo Final Fantasy VII Remake, la adaptación a Nintendo Switch de The Outer Worlds, o incluso Wasteland 3, sin contar con otros muchos juegos que han tenido que modificar su programa de soporte poslanzamiento (Pokémon GO) o la llegada de nuevas actualizaciones y expansiones (Fallout 76 Wastelanders).
Son probablemente los primeros de otros muchos grandes retrasos
Tal y como apunta Geoff Keighley en Twitter, anterior presentador de los Game Awards, el caso de TLOU 2 (y de Iron Man VR) es "probablemente el primero de otros muchos retrasos de juegos que se avecinan". Aunque Naughty Dog ha hablado largo y tendido sobre la situación que rodea a su esperado juego, Marvel no ha mencionado el retraso de Iron Man VR en sus redes sociales, y Camouflaj —desarrollador del juego— se ha limitado a retuitear la publicación de PlayStation.
No sabemos cuándo se pondrá a la venta exactamente Iron Man VR, pero sí que como su propio nombre sugiere, el juego nos pondrá en las botas metálicas del mismísimo Tony Stark para invitarnos a volar entre jets con su traje y disparar con las manos en primera persona. ¿Su objetivo? En esta ocasión es enfrentarse a Fantasma, una hacker y activista anticorporativa que arremete contra los dominios de Stark.