El periodista Jason Schreier ha destapado nuevos detalles relacionados con la cultura tóxica del estudio.
Están siendo unas últimas semanas un tanto convulsas en Activision Blizzard, ya que se están destapando una crisis en una de las compañías de videojuegos más importantes del sector, con numerosas acusaciones de abuso sexual y una cultura hostil contra las mujeres, derivando en acosos de todo tipo y, desgraciadamente, con suicidios de por medio. Por todo esto, varios altos cargos de la firma están abandonando la compañía y cada vez se destapan más hechos relacionados con el entorno de la marca. Sin obviar que hasta los accionistas han demandado a la empresa.
Una vez más, el periodista de Jason Schreier, de Bloomberg, ha publicado un nuevo artículo en el que aporta nuevos datos que nos hacen tener una idea de cuál es el ambiente que se ha respirado en Activision Blizzard en los últimos años. Hace un vistazo en profundidad a la cultura sexista, basándose en entrevistas a más de 50 empleados, tanto actuales como algunos que no trabajan ya allí, indicando cómo fomentaba el acoso sexual y la discriminación era constante.
Schreier ha entrevistado a más de 50 empleados que concuerdan en la cultura hostil
El artículo se abre con una historia que no se había contado con anterioridad, y que ocurrió en el año 2018. Los empleados de Blizzard abrieron un correo escrito por Mike Morhaime en el que contaba a los empleados que la compañía dejaba de contar con Ben Kilgore, director de tecnología. No se dieron razones, pero lógicamente los empleados comenzaron a sacar sus propias conclusiones para intentar sacar conclusiones.
El artículo de Schreier, afirma literalmente que “Kilgore presidió el grupo más notorio de bebedores sexistas de la sede de Irvine, en California”. Poco después, tuvieron una explicación sobre la marcha de su antiguo jefe por parte de Derek Ingalls, quien pasó a ser jefe del departamento de tecnología, quien concluyó con un extraño consejo: “No te acuestes con tu asistente, pero si vas a hacerlo, no te detengas”.
Varias personas contaron versiones de esa historia en la entrevista en Bloomberg. Y eso provocó una serie de especulaciones sobre la marcha de Kilgore que no ha podido verificar el medio. Aun así, un ex trabajador de la compañía, independientemente de esto, indica que “este tipo de bromas sexistas eran habituales y perjudiciales para las carreras de las asistentes y otras mujeres de la empresa”. Eran como estrellas de rock, dicen en el texto.
Una reputación que se va al traste
Todo esta información que está saliendo a la luz contrasta con el valor que tenía Activision Blizzard como empresa, que siempre ha estado considerada entre los mejores lugares para trabajar y un ejemplo brillante de cómo construir un estudio de juegos de larga duración y que habitualmente han salido bien. Sagas como Diablo o Warcraft pueden servir como ejemplo.
La cultura era tóxica y hostil principalmente contra mujeres
La reputación del estudio ha comenzado a desmoronarse con todos los hechos que os hemos ido contando al día desde 3DJuegos, y con las historias que varios empleados han contado en redes sociales. Una situación desagradable sobre todo para mujeres que han formado parte del estudio, quienes cuentan que han sido “acosadas, sometidas a novatadas, forzadas a tomar alcohol y viendo cómo los compañeros masculinos usaban los eventos de la empresa para solicitar sexo”. Un total de 6 mujeres denunciaron los hechos a recursos humanos y no fueron tenidas en cuenta; ahora, el director de RR.HH, ha abandonado la compañía.
A pesar de estos problemas, como cuenta Schreier, muchas mujeres afirmaban que todavía amaban muchos aspectos de Blizzard. Pero durante los últimos 3 o 4 años, Activision ha intervenido y ha hecho las cosas más difíciles de innumerables formas, erosionando las partes de la cultura de Blizzard que "eran" saludables.
Desde Activision Blizzard indicaron en un comunicado que el retrato que se está esbozando de la compañía no es el actual, indicando que están comprometidos en “promover un lugar de trabajo alentador, diverso e inclusivo para nuestra gente, y estamos comprometidos con continuar este esfuerzo en los años venideros”.