Los 5 mejores SSD 2230 para Steam Deck: ¿Cuál comprar? Consejos y recomendaciones

Las consolas portátiles están más vivas que nunca este 2023. Sin contar el éxito de Nintendo Switch (que parece no tener fin pese a llevar en el mercado varios años), hay otras que llevan mucho menos tiempo disponibles y están dando mucho de que hablar. Una de ellas es Steam Deck, la propuesta de Valve para hacerse un hueco en este sector.

Es cierto que llamar a Steam Deck consola es ser un poco injusto con ella, ya que más que una consola se trata de un PC en miniatura. La máquina cuenta con un modo juego que proporciona al usuario una experiencia más parecida al sistema operativo que utiliza en Nintendo, pero si utilizamos su modo escritorio en esencia vamos a tener un ordenador con un sistema basado en Linux para hacer prácticamente cualquier cosa que se nos ocurra.

Aunque ya lleva en el mercado algún tiempo, puede que ahora sea el mejor momento para hacernos con ella. Venimos de unas ofertas donde se rebajaron todos los modelos un buen porcentaje, y eso sin contar que ahora tenemos la oportunidad de comprar modelos reacondicionados a muy buen precio. En este punto nos toca a cada uno elegir aquel modelo que más se ajuste a nosotros, aunque la mayor diferencia que hay entre ellos está en su almacenamiento.

Mientras que hay dos modelos que montan una unidad SSD de 256 y 512 GB respectivamente, hay otro más básico (y económico) que utiliza un almacenamiento eMMC de 64 GB. Muchos usuarios se decantan por este porque existe la posibilidad de cambiarlo por un SSD, mejorando de esa manera su espacio e incluso rendimiento a un buen precio. Pero, ¿es posible cambiar su SSD por cualquiera? En este artículo vamos a hablar de ello y también vamos a enumerar los mejores modelos que se pueden comprar ahora mismo.

¿Qué tener en cuenta al comprar un SSD 2230 para Steam Deck?

Antes de entrar a valorar este proceso, hay que tener en cuenta varias cosas. Abrir la Steam Deck y cambiar el almacenamiento es algo que no recomienda hacer Valve, ya que en el transcurso podríamos dañar la consola. En la práctica es un proceso que no es demasiado difícil, aunque para hacerlo es conveniente tener mucho cuidado y por supuesto hacerlo bajo nuestra propia responsabilidad. Además, no vale cualquier SSD que haya en el mercado, y por eso mismo a continuación vamos a ver algunas consideraciones previas.

¿Cómo cambiar el SSD de Steam Deck?

El proceso de cambiar el almacenamiento de Steam Deck es, pese a los peligros que pueda entrañar, bastante sencillo. De hecho, la propia Valve publicó un vídeo hace algunos años donde se podía ver perfectamente los pasos a seguir para desmontar la parte trasera de la consola, e incluso la forma de retirar uno de los sticks de esta (que también es bastante sencilla).

Para ello, lo único que deberemos hacer en primer lugar será quitar los tornillos que hay en la parte trasera de la consola. Son 8 en total, encontrándose 4 de ellos en los extremos y otros 4 en la zona central. Una vez retirados dichos tornillos toca hacer uno de los pasos más delicados: retirar la carcasa. Para ello, lo más recomendable es usar unos utensilios con forma de púas. En cualquier caso, nunca deberíamos usar las manos para hacer palanca.

Una vez con la consola enseñando sus “tripas”, toca levantar la placa metálica que veremos a la derecha quitando tres tornillos (uno de ellos está debajo de una pegatina que tiene propósitos técnicos). Es posible que nuestra Steam Deck tenga una placa negra en lugar de una gris, en cuyo caso no veremos pegatina alguna y solo quitaremos dos tornillos.

Hecho esto veremos ya el disco eMMC en la parte de abajo, pero antes de ir a por él hay que hacer un paso muy importante: desconectar la batería. Solo quedará retirar el tornillo del almacenamiento y quitarle la “funda” que tiene y cuya función es la disipación térmica. Colocaremos la funda sobre el SSD y este en el puerto M.2 de la Steam Deck. Para terminar, solo queda seguir todos los pasos al revés. El siguiente vídeo muestra todo el proceso.

Steam Deck solo acepta SSD 2230

Ahora que ya sabemos cómo es el proceso para desmontar una Steam Deck, toca hablar del SSD. Es lógico pensar que siendo un dispositivo portátil la consola no acepte un SSD NVMe tradicional, y de hecho así es. Tanto Steam Deck como la Asus ROG Ally tienen que renunciar a ciertas cosas para que todo quepa y disipe bien, y de ahí que el SSD que sea compatible con ellas sea poco común.

Nos estamos refiriendo a los SSD en formato 2230, lo que quiere decir que únicamente miden 22 milímetros de ancho y 30 milímetros de largo. Estos son mucho más compactos que los SSD NVMe que solemos ver y que son compatibles con cualquier PC gaming o incluso con PS5 como son los que vienen en formato 2280. Pese a ello, también se conectan a través de un puerto M.2 como hemos dicho antes.

SSD vs. MicroSD

Cambiar el almacenamiento interno de Steam Deck no es la única forma que tenemos para tener más capacidad. La forma más sencilla y la que recomienda Valve pasa por hacernos con una microSD. Aquí, al igual que ocurre con Nintendo Switch o con la Asus ROG Ally, todo es muy sencillo, ya que solo tendremos que introducir la tarjeta por la ranura y la tendremos funcionando desde el primer minuto, algo que no ocurrirá con el SSD (puesto que tendremos que reinstalar el sistema operativo de la consola).

Habiendo esta opción, ¿merece la pena el cambio? La solución es bastante relativa y dependerá de a que le demos más importancia. Si priorizamos la rapidez y la comodidad, lo más lógico es que nos vayamos directamente a por una microSD. Ahora bien, la velocidad que ofrecen los SSD no tiene rival en las microSD. Estos almacenamientos, además, ofrecen mayor capacidad a menor precio por norma general.

El rendimiento del modelo, muy importante

Estos SSD 2230 difieren en tamaño del resto de formatos NVMe, pero a la hora de elegir modelo nos vamos a tener que fijar en las mismas cosas. Dicho de otra forma mucho más sencilla: no todos los SSD compatibles con Steam Deck nos van a ofrecer el mismo rendimiento. Aquí obviamente entra también en juego el factor presupuesto, ya que es muy probable que los que nos ofrezcan mayores velocidades sean también los más caros.

Cabe destacar que, al igual que ocurre con los otros SSD NVMe, aquí también podemos encontrar modelos tanto PCIe 3.0 como PCIe 4.0. Los segundos van a dar mucha más velocidad, aunque esta será menor que la que ofrecen los modelos en formato 2280.

La elección de capacidad depende de cada usuario

Al igual que el rendimiento, la capacidad es el otro factor clave a la hora de elegir un modelo en concreto. Muchos usuarios prefieren tener la mayor capacidad posible disponible en sus consolas, aunque esta no es necesariamente la mejor opción. Aquí van a entrar en juego muchos factores diferentes y por supuesto muchos de ellos son subjetivos.

El modelo con más almacenamiento de Steam Deck tiene 512 GB, así que este sería el tamaño mínimo que deberíamos buscar. Existen modelos de 1 TB con precios asequibles, aunque la opción de mayor capacidad ofrece 2 TB (con precios bastante elevados ahora mismo, claro).

Precio: ¿Merece la pena elegir la Steam Deck 64 GB y cambiar su almacenamiento?

Ya hemos hablado del cambio de almacenamiento y de los distintos factores a tener en cuenta, pero queda resolver la cuestión de si es un proceso que merece la pena. Hay que tener en cuenta que el modelo de 64 GB y el modelo de 512 GB se diferencian técnicamente solo en dos puntos (capacidad y tratamiento antirreflejos en la pantalla), pero la diferencia de precio que hay entre ambas es considerable (419 euros frente a los casi 700 que cuesta el modelo de 512 GB).

En ese sentido, y hablando en términos de presupuesto, sí que merece la pena comprar el modelo básico y actualizar su almacenamiento. Ojo, no estamos diciendo con ello que sea la mejor opción, ya que como hemos comentado se trata de un proceso que puede llegar a ser ciertamente peligroso y que cada usuario debe llevar a cabo asumiendo que existe un posible riesgo de romper algún componente.

Qué SSD 2230 para Steam Deck comprar

Corsair MP600 Mini

Pese a que este formato es bastante poco utilizado por los usuarios, hay varias marcas importantes dentro del gaming que tienen algunos modelos 2230. Ese es el caso de Corsair, cuyo MP600 Mini es posiblemente uno de los SSD más recomendados para instalarse en una Steam Deck.

Estamos ante una unidad que es PCIe 4.0, capaz de ofrecer velocidades de hasta 4.800 MB/s, tanto de escritura como de lectura. Con este SSD vamos a ver cómo nuestros juegos van a cargar muy rápido en nuestra consola, y además tendremos 1 TB para instalar un monto de ellos. Su precio en Amazon es de 122,98 euros.

Sabrent 2230 M.2

Otra opción que va muy en la línea del Corsair de arriba es este de la marca Sabrent. Este SSD NVMe también tiene 1 TB de capacidad, lo más recomendable si tenemos pensado instalar muchos juegos porque solemos llevarnos nuestra Steam Deck con nosotros de viaje.

En rendimiento alcanza cifras muy similares al MP600. Este SSD puede ofrecer hasta 4.750 MB/s de velocidad de lectura secuencial y hasta 4.300 MB/s de velocidad de escritura. Con él vamos a tener una de las opciones más rápidas de la lista, y su precio es un poco más bajo que el de Corsair: cuesta 119,99 euros.

Syoncon SC930

Si queremos cambiar el almacenamiento de nuestra Steam Deck, no queremos depender de una microSD y queremos gastar lo mínimo posible, este modelo de la marca Syoncon nos puede ir muy bien. Es la opción más económica de la lista, y lo es teniendo 512 GB. Nada mal.

Este modelo es PCIe 3.0, lo que se traduce en que va a ofrecer velocidades más bajas que los anteriores (aunque aun así muy superiores a una microSD). Es capaz de dar hasta 3.200 MB/s de velocidad de lectura y hasta 2.600 MB/s de velocidades escritura. Lo tenemos disponible por solo 59,99 euros.

Baititon M.2 2230

En la misma línea más económica que el anterior tenemos este SSD NVMe de la marca Baititon. Este es muy similar al anterior, y aunque es un poco más caro nos va a ofrecer el doble de capacidad, es decir, 1 TB para llenarlo de juegos de nuestra biblioteca de Steam.

También estamos ante un modelo que es PCIe 3.0, siendo sus velocidades máximas muy similares a las del anterior. Concretamente, es capaz de dar hasta 3.500 MB/s de lectura y hasta 2.500 MB/s de escritura. Si queremos 1 TB es una de las opciones más económicas que hay en Amazon, y es que su precio es de 78,99 euros.

Timetec M.2 2230

La última de las opciones que incluimos en esta lista es de la marca Timetec, y es otro SSD bastante interesante que reúne a un gran nivel capacidad y rendimiento. Esta misma marca tiene disponible un modelo algo más lento, pero sin duda por la diferencia de precio que hay entre ambos lo mejor que podemos hacer es quedarnos con él.

Es PCIe 4.0, siendo capaz de dar velocidades de hasta 5.100 MB/s de lectura y de hasta 4.600 MB/s de escritura. Este modelo nos va a ofrecer 1 TB de espacio, y su precio es muy atractivo: cuesta en Amazon 88,99 euros.

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Imágenes | Valve, Edgar Almeida en Unsplash, Corsair, Sabrent, Syoncon, Baititon, Kioxia, Timetec

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