Su iPhone se cayó desde más de 4.000 metros tras un accidente aéreo y, al recogerlo, comprueba que no tiene un rasguño y funciona a la perfección

Si has visto las noticias recientemente, seguramente te hayas enterado del percance que sufrió el vuelo 1282 de Alaska Airlines. Para desgracia de los pasajeros, la descompresión explosiva del tapón de una de las puertas provocó que esta saliera volando y, hasta que consiguieron aterrizar, el vehículo aéreo recorrió parte de su ruta con una puerta totalmente abierta. Por suerte, no hubo que lamentar ninguna pérdida humana, ya que los aviones modernos están preparados para evitar desgracias en este tipo de situaciones.

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Sin embargo, en las últimas horas ha ganado relevancia un curioso caso relacionado con este accidente. Como recoge el portal Ars Technica, durante el vuelo 1282 de Alaska Airlines varios objetos salieron volando, y uno de ellos fue el iPhone de un pasajero. Así, al caer de una distancia superior a los 4.000 metros, muchos pensarían que el móvil terminó destrozado. No obstante, nada más lejos de la realidad: el dispositivo de Apple está intacto y funciona a la perfección.

El segundo iPhone que cae desde más de 4.000 metros

Así, como señala el portal norteamericano en su publicación, el móvil fue encontrado por Seanathan Bates, un desarrollador de videojuegos. Este, sorprendentemente, se topó con el dispositivo “en modo avión y con media batería”, una situación a la que añadió que lo más increíble era que se encontraba “perfectamente intacto”. Al estar conectado en el avión, la presión provocó que el móvil saliera por los aires junto al cable de carga que, en esos momentos, tenía enchufado. Y, aunque este último no resistió, el iPhone sí continúa operativo después de caer 4.000 metros.

Según relatan los responsables de la investigación relacionada con el caso del vuelo de Alaska Airlines, este no es el único móvil que desapareció durante el incidente. A su vez, otro dispositivo apareció en el jardín de una persona, pero no hay datos sobre si dicho smartphone continúa operativo o no. Sea como fuere, es la segunda vez que un iPhone cae desde más de 4.000 metros de altura y sobrevive, ya que unos meses atrás pasó una situación similar con el teléfono de un paracaidista.

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Imagen principal de Seanathan Bates (X)