Marcos Yasif
Editor - Cine y TVPeriodista y apasionado de la industria del entretenimiento. He crecido con la ilusión de poder viajar por las estrellas como en Star Trek y salvar el mundo como Goku y Superman, dos pasiones que me han llevado a especializarme en cine y series de acción, ciencia ficción y superhéroes. Desde 2022 cuento en 3DJuegos todas las novedades de la pequeña y gran pantalla, con la intención de mantenerte al día con las historias que nos hacen soñar y escapar de la realidad, pero mi historia en la revista comenzó mucho años antes: en 2008.
La pasión de los muggles por Harry Potter es enorme. Basta con un vistazo a los datos de ventas de Hogwarts Legacy para darnos cuenta de cómo el mundo imaginado por J.K. Rowling sigue aún en máximos pese a haber pasado varios años desde el estreno de la última película de Warner Bros. Tanto es así que es normal encontrar decenas de actividades sobre la saga en el mundo real.
Algunas incluso con la capacidad suficiente como para convertirse en un reclamo turístico de primer orden para pequeñas poblaciones como es el caso de Grigny, al sur de Lyon, que desde 2017 lleva organizando un evento de congregación de cientos de fanáticos del mundo mágico de la escritora británica capaz de atraer a visitantes de toda Francia. Ahora, sin embargo, Warner Bros. les ha hecho pagar 10.000 euros para poder seguir organizando sus jornadas sin complicaciones.
Siempre de acuerdo a una información publicada por Le Parisien, y recogida por nuestros compañeros de JeuxVideo, el gobierno municipal y el estudio de cine han llegado a un acuerdo para regularizar la situación del Le marché du Petit Sorcier (El mercado del Pequeño Mago) y poder así seguir usando referencias de la franquicia sin miedo a hacer frente a cualquier querella de Warner Bros.
Un evento de gran aforo para un pequeño pueblo
El evento celebró su última edición este pasado domingo contando con un aforo máximo de 15.000 personas por motivos de seguridad y comodidad del visitantes —con entradas de entre 6 euros y 37 euros para familias enteras—, lo que es una barbaridad teniendo en cuenta que Grigny apenas tiene 9.500 habitantes censados. Los asistentes, disfrazados de magos en su mayoría, pudieron disfrutar de un mercadillo artesanal, talleres y otras actividades de ocio.
Se espera que en los próximos años, con la situación regularizada, el evento pueda seguir creciendo. Pero mientras, hace unos días se supo que Warner Bros. tiene que hacer frente a otra denuncia por una "varita mágica defectuosa" que, al parecer, habría provocado daños a un niño de tres años uno de sus ojos.
Imagen | Le marché du Petit Sorcier