Nadie pone en duda hoy que Robert Downey Jr. es Iron Man, pero muchos en Marvel se echaron las manos en la cabeza por contratar a "un adicto"

David Maisel, presidente de Marvel Studios en sus primeros años, recuerda cómo fue los orígenes de una de las sagas más exitosas de todos los tiempos

Marvel Iron Man
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Marcos Yasif

Editor - Cine y TV
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Marcos Yasif

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Soy el chico que te contará toda la actualidad en cine y televisión en 3DJuegos. Me apasiona la ciencia ficción, la fantasía, los superhéroes y las curiosidades cinéfilas, esas pequeñas historias entre bastidores de los directores y actores a los que llevamos siguiendo desde pequeños. ¿Mi saga favorita? Star Trek. ¿Mi personaje favorito? Superman, aunque últimamente un poco más John Wick. Una última cosa, prometo no aburrirte mucho en mis temas. LinkedIn

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Asegurar hoy en día que Robert Downey Jr. no es una elección perfecta para interpretar a Iron Man en la gran pantalla es considerado poco menos que una blasfemia por buena parte de los cientos de miles de fans del MCU. Pero su fichaje para interpretar al vengador acorazado generó muchas dudas en su momento, tanto en los seguidores (siempre expectantes) como en la propia Marvel.

Ha sido David Maisel, presidente fundador de Marvel Studios, quien en una reciente charla recogida por Variety ha contado cómo la compañía, por entonces aún independiente de The Walt Disney Company, se mostró reacia a reclutar a Downey Jr., dado el pasado que había tenido con el consumo de drogas.

"La junta pensó que estaba loco por poner el futuro de la compañía en manos de un adicto. Les ayudé a entender lo bueno que era para este papel. Todos confiábamos en que había superado sus problemas y se mantendría limpio"

Por aquel entonces, en Marvel manejaban también el nombre de Timothy Olyphant (El Marshal, The Mandalorian), pero tanto Maisel como Jon Favreau, escogido como director de la primera de Iron Man, hicieron presión para que Robert Downey Jr. se hiciera con el papel del multimillonario Tony Stark.

Que hubiera más dudas de las normal con su fichaje era lógico, teniendo en cuenta que ya por aquel entonces Maisel iba con un plan de hacer un universo cinematográfico, por lo que errar el tiro con su primer protagonista podía haber sido calamitoso. Así cuenta el ex-ejecutivo de Marvel Studios su plan.

"[En el verano de 2003] pensé: 'Oye, si puedo conseguir una película en la que tenga gran confianza, y cada película después de esa es una secuela o una cuasi-secuela, donde aparezcan los mismos personajes, entonces puede seguir así hasta la eternidad. Porque no hablamos de 30 películas nuevas, sino de una película con 29 secuelas. Lo que llamamos un universo"

Esa idea fue la base del UCM. Luego llegaron las reuniones con Marvel, entonces capitaneada por el controvertido "Ike" Perlmutter, la consecución de fondos, la venta a Disney, etc. Maisel dejó Marvel a comienzos de la década pasada.

Había más opciones para ser Iron Man

Recientemente, y volviendo a Iron Man, Kevin Feige recordó que hubo otra gran estrella en la que estaban interesados y que, de hecho, era su primera opción. En concreto se refiere a Clive Owen, pero el actor británico rechazó el papel. "Teníamos que encontrar la combinación perfecta de corazón, fuerza y carisma. Al ser nuestra primera película, las apuestas no podían ser más altas. El éxito de la película y el futuro de todo nuestro estudio dependían de esta única persona".

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