Steven Spielberg es un genio. Da igual que haga Ready Player One que Parque Jurásico, todas tienen un encanto propio del director. A este conocido cineasta le hemos visto toda clase de temáticas, incluso películas bélicas como la majestuosa Salvar al Soldado Ryan, pero donde siempre brilla es en la ciencia ficción. Hoy ha llegado el momento de hablar de unas de sus obras más interesantes. Se trata ni más ni menos que de Minority Report, una películas futurista que destaca por su verosimilitud, buen guion y por adelantarse más de 20 años al futuro.
En plena expansión de la temática cyberpunk, es un buen momento para bucear en películas de culto y esta lo es. No en vano está considerada como una de las películas más realistas y creíbles dentro del género. Además, podemos verla de forma sencilla y cómoda a través de la plataforma Sky Showtime.
¿Cuál es el mensaje de Minority Report?
En una sociedad situada en el año 2054, la tecnología ha evolucionado lo suficiente como para que PreCrime, un departamento de la policía, sea capaz de detener a los delincuentes antes de que hayan cometido tales actos. Esto es así gracias a la ayuda de "los precog", humanos con la habilidad de anticipar el futuro.
Dentro de toda esta situación, John Anderton es uno de los mejores investigadores de la facción, capaz de explorar en las predicciones y evitar una gran cantidad de tragedias. Sin embargo, todo cambia cuando en una de esos pronósticos él es acusado de asesinato sin tener ni idea de porqué. Así, el determinismo se enfrenta al libre albedrío en una historia atrapante, tensa y llena de elementos futuristas.
Minority Report puede ser considerada como una fusión noir-futurista en la que la sociedad es expuesta en su intento por ser moralmente correcta. Así, se plantea un debate moral para el espectador en el que el destino está presente en todo momento. Con Tom Cruise como protagonista, pronto conseguiremos empatizar con él, así como el drama que le rodea a él y su familia. ¿Hay que tomarse la justicia por nuestra mano? Es una película que constantemente te estará generando preguntas y toma de decisiones. Al elenco se le incorporaron otros grandes intérpretes como Colin Farrell o Samantha Morton.
Una de las principales bazas de esta películas son los diálogos, las reflexiones, (el doblaje en castellano también es magnífico), mientras que vemos como el protagonista se va sumergiendo en los bajos fondos de una sociedad distópica que parecía idílica y segura, y no lo es. A lo largo de este viaje, tendremos contacto con cómo se supone que será el mundo en el año 2054, aunque, como suele pasar, la realidad supera a la ficción, y actualmente ya encontramos mucha de la tecnología expuesta en la cinta. Desde publicidad lumínica y personalizada, escáneres táctiles, controles de retina o mochilas propulsoras, todo está presente ya en nuestra sociedad, asustando incluso pensar a dónde llegaremos en el año de la película. En la primera escena se muestra la tecnología principal: las pantallas táctiles. Es uno de los signos característicos de ella, apareciendo también en diferentes portadas. En su momento, esto se veía como algo excepcional, impensable y ahora contamos con este tipo de avance.
Esto es curioso, ya que debido a su exhaustivo trabajo por mostrar verosimilitud y realismo, es de las pocas películas que muestran un futuro y se quedan cortos. ¿En cuantos otros lugares hemos podido ver el año 2023 con coches voladores? Esto no ocurre aquí, pero sí que podemos ver cómo toda esta tecnología ha sido normalizada e implementada por las personas, observando en muchos casos sus efectos aberrantes sobre ellos desde fuera. De hecho, Spielberg fue claro con el tono de su cinta, diciéndole al director de fotografía, Janusz Kaminski, que quería que hicieran "la película más fea y sucia de nuestras carreras".
En ese sentido, a mí me recuerda mucho a Cyberpunk 2077, por lo que creo que es una recomendación segura para los amantes de los videojuegos. Encontramos un protagonista solitario en busca de venganza, una sociedad que abusa de drogas y tecnología, clases muy diferenciadas, sobreexposición por las calles, miseria en contraposición al avance tecnológico y, sobre todo, un tono muy realista dentro de lo que debería ser el futurismo. El doctor que opera a John Anderton y le cambia los ojos fácilmente podría ser un Matasanos de los que te croman en un lugar de mala muerte. Medicinas avanzadas por un tubo y a seguir contra la corporación que nos pisa los talones.
Con todo ello y pese a su recaudación de 358,4 millones de dólares, esta película parece haber pasado por el tiempo un poco desapercibida, pero hay muchos que todavía la recuerdan. Tanto que podemos encontrar una continuación en formato serie, no muy conocida, pero que ahí está.
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En el caso de que no la hayáis visto o de que tengáis ganas de nuevo, sabed que podéis hacerlo de forma sencilla a través de la plataforma de streaming Sky Showtime . Además, para los amantes del formato físico, podéis encontrarla en a través de Amazon a un precio bastante asequible.