La serie Might & Magic entra en un nuevo territorio con Dark Messiah, un juego de acción en primera persona con toques rpg y sigilo que usa el poderoso y vistoso motor Source de Half-Life 2.
Los que ya conozcan las bondades del motor Source sabrán que el resultado es espectacular, aún a día de hoy, y Dark Messiah hace uso intensivo de todas las posibilidades del mismo explotándolas hasta el límite, para sumergirnos en un mundo fantástico-medieval habitado por orcos, goblins, cíclopes, dragones y caballeros oscuros.
Los niveles del modo de un jugador fueron creados por Arkane Studios, la desarrolladora francesa responsable del interesante y prometedor Arx Fatalis. Dark Messiah es su intento de llevar a cabo lo que dicho título pudo ser pero no fue. Aunque recuerda a Oblivion en muchos momentos, no nos encontramos ante un RPG en el sentido de que no dispondremos de un mundo por explorar. En lugar de eso, el juego esencialmente consiste en avanzar por una serie de “raíles” que nos permiten avanzar en la historia como si de una sucesión de misiones se tratase, enfrentándonos ocasionalmente a enemigos finales. Aunque, hay que resaltar que, en determinados momentos se nos ofrecerá una sensación ilusoria de libertad, permitiéndonos explorar ciertas zonas un poco a nuestro aire.
Escoge tu disciplina
No obstante, y al igual que ocurre en los juegos de rol, cuando alcancemos cierto nivel de experiencia, obtendremos puntos que podremos utilizar para mejorar nuestras habilidades. Estas habilidades son las que potencian el elemento RPG del título. ¿Optarás por desarrollar habilidades mágicas? ¿Guardarás tus puntos para mejorar tu capacidad de sigilo y poder acechar a tus enemigos sin ser escuchados? ¿O prefieres potenciar tu capacidad de combate?.
Veremos las diferentes habilidades de que disponemos mediante un árbol ramificado. Cada rama tiene otras ramas a su vez, de forma que para llegar a las ramas inferiores hay que mejorar las superiores. Por tanto podemos ser un experto en alguna disciplina, o bien mejorar un poco todo en general, aunque de esta última forma lógicamente no seremos buenos en nada. Entre las diferentes habilidades a mejorar tenemos el combate, el combate a distancia (con arco), el sigilo, la resistencia, nuestra capacidad mágica…
Libertad ilusoria
Más allá de esto debes tener en cuenta que cada encuentro puede plantear múltiples soluciones, como utilizar elementos del entorno contra nuestros enemigos, acecharlos para acabar con ellos de un golpe mortífero o simplemente esquivándolos sin enfrentarnos a ellos.
Ni por asomo es un sistema tan robusto como el utilizado en la obra maestra Deus Ex, que claramente ha sido fuente de inspiración de este Dark Messiah, pero evita que el juego resulte excesivamente lineal y predecible. Se respira una gran libertad en los enfrentamientos, que tal como comentaremos más adelante, son probablemente los más logrados hasta la fecha, bastante mejor que los de Oblivion.
Quizá el juego no se ha aprovechado al máximo de sus posibilidades en todos los aspectos; muchos escenarios lucen de forma similar, dando la impresión de haberlos visitado constantemente y tampoco existe un elevado número de enemigos distintos.
La historia tampoco es un prodigio de originalidad, pero está bien llevada, logra transmitir dramatismo y cuenta con giros interesantes, así como varios finales alternativos. La mayoría de los puzzles consisten en lo siguiente:
a) Pensar como llegar a algún sitio en principio inaccesible
b) Buscar una palanca de la que tirar que nos abra una salida para poder continuar.
Las fases finales contienen muchos momentos donde vagaremos sin rumbo a través de grandes áreas con múltiples caminos, muchos de ellos con el objetivo de confundirnos y perdernos. El tiempo de juego está estimado en torno a 10 – 12 horas desde que empiezas.
Cargas interminables
Si hay algo engorroso que caracteriza el motor Source son las eternas y constantes pantallas de carga a las que nos vemos sometidos, pantallas que, por desgracia, continuaremos viendo aquí también. Y es que muchas veces nos dará hasta tiempo de hacernos una paellita en toda regla mientras esperamos que se cargue la fase en cuestión, trayendo a nuestra mente con nostalgia aquellos mágicos momentos vividos con nuestro ZX Spectrum. No obstante estoy exagerando, aunque si es cierto que los tiempos de carga son bastante mayores que en la mayoría de los juegos, si bien es también cierto que el resultado merece la pena: grandes y fastuosos niveles mágicamente iluminados por un fantástico HDR.
Un motor de combate nunca visto
Los modelos de los personajes y sus animaciones lucen estupendas, pero lo mejor del juego es el sistema de combate. Y es que es tremendamente divertido, adictivo e intuitivo lo que han conseguido los chicos de Arkane. Aunque ve preparándote para pulsar el botón de quickloading (carga rápida) porque los enemigos de este juego no son convencionales y te supondrán un reto. Es terriblemente satisfactorio cortar a un zombie por la mitad o acabar espada con espada contra un orco, situación que requerirá que pulses rápidamente el botón de ataque para salir airoso, no sin olvidarnos de los fatalities que podrás hacer cuando te encuentres en el modo de adrenalina. Nos enfrentaremos además a enemigos que podrán envenenarnos, como arañas o zombies enfermos, no obstante se agradecería que su número fuese menor, debido a que no dispondremos de tantos antídotos como nos gustaría.
Escenarios muy interactivos
En cuanto a los escenarios, son tremendamente interactivos. Podemos coger todo tipo de objetos como cajas o barriles, para lanzarlos a nuestros enemigos, lanzarlos por una escalera para derribar a nuestros perseguidores, etc. Además de poder utilizar el entorno para crear estrategias, como lanzar una flecha contra un pilar y derribar todos los barriles de la parte superior por ejemplo.
Algo sencillo y realmente grande, es que disponemos de la posibilidad de dar patadas, una virtud que en principio podría parecer irrisoria, pero que hace al juego diferente, ya que podemos acercarnos sigilosamente a un enemigo y propinarle un puntapié desde un precipicio... o golpearle para que caiga por las escaleras, o empujarle al fuego, incluso empujarle contra unos pinchos en la pared. En una trifulca nos veremos pateando al adversario y después intentar golpearle, pero ojo, ellos harán lo mismo y nos derribarán en muchas ocasiones.
Una cosa que me ha llamado intensamente la atención es que los combates son realmente únicos: podrás derribar a tus enemigos que quedarán un buen rato en el suelo sin levantarse, pero puede que no hayan muerto y se levanten de nuevo, así puede pasarte una y otra vez, y además cuando se encuentren muy debilitados podrán arrastrarse buscando ayuda. Es algo digno de ver, dotando a los combates de un gran dinamismo nunca antes visto.
Dispondremos de una interesante variedad de tipos de armas, incluidas poderosas armas mágicas que estás obligado a encontrar una vez que tu personaje tiene la capacidad mágica adecuada para utilizarlas. Incluso si eres minucioso en tu búsqueda, podrás encontrar las distintas partes de un arma para forjar tu propia espada en una de las herrerías del juego. El sistema de magia no ha sido potenciado tanto como el combate con armas, y tampoco existen demasiadas opciones para mejorar nuestro sigilo.
Apartado técnico impecable
El apartado técnico es sin duda sobresaliente. El motor Source ha sido llevado hasta el extremo, mejorado muchísimo visualmente para recrear toda una serie de escenarios de estilo fantástico ambientados en el mundo medieval de Might & Magic.
El diseño de las mazmorras, ciudades, espacios abiertos, cavernas, etc., está hecho con mimo y cuidado, con multitud de pequeños detalles. El uso intensivo del HDR y de los juegos de luces crean unas atmósferas al más alto nivel visual actual. El reflejo de las armaduras es escalofriantemente, bueno al igual que los efectos visuales que provocan los hechizos y sortilegios. Todo aderezado con desmembramientos y mucha sangre en los combates, además de contar con una serie de efectos gráficos peculiares para ciertos estados: cuando nos encontremos a punto de morir, la pantalla estará teñida de rojo.
En cuanto a la optimización, es cierto que no es la llevada a cabo por Half-Life 2, y hará falta un equipo bastante potente para jugarlo al máximo, con una gráfica 7800 GT o similar.
Brillante Multijugador
Ubisoft ha acertado al dividir la realización de los modos un jugador y multijugador, entre equipos de desarrollo diferentes, tal como hizo con el exitoso Ghost Recon Advaced Warfighter y con las tres últimas entregas de Splinter Cell. De esta forma la desarrolladora británica Kuju se encargó de la parte online de Dark Messiah, con resultados excelentes.
El modo Deathmatch resulta en este juego de lo más entretenido debido a las diferentes clases de personaje existentes. Pero sin duda, lo mejor de todo es el modo Cruzada, que enfrenta a dos equipos el uno contra el otro, ambos con objetivos de captura clásicos.
A lo largo de los mapas iremos ganando experiencia y pudiendo mejorar habilidades, al igual que ocurre en el modo de un jugador, logrando de esta forma especializarnos en algún tipo de disciplina. Algunas habilidades pueden parecer poco útiles, pero si nos organizamos bien y asignamos una labor a cada miembro del equipo, las tácticas que podemos elaborar pueden ser sensacionales en cuanto a coordinación.
Por desgracia, no es oro todo lo que reluce, no disponemos de demasiados mapas para jugar online, existen algunos bugs bastante molestos y el combate a distancia con arco no es muy efectivo. Por otra parte, el combate mano a mano requiere de bastante destreza, no está hecho para principiantes, ya que en el fragor de la lucha se nos escaparán más de uno y más de dos golpes a otros personajes.
En definitiva, esto dota a Dark Messiah de mucha más vida y profundidad, y hace que este juego sea considerado a partir de este momento como único en su género, y sin duda nos encontramos ante uno de los grandes del año.
Perfecto doblaje a nuestro idioma
Llegados a este punto debemos hacer un inciso para poner por las nubes el excelente doblaje con el que nos regala los oídos Dark Messiah. Sí señores, aún existe luz al final del túnel, y compañías capaces de ofrecernos un juego bordado en todos los aspectos y en nuestro idioma, con un doblaje profesional. Por último la música es soberbia y épica, interpretada por la Orquesta Sinfónica de Praga.
Dark Messiah of Might & Magic es uno de los títulos más frescos de este 2006. Gráficos impactantes, combates nunca vistos, un doblaje a nuestro idiomas excelente y una banda sonora de cine, ambientan un mundo de fantasía redondo, para un shooter RPG en primera persona recomendadísimo.
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