Coronio / 25 de marzo de 2020 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

10 Inolvidable

Gran Juego, altisimamente recomendable
Tiene una fama muy inmerecida este juego. Es fácil que los virgos mueran, se enojen y la opción rapida es hecharle la culpa al juego, y quizá por el downgrade que recibió en su momento. Aunque yo lo celebro, un jugador con economía más pobre puede acceder a este juegazo como fue mi caso.

No es para niños. No hay GPS, o una tecla que brille en un menú con la descripción de una misión y su recompensa. Tampoco hay un marcador que te oriente y te diga a donde ir. Solo eres tú explorando ese nuevo mundo, que veces esta tan oscuro que se hace muy recomendable utilizar una antorcha.
Los niños suelen detestar y cerrar el juego ante este panorama. Los desarrolladores en ese momento llenaron el mercado de juegos que te ponían en el papel  de un marginado, o un don nadie, o enviaban al jugador a la edad antigua, pero siempre con un GPS cada vez más avanzado, con zoom, con marcadores de ruta, misiones, tiendas, incluso los enemigos.
El juego tiene misiones e historia, pero solo lo sabrás si te detienes a interactuar con los personajes. Por cierto estos personajes no son inmortales e intocables, y tampoco brillan o algo así, simplemente están ahí descansando o contemplando el paso del tiempo. ¡¡COMO SI ESTUVIERAN EN CUARENTENA!!
No es un mundo abierto, pero tampoco es un pasillo como algunos dan a entender. Hay bifurcaciones o ramificaciones como prefieran, eso tiene que quedar claro. Así que si algun jefe te impide avanzar, puedes fortalecerte en otro sitio. 

Las almas que obtienes sirven para subir de nivel con la Heraldo Esmeralda y comerciar con los otros personajes. Pero si no las usas y te matan, quedarán en el suelo con una marca y tendrás que volver al sitio para recuperarlas. También tu nivel de maldición subira robandote puntos de  vida y tendrás apariencia de zombi. Que podrás remover usando las efigies humanas.

Tiene una hoja de personaje y cada nivel te da un punto, por lo que debes gestionarlo sabiamente, más adelante hay un objeto que te permite reubicar los atributos. Habrá un inventario en la hoguera y el personaje tendrá un inventario para cada tipo de objeto y un inventario de equipo, para el armamento, flechas y virotes, y objetos consumibles. En la interfaz tendremos acceso rápido, a las armas, objetos consumibles y habilidades que aprenda en la hoguera, para usarlo durante los combates.
El armamento añadira peso al personaje, que mejora o empeora la habilidad de rodar y la recuperación de estamina.
Podremos equipar milagros, magias, piromancias y maleficios en la hoguera, si es que las encontramos explorando, compandolas a los NPC, o mejorando los pactos (PvP y cooperativo) y cumplimos los requisitos. Estás son las "habilidades especiales" por así decirlo, ya que no dispondremos de un menú con un árbol de habilidades.
Pero el atributo principal que te permita vencer en los combates es tu propia habilidad para la lucha y supervivencia. En la red hay individuos que terminan el juego "sin recibir daño" o "en nivel 1".
Es muy recomendable mejorar la estadística "Agilidad" para mejorar la habilidad de rodar y usar más rápido los consumibles.

Es muy agradable mejorar la estética del personaje y en eso Dark Soul 2 cumple más o menos bien. Lanzar milagros y esos ataques de relámpagos son lo mejor del juego.
El mundo logra muy bien la sensación de abandono y olvido, cosa que también se nota en el armamento y tambien en muchos enemigos, que parecen ser una sombra de lo que alguna vez fueron. 

El sonido acompaña perfectamente para mejorar la inmersión, aunque la música puede generar nerviosismo en el jugador, en el peor momento, luchando contra los jefes.

Resumiendo, su buscas un juego que no te lleve de la mano con un GPS, donde avanzas según tu habilidad superando zonas y jefes y exploras sus zonas para buscar el mejor equipo. Un juego en el que tu personaje sube de 1 punto por nivel y tú debes ir a conocer su historia, este sin duda es tu juego.

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Muchos sugieren empezar por el Dark Soul 3, supongo por qué el uso de energía está facilitado y al minuto 1 el personaje golpea y esquiva muy rápido. Pero si tú economía solo te permite jugar Fortnite, PUBG y Dota El Dark Soul 2 es tu juego, golpeas rápido pero esquivar es más difícil (puedes subir la agilidad para hacerla más fácil) y finalmente el 1, donde su diseño de niveles puede ser exasperante y esquivar es más fácil pero un golpe mal hecho te deja vendido.

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El mundo de Dark Soul usa en gran medida, símbolos del mundo antiguo como El Fuego, Los Dioses, Dragones, Heroes, La Oscuridad, La madre o el Abismo. La idea tradicional del tiempo ciclico, Era de los Dioses o Edad del Fuego, donde gobiernan los Dioses que se va degradando hasta llegar a la Edad Oscura, donde las masas toman el poder. Un personaje llamado Felkin  dirá claramente "la oscuridad es nuestra madre" lo que no deja lugar a dudas. Los diseñadores saben claramente de lo que hablan, cuando hacen alusión a estos temas. Sin embargo añadieron un marcado tono de fatalidad y determinismo al advenimiento de la edad oscura, como algo "mecánicamente" inevitable. En esa dirección apuntan las interpretaciones más conocidas del mundo Soul y ,quizás sin quererlo, cierto moralismo a la idea de que prolongar la edad del fuego es algo malo ya que de alguna manera prolonga la maldición, cuando en Dark Soul 3 el llamado "final oscuro" tampoco resuelve la maldición.
Aquí nos encontramos con una confusión de las ideas pre-modernas, el Fuego simbolizan el ser, el cosmos, aquello que "Es", algo acabado y perfecto, y la oscuridad aquello que es informe e imperfecto, el caos, representa algo de lo que carezco. Una interpretación mejorada de estas ideas habría dado lugar a una saga realmente legendaria, muy por encima de todas las ocurrencias y modas del mundo del jueguito.

Peddro19 / 21 de enero de 2019 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

8 Muy Bueno

Una reseña más - Dark Souls II.
Dark Souls II fue publicado en el año 2014, y con su lanzamiento, la hoy famosa y renombrada saga de From Software comenzaba a pisar un poco más fuerte en la industria de los videojuegos, luego de una primera entrega cuya propuesta sorprendió a la comunidad de jugadores debido a, sobre todo, su dificultad.
Sin embargo, el éxito de la trilogía, que explotó en 2016 con la llegada de su último exponente, verdaderamente radica en el planteamiento y ejecución de todas sus mecánicas, entre las cuales se encuentra un elevado nivel de reto, que logran una jugabilidad cargada de posibilidades y muy divertida. From Software siempre supo llevar correctamente a cabo esta fórmula para darle un sello de calidad a sus obras, aunque en algunos títulos lo ha hecho con más esplendor que en otros.
En este análisis, daré mi opinión acerca del desafiante Dark Souls II, perteneciente al género de los RPG, que tuvo la difícil tarea de estar a la altura de su predecesor lanzado en 2012, Dark Souls, que hoy ya se ha convertido en todo un clásico moderno de los videojuegos.

La trama de Dark Souls II sigue la línea de la de Dark Souls, y es uno de los atractivos más románticos tanto del título que hoy nos ocupa, como de la saga en general, debido a la gran mitología creada a su alrededor.
En mi opinión, la manera en la que Dark Souls II nos cuenta su historia, ambientada en una época medieval repleta de fantasía, es muy original ya que solo en los videojuegos podremos ver una narrativa de este estilo; aunque únicamente From Software puede hacerla de una forma tan elegante.
Al comienzo de la experiencia veremos el prólogo, que vagamente nos pondrá en situación, pero la peculiaridad de este aspecto radica en que, luego de esa pequeña cinemática introductoria, la narrativa se desenvolverá a través del diseño artístico de los escenarios, destruidos y visiblemente aplastados por una inconmensurable penuria, del estado de los humanos consumidos por la maldición culpable de tal decadencia, de la descripción de los objetos que recojamos y que nos hablarán, por ejemplo, del esplendoroso pasado de Drangleic (reino en el que se desarrolla la acción), y de lo que algunos pocos desgraciados nos digan. Dark Souls II no le cuenta explícitamente su historia al jugador, sino que lo invita a descubrirla y experimentarla por sí mismo, uniendo los puntos sueltos, con una delicadeza cautivante y propia de los maestros del medio; ya que, pese a su particular la narrativa, la trama es genial.
A su vez, esta necesaria exploración y apreciación de los escenarios para comprender el argumento puede pasar desapercibida para un jugador que no le de importancia, y aun así, este podría superar Dark Souls II sin enterarse, ni siquiera, de cuál fue su objetivo.
Por otro lado, las escasas ocasiones que tendremos para interactuar con otros personajes que mantengan su cordura, serán oportunidades para desarrollar la subtrama que les corresponda. En mi opinión, tales historias no generan demasiado interés, mas sí colaboran al canon de la saga.
Sin embargo, aunque podamos dialogar con estos individuos, ellos únicamente nos harán saber de sus desventuras, y de la desesperación que les genera no poder evitar que, en un momento u otro, serán alcanzados por la maldición, cosa que nos hará sentir desamparados ante los múltiples peligros que nos rodean.
Todos estos matices, consiguen generar, con muchísimo éxito, una atmósfera de auténtica y palpable soledad, que funciona como el principal conector entre la historia y la jugabilidad de Dark Souls II.
En fin... creo que el encanto de la trama de la presente obra reside en que, aún tras haber finiquitado la campaña, el usuario puede seguir descubriéndola por medio de la exploración, permitiéndole tomar conocimiento de aquellos pequeños detalles que expanden su profundidad. Y es que, aunque no lo parezca, en la saga Dark Souls todo tiene un por qué, y vale la pena averiguarlo.

La jugabilidad es el punto más fuerte de Dark Souls II, y también el aspecto que ha hecho que esta saga sea conocida por su dificultad, aunque, desde ya debo aclarar, no es para tanto.
Como he dicho en la introducción, estamos ante un título perteneciente al género de los RPG, permitiéndonos crear nuestro propio personaje y elegir sus habilidades. La experiencia cambiará abruptamente si la afrontamos como un guerrero, mago, o piromántico (etcétera), desde los ataques que realicemos hasta nuestro equipamiento y otras innumerables variables, añadiendo así una tremenda profundidad a la jugabilidad, e invitando al usuario a superar la campaña en múltiples ocasiones con diferentes clases.
De todos modos, aquel que haya comenzado como un bandido puede terminar, perfectamente, como un caballero o como un guerrero con dotes de clérigo. Dark Souls II nos permite hacer lo que queramos con nuestro personaje, y la sensación de que este va progresando y volviéndose más poderoso a cada paso que da está muy bien conseguida.
Sin embargo, no todo es color de rosas. Entre los nuevos atributos disponibles para potenciar al protagonista se encuentra la adaptabilidad, que representa un auténtico despropósito. Esta será una cualidad que deberemos aumentar para, por ejemplo, ser más rápidos al curarnos, o rodar correctamente por el piso para esquivar los ataques del enemigo, independientemente de nuestra habilidad.
Tal implementación es maligna porque corta el ritmo de la campaña, impidiéndole al jugador subir todos aquellos atributos que quiera para la evolución de su personaje, y deberá dedicarle algunos puntos de mejora a una cualidad que perjudica su avance.
Cambiando de tema, es posible que la principal virtud de esta obra sea que la mayoría de sus elementos jugables representan importantes mecánicas que suelen relacionarse, y cuyo funcionamiento se siente muy orgánico con el resto del conjunto; pero creo que la dificultad es el eje central de todo el sistema, y la fórmula para lograrla con la maestría característica de la saga sigue vigente, aunque no en toda su magnificencia.
En Dark Souls II, la muerte representa un verdadero obstáculo para el jugador. Al morir, perderemos nuestras almas, la moneda de cambio del videojuego y que nos permitirá subir de nivel, y tendremos que volver al sitio del conflicto para recuperarlas, partiendo desde el último punto de control que hayamos desbloqueado como parte de la exploración del escenario, y superando, nuevamente, cada peligro presente en el camino. De fracasar en el intento extraviaremos definitivamente las almas, y habrá que comenzar a recolectarlas, otra vez, desde cero.
Si bien esta mecánica puede parecer demasiado hostil, no lo es tanto. Su verdadera razón es incentivar al usuario a que juegue con cabeza, pensando meticulosamente sus movimientos dada la tensión, lo que, al fin y al cabo, le permitirá apreciar aún más la obra.
De todos modos, si nos unimos a un pacto o seguimos las misiones secundarias de algunos personajes, podremos convocar aliados controlados por la CPU para que nos ayuden en el combate contra algunos jefes finales, implementación que no desentona en el planteamiento de Dark Souls II.
Un apartado de trascendental importancia para cualquier Dark Souls es el diseño de niveles. En el presente título no tendremos mapas que nos indiquen a dónde ir, sino que lo sabremos conforme vayamos explorando zonas llenas de secretos, caminos bifurcados y que, generalmente, terminarán en una batalla contra un jefazo para dar lugar a la siguiente.
En comparación a los altísimos estándares de la franquicia, el diseño de niveles de Dark Souls II, si bien es aceptable, deja muchísimo qué desear. Los escenarios son bastante lineales y carentes de inspiración, no están totalmente conectados y las transiciones entre uno y otro son pésimas, además de que en muchas ocasiones, para lograr una elevada dificultad, el videojuego nos pondrá múltiples enemigos en nuestro camino a los que nos enfrentaremos simultáneamente, en lugar de colocarlos de forma estratégica sobre el entorno. Todas estas apreciaciones son especialmente rimbombantes en Dark Souls II porque, tanto en su predecesor como en su sucesor, tales detalles representan virtudes.
Otro punto que considero negativo y, sin lugar a dudas, lo peor del videojuego que hoy nos ocupa, son prácticamente todos sus jefazos. Nuevamente, es propicio aclarar que estamos ante un exponente de una saga que se caracteriza por sus difíciles, ingeniosos e imponentes jefes finales.
Desgraciadamente, los jefazos en Dark Souls II lejos están de esa superlativa descripción: son todo un fiasco. Aunque hay bastantes, inclusive opcionales, la mayoría de ellos tienen un patrón de movimientos tremendamente parecido, y pueden ser derrotados de una manera tan simple como lo es girando a su alrededor con el escudo en alto. La verdad es que esto me decepcionó muchísimo, porque tales adversarios, apartando escasas excepciones, son paupérrimos no solo para los estandartes de la trilogía, sino en general.
Sin embargo, no quiero hacer ver a Dark Souls II como un mal videojuego, porque no lo es ni está cerca de serlo. De hecho, a mí me gustó y planeo pasármelo una segunda vez, porque las razones para rejugarlo abundan.
Al igual que los otros dos títulos de la franquicia, Dark Souls II se destaca por combinar muy naturalmente una profunda jugabilidad y una interesante historia sin agobiar al jugador y permitiéndole marcar, en todo momento, el ritmo de la experiencia.
Más allá de ciertos detalles que entorpecen al conjunto, algunos groseros, el presente título mantiene la esencia de la saga a la que pertenece: es desafiante y propone un sin fin de opciones jugables al usuario, el combate resulta divertidísimo, más o menos rápido y no pierde su toque estratégico, la exploración del entorno se ve extremadamente recompensada y, en definitiva, podríamos pasar horas y horas en Drangleic sin apenas darnos cuenta.

El aspecto técnico de Dark Souls II, si bien sus gráficos están llevados correctamente a cabo y hacen que el videojuego se vea muy bien, pasa primordialmente por el diseño artístico y la banda sonora, de los cuales hay bastantes puntos por analizar.
Lo que más me llama la atención, sin lugar a dudas, es el diseño artístico de los escenarios. Muchos de ellos se ven estupendamente bien y contienen una increíble cantidad de detalles, además de que hay algunas vistas que, francamente, dejarán boquiabierto al jugador, como lo es la entrada al Castillo de Drangleic.
Sin embargo, el mundo de Dark Souls II es totalmente incoherente. Aunque esto no afecta a la jugabilidad, sí resulta algo muy llamativo y prácticamente ineludible de darnos cuenta mientras avanzamos en la historia.
El resultado de que haya habido dos equipos diferentes desarrollando los niveles del presente título, ha sido que pasemos de valles secos y sin presencia alguna de volcanes, a torreones repletos de lava, cosa que, evidentemente, es absurda. Además, las transiciones entre estos niveles siempre se realizan a través de un pasillo; la manera más sencilla e indiscreta de unir dos entornos que nada tienen que ver.
Refiriéndonos al diseño artístico de los jefazos, nuevamente, no están a la altura. Aunque hay algunos excelentes, la mayoría son humanoides o caballeros gigantes cuya apariencia no le genera absolutamente nada al usuario, y menos cuando este se da cuenta de que no representan ningún reto.
Afortunadamente, el dibujado de los enemigos comunes y de las armaduras es de altísima calidad. La estética de nuestros oponentes hará que sean visualmente muy variados, mientras que las armaduras seguirán desprendiendo ese carisma propio de la saga Dark Souls.
Por su parte, las animaciones de Dark Souls II me parecieron brillantes. Los patrones de movimiento a realizar con cada arma son vistosos, variados, fluidos y un poco más rápidos que en su predecesor, agilizando el combate, por lo que en este apartado se conservan las virtudes del primer Dark Souls.
El siguiente apartado a analizar de este aspecto, y muy importante, como ya he dicho es la banda sonora y los efectos de audio dentro de Dark Souls II.
Es sabido que, en toda la saga, durante las batallas contra jefazos y en momentos muy específicos de la campaña, la banda sonora hará su apoteósico acto presencia. En Dark Souls II, los temas que componen la musicalización sirven para sumergirnos aún más en la atmósfera de tensión que supone una batalla contra un jefe final, pero ninguno de ellos me parece memorable. De todos modos, no tienen por qué serlo, dado que cumplen su objetivo a la perfección.
Por otro lado, los efectos de audio son correctos. Siempre podremos prever desde dónde se nos aproxima un adversario con tan solo escuchar sus pasos, por lo que la información sonora que el presente videojuego le trasmite al jugador es muy efectiva, y lo ayudará en el transcurso de la aventura.
A fin de cuentas, el aspecto técnico de Dark Souls II es muy bueno, pero en comparación a lo que podría llegar a ser, y que vimos en Dark Souls, es más bien regular. De todos modos, estos detalles, al fin y al cabo, no inciden en una campaña que, repito, es muy divertida.
Por último, cabe destacar que, en PC, Dark Souls II cuenta con una correcta optimización, yendo a 60fps constantes.

A modo de conclusión, Dark Souls II es un gran videojuego, pero sufre por estar en el medio de Dark Souls y Dark Souls III, ambos de los mejores títulos que sus generaciones han visto.
Sin embargo, más allá de esta comparativa, creo que todos deberían jugar a la presente obra. Dark Souls II es difícil, no tanto como muchísimas personas dicen, pero no por ello deja de ser justo para con el jugador. La sensación de superar la campaña, como en todos los videojuegos de este estilo, o del simple hecho de explorar los escenarios, es muy gratificante.
Estamos ante un título que mantiene la esencia única de la saga Dark Souls, y con eso debería bastar para considerarlo como un buen producto. La mayoría de sus mecánicas funcionan perfectamente entre sí, y dan lugar a múltiples posibilidades para que el jugador experimente y se divierta haciéndolo. Además, la historia resulta interesante, y es un placer observar cómo su narrativa está perfectamente integrada con la jugabilidad.
Recomiendo Dark Souls II a todo el mundo... mejor dicho: recomiendo cualquier Dark Souls a todo el mundo. Es una experiencia que todo amante del medio debería darse el lujo de conocer.

DHAZTAN / 17 de julio de 2018 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

9,5 Imprescindible

Esto es dark souls!! 
Primero que todo, este juego no es para niños, si estas jugando dark souls pensando que es assassins creed o skyrim, te equivocas, esta saga te hace crecer como jugador. Olvídate de jugabilidad sencilla, de curarte cuando te de la gana, incluso de correr, ya que aquí todo se penaliza con la muerte. Si no estás acostumbrado a morir, aléjate del juego, no culpes a la empresa ni engañes a la gente, haciendo análisis que nada aportan y sólo reflejan el que no supiste jugar, y el que no te informaste de que trataba el juego.
Este es un análisis de una persona con más de 30 personajes, y más de 300 horas de juego  y que a día de hoy aún sigue viciado al mismo, con esta premisa paso a hacer el análisis:

GRÁFICOS: no son los mejores, y a quien le importan. Si en verdad amas jugar títulos con contenido,  los gráficos no influyen en nada.

SONIDO: no es el mejor de la saga, pero es abrumador, solo con la tonada del menú de inicio, el juego te da una cálida bienvenida, y nada que decir de majula o los temas de fondo de los jefes.

JUGABILIDAD: MEJOR, es la palabra clave, sin necesidad de comparar, numerare sus mejoras :
1- al fin tu mano izquierda sirve para algo que no sea resibir golpes con el escudo, puedes usar las dos manos para atacar.
2- dual welding, si ahora puedes hacer combos con tus espadas a dos manos, esto para pvp es increíble y más si usas espadones.
3- uso múltiple de almas, ahora no consumes almas de una en una, ahora tu eliges cuantas consumír.
4- material de curación, hay muchos y variados, no se como te puedes aburrir tanto de morir si ni siquiera vez a tu alrededor y usas lo que el entorno te da.
5- pc, el port a pc al fin es descente, se puede jugar a 60 fps.
6- el online corre como la seda, es hermoso poder jugar contra personas de Grecia, Rusia, España (soy colombiano), Italia, Estados unidos, etc,sin ningún tipo de problema, hay muy pocas veces en que el lag te fastidiara, pero será una en cien. 

INNOVACIÓN: todo con respecto a su antecesor a mejorado, el online es preciso y perfecto, su historia al completar cada parte de su lore es magnífica, sus escenarios detallados, su jugabilidad tan exigente, por lo que insisto no es para cualquiera. 
Incluso, este es el dark souls con más arsenal que existe,  desde dagas, espadas, espadas curvas, espadones, espadones curvos, katanas, espadas gemelas, lanzas,  escudos, arcos, ballestas, catalizadores, campanas, bastones, piromancias, hechizos, y algunos que pase por alto. 
Las posibilidades para hacer una build diferente cada vez son infinitas. 

LO MALO: si,  nada es perfecto, y lamentablemente este juego no es la excepción. 
El mapeado es incoherente, se nota la unión de ciertas locaciones con otras totalmente al azar. Se nota la falta de tiempo y el desespero por terminar el juego. 
Esto molesta pero no entorpece lo que en realidad es dark souls 2, al final terminas acostumbrandote y no entorpece para nada tu paso por drangleic. 
Los jefes, si bien,  estos me costaron mucho más que los de  la primera entrega, hay muchos que son muy fáciles, o sólo debes repetir la misma estrategia de combate (girar a su izquierda), y unos ya vienen SOBRANDO. 

En fin uno de mis juegos favoritos, muy entretenido y rejugable al 100%, y recomiendo una vez más. SI NO LO HAS PASADO AL COMPLETO Y NO ESTÁS ACOSTUMBRADO A ESTE TIPO DE DIFICULTAD, NO HAGAS UN ANÁLISIS, ESO SE LLAMA DESINFORMACIÓN.

Miguel-mabylon / 19 de septiembre de 2016 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

3 Terrible

Este juego es una estafa.
No compren este juego. yo cometí el GRAVE ERROR de comprármelo, y la verdad que lo estoy jugando a la fuerza, por que me da lastima haber gastado mi dinero en algo horrible como esto, la jugabilidad es mala, inclusive en Skyrim es mucho mejor y eso es mucho decir... la historia es sosa, no te ponen objetivos. Lo único bueno es que hay referencias a berserk y bleach.  Por lo que se vende dark souls y por donde se agarran todos los fans para defender el juego es x el nivel de dificultad, que la verdad que mas que ser un reto es una molestia, te matan y empiezas de vuelta desde 0...  y eso en un rpg yo lo veo fatal... joder, me siento estafado. y no quiero hacer un comentario muy largo, pero podria estar horas diciendo todos los defectos de este asqueroso juego.

Gunner9799 / 22 de junio de 2015 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

9,5 Imprescindible

Dark Souls II 
Dark Souls II es la secuela de Dark Souls , juego que empece pero deje al poco tiempo debido en gran parte al horrible port a PC (una verdadera lastima), aun asi tengo ganas de jugarlo.
Centrándonos en Dark Souls II he de decir que es un excelente juego, si bien es mas facil que sus anteriores no quita que sea un juegazo con todas las letras, la jugabilidad es una delicia, el combate ofrece muchas opciones, casi siempre hay que aprovechar el escenario, hablando del escenario, es muy diverso, con zonas completamente distintas, aunque no están muy bien conectadas entre si
Hay mucha variedad de armas, armaduras, magias, todas ellas distintas unas de otras

Gráficamente el juego no es de lo mas puntero, pero artisticamente es toda una belleza

Ademas una vez que lo completemos activaremos el NJ+, que añade un monton de enemigos y objetos

Totalmente recomendable

PANZERFAUST190 / 13 de marzo de 2015 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

3,5 Horrible

Solo para fans
Tras una intro increible y magnifica, que animaria a cualquiera a jugarlo, propia de una pelicula, uno entra en un juego repetitivo, cansnino y con unos graficos insultantes, repito, insultantes, parece que estas jugando en 2006.
Demasiada nota le da la gente, pero esto se debe a que es un juego creado exclusivamente para un publico en concreto, que valorara esa dificultad y ese mundo aburrido, solitario y repetitivo, con esos paisajes tan bonitos pero esas graficas tan pateticas y aberrantes.
Me parece un titulo sobrevalorado, me ha parecido aburrido a mas no poder, no me crea ningun interes y al poco lo he borrado, menos mal que lo jugue por Steam family y no he derrochado el dinero en el.
Recomiendo a cualquier que lo pruebe antes de comprarlo pues es un titulo hardcore solo para fans.

Yo-Noid / 23 de febrero de 2015 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

9,5 Imprescindible

Bendito sea el sol.
Tal vez tuviera razón aquella macilenta anciana de mirada insidiosa que me introdujo al crudo mundo de Dark souls 2, tal vez todo fue un sueño. Aun tengo difusos y entrecortados recuerdos de mis anteriores aventuras en distintos juegos, en los cuales presionando un botón lo mas rápido posible destruía imperios, acababa con enemigos por miríadas, me convertía en el líder indiscutible, conseguía a la chica y jamás se me despeinaba el copete. Si me sentía perdido, una flecha amiga me guiaba para conseguir mi meta y además me daba un logro, un abrazo y una palabra de ánimo por haberlo conseguido. No digo que no fuera divertido, pero ahora seria incapaz de volver a esas fantasías otrora placenteras.

Al principio pensaras que Drangleic es un lugar injusto, malintencionado, "que te la pasas muriendo a toda hora" o que "la jugabilidad es nula"? Pero si decides no rendirte, si decides aceptar que el que fallo el golpe fuiste tú, el que esquivo mal fuiste tú, que tu plan de dirigirte contra un gran grupo de enemigos con la sola idea de entrar dando espadazos para automáticamente matarlos a todos no fue muy sabia, si decides aceptar que anteriormente vivías esa fantasía facilista que tan de moda está, te darás cuenta de que el juego no es para nada difícil, es mas, veras lo lentos y predecibles que son tus enemigos y entonces te convertirás así en su peor pesadilla (deliciosa venganza). Pero esta característica tan marcada, que deja totalmente la responsabilidad de maniobrar adecuadamente al personaje en las manos del jugador, no solo aplica en el combate ya que la historia, para entenderla y disfrutarla, no se presentara de una manera directa, como en un libro con animaciones que se muevan ni con el típico monologo del enemigo, que antes de intentar eliminarte te cuenta el por que de sus acciones y hasta sus traumas infantiles, si no que la descubres mientras sigues recorriendo ese espinoso camino, y claro si no te importa mucho, podrías llegar a la puerta de aquel desdichado rey y enfrentarlo sin tener ni siquiera una clara idea del porque.

Después de aproximadamente 350 horas de juego aun sigo muriendo una y otra vez, la diferencia es que ya no me tiemblan las manos, ya no le grito a la pantalla, como beowulf me enfrento a mis pesadillas con mis manos y cuerpo desnudo y al ver todas las sombras y sangre que representan a otros jugadores muriendo de maneras poco dignas, me doy cuenta que en tan solo un par semanas ellos también serán terribles espíritus invasores que trataran de hacerme perder mis preciadas almas.

Así que estamos frente a un juego totalmente recomendable, y si lo llegas a jugar y a disfrutar, no olvides jugar el dark souls original realmente no te va a defraudar.

GuiltyStorm / 17 de febrero de 2015 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

9 Magnífico

Dark Souls II , mejor que el primero? NOPE.
Este análisis no es una comparación total (aunque uso mucho de referencia este título) de este juego con su predecesor Dark Souls a pesar del título del análisis, sólo es mi opinión general sobre el juego y porque no está a la altura del primero a pesar de ser un grandísimo juego.
Dark Souls (tanto el 2 como el 1) es un juego peculiar, tiene la jugabilidad de un rpg "occidental" pero es oriental (japonés) y en ciertos aspectos se nota el toque japo.
Le he echado unas 250 horas a este juego y aunque no me parece que llegue a la altura del primero creo que mejoro muchas cosas e hizo la saga mucho más "accesible", es un juego difícil no nos vamos a engañar pero no tanto como el primero, el juego en si es más rápido, tenemos zonas del mapa más ligadas y por lo tanto es más lineal, podemos transportarnos de hoguera en hoguera desde el principio, podemos llevar 4 anillos, las armas se reparan al descansar en hogueras (aunque se gastan un poco más rápido),etc. todo esto no lo tenía el Dark Souls y por eso paso más desapercibido hasta que explotó un bum por este juego repentinamente.

VALORACIÓN (9/10) : personalmente le daría un 8,5 teniendo en cuenta el primero, pero cuando se valora un juego yo creo que a parte de dejar un poco de lado la saga hay que ver la parte de la accesibilidad y por eso me parece que un 9 es una nota merecida para este juego.

JUGABILIDAD (4/5) : la jugabilidad es en lo que más destaca cualquier juego de la saga Souls y aunque en este el movimiento es más "normal", se siente como diferente respecto al primero o incluso al Demon Souls, a parte que el diseño de mapa me pareció bastante mal pensado en ciertas zonas, como por ejemplo, después del Pico Terrenal donde acabas en una cima subes al Torreón de Hierro donde hay lava por todos lados e incluso se ven mares de lava, lo cual pues no tiene mucho sentido (como este un par de ejemplos más) esto es ser un poco escéptico pero creo que es un punto negativo a resaltar.

GRÁFICOS (4/5) : sin duda alguna es muchísimo mejor el apartado gráfico que en el Dark Souls I , algunos sitios pierden el encanto lúgubre y extraño que había en este pero aún así la potencia gráfica y la optimización es muy buena, aunque no es perfecto y sobretodo la calidad de algunos personajes flojea así como la iluminación en algunos lugares.

SONIDO (5/5) : me parece que esta obra tiene una gran banda sonora y aunque en las peleas contra los bosses no nos centremos en esto (por que nos destrozan si lo hacemos básicamente) luego al escucharlas se puede ver la calidad que tienen las piezas y que quedan muy bien con la pelea y con el ambiente, por no hablar de la pieza de los créditos finales que queda perfecta.

INNOVACIÓN (4/5) : este apartado es como si tuviera un 5 pero lo dejo en 4 por el primer Dark Souls, la saga es muy innovadora y tiene grandes ideas pero no puedo darle un 5 teniendo en cuenta que aunque cambie mucho respecto al anterior título sigue estando casi basado en su totalidad en este.

En resumen Dark Souls II me parece mucho más accesible y fácil de comprender que el primero pero le falta ese toque que tenía el primero tan difícil de explicar. Si os compráis y pasáis primero el 2 os parecerá mejor que el 1 cuando juguéis a este pero con el tiempo y unas vueltas más al 1 ya veréis como cambia vuestra opinión.

Bad-Wolf / 28 de diciembre de 2014 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

10 Inolvidable

Preparad vuestras almas para la Muerte
Llevo todo el año esperando para poder disfrutar de un título como este. Dark Souls 2 es sin duda mi juego favorito de este 2014 y sin duda lo he votado para el mejor juego del año. Esto se debe a que a pesar de haber jugado horas y horas y horas el bendito juego continúa siendo extremadamente entretenido. Disfrutar de Dark Souls 2 ha sido como una maldita enfermedad, le he hechado 110 horas en 3 semanas, es tan entretenido que las horas volaban jugando y no me daba cuenta.
Lo que hace este título diferente a cualquier otro existente es que sube el detalle y diseño a unos niveles que son simplemente superiores a la mayoría de juegos que no son de From Software y una historia que aunque sea algo difícil de entender, es increíblemente buena y te mantendrá pegado a la pantalla durante todo el viaje por Drangleic. Su dificultad es muy buena( mucha gente dice que los juegos de esta saga son muy difíciles, pero no lo son, son auténticos, no confundáis). También hay que destacar la increíble variedad de armas y armaduras que posee la obra que probablemente te hagan pasar bastantes horas probando que combinación se adapta mejor a tu estilo de juego: si prefieres armas y armaduras pesadas, te recomiendo jugar tanque, el único problema sería la habilidad de rodar, que pesando tanto, no te servirá de mucho ya que rodaras demasiado lento y te sugiero que lleves un escudo. Si prefieres atacar rápido, causar mucho daño pero también ser ágil deberías jugar con armaduras ligeras, que te permitan rodar y correr sin problema alguno y si llevas un escudo, que no pese mucho, y en cuánto armas te destacaría las dagas, espadas rectas o martillos y hachas.
Esto solo serían algunas opciones de combate en el juego, claramente hay varias más que puedes probar.
Sí hablamos sobre los jefes o bosses, diría que son muy variados y diferentes en cuanto diseño y movimientos y ninguno tiene un punto ciego en el que farmearte al jefe.
Para terminar me gustaría hablar sobre el Multijugador, tanto el competitivo como el cooperativo son excelentes, para invocar a un jugador a tu mundo para que te ayude, este debe poner una señal con la saponita de señal blanca, pero no necesita ser humano, en cambio tu debes de estar en estado humano para poder invocar al otro jugador. También puedes invocar jugadores a tu mundo como espíritus oscuros para luchar contra ellos, para ello un jugador debe usar la saponita de señal roja para dejar la señal en el suelo y luego otro jugador puede invocarle independientemente si es humano o hueco pero el que deja la señal debe ser humano. También existen los orbes del ojo rojo roto, que sirven para invadir el mundo de otros jugadores y los orbes del ojo azul roto, que desempeñan una de las funciones vitales en uno de los muchos juramentos disponibles en el juego, este juramento es con los Centinelas Azules y debes unirte al juramento para poder usar este objeto. Lo que hace este objeto es invadir a los jugadores que suelen asaltar los mundos de otra gente.
Dark Souls 2 es un título de 10 que sin duda alguna conseguirá atraer a cualquier jugador que disfrute de los títulos de acción RPG y a quien esté buscando un auténtico desafío.

Tsuna561 / 15 de diciembre de 2014 Jugabilidad: Gráficos: Sonido: Innovación:

10 Inolvidable

Bearer... Seek... Seek... Lest...
Estaba en la primera zona, poco después de cruzar un muro de niebla en lo que alguien llamaría tutorial. Era una cueva poco iluminada, y apenas tenía un escudo de cuero y una daga. Vi una luz blanca en el fondo, un cadáver que tenía un item. Me acerqué y vi que había que saltar, me alejé un poco, corrí y salté. Nada más saltar pensé "Demasiado pronto", mientras mi personaje chocaba contra un muro y caía a un pozo sin fondo. "Bienvenido a Dark Souls", decía el logro que conseguí al morir. Solté una pequeña carcajada y dije "Como te conozco de bien, Dark Souls". 

Mi historia con la saga Souls es extraña, una relación de amor/odio. Jugué cuando salió Demon's Souls y lo aborrecí, al principio me pareció divertido pero al no poder pasar del 1-1 me frustré y lo dejé. El primer Dark Souls no lo toqué hasta hace 2 meses, porque odio mucho la ambientación medieval, odio Skyrim y lo único aceptable para mi era The Witcher. Decidí darle una oportunidad y me enamoré del primer juego, tanto que lo actualmente lo tengo en PS3 y PC. A principios de mes compré Dark Souls II, por las risas, y bueno, 23 horas después estoy aquí, analizando este juego. 

Si, los que hayáis jugado algún Souls antes estáis en territorio amistoso. Matar enemigos te da almas que pueden ser usadas para conseguir objetos y subir de nivel. Morir te hará respawnear en la última hoguera en la que descansaste y tendrás que patearte todo el camino hasta donde moriste para conseguir tus almas, si mueres por el camino otra vez despídete de esas almas. Gestionar la stamina sigue siendo lo más importante. Atacar, bloquear, rodar, esquivar, correr... todas esas acciones dependen de tu stamina, y si te quedas sin stamina mientras estás luchando lo más probable es que te lleves una o dos hostias y te quedes con la vida bajo mínimos. 

Pero vamos a los cambios que hay en el juego frente a su predecesor, que eso es lo importante. ¿Recordáis el estus? Antes tenías 5 usos del frasco de estus desde el principio y podías aumentar a 10 al descansar en una hoguera, pudiendo eventualmente llegar a 20 estus. Pero aquí al empezar tienes 1 solo, que puedes ampliar mediante fragmentos, y si lo gastas pues estás bastante jodido. Bueno, lo estarías de no ser por una nueva adición, las joyas de vida, objetos bastante comunes que recuperan salud pero no a la misma velocidad que un buen trago de estus. 

Otro de los cambios es la mecánica que tienen las hogueras ahora. Puedes viajar entre hogueras en cualquier momento. Pensarás, "¿Pues qué puta casualada, no? GIT GUD". Pues no, ya que ahora solo puedes subir de nivel a través de una bella doncella pelirroja, Shanalotte-senpai, que está en Majula, el centro desde donde te moverás a todas partes, un hibrido entre el Nexo de Demon's y el Open-World que hay en Dark Souls. Además, las armas son muchísimo más frágiles, y se romperán bastante rápido, por suertes las hogueras ahora te restauran la durabilidad por lo que no tendrás que gastarte el sueldo en polvos de reparación. 

Uno de los cambios más grandes que hay en el juego es la penalización por muerte, en Dark Souls si morías simplemente perdías tu humanidad y tenías que volver a donde estabas. Aquí no, aquí pierdes tu humanidad, tienes que volver a donde estabas y tu salud se ve reducida cada vez que mueres, así que tendrás que usar una Efigie, el sustitutivo de la Humanidad, para recuperar la fracción de salud que te falta. 

Así que, resumiendo los cambios, ¿es Dark Souls II más difícil que Dark Souls? La respuesta corta es sí, la respuesta larga es sí pero con matices. Subir de nivel cuesta menos en Dark Souls II, y ten por seguro que subirás más de nivel aquí, una partida completa en Dark Souls te dejaba alrededor del nivel 90, aquí acabé en el nivel 140 después de acabar con 2 jefes opcionales que me había saltado en mi recorrido. También cabe destacar lo que he dicho antes, el teletransporte entre hogueras, seguro que más de uno habría querido esta función en Dark Souls cuando le maldijeron los Basiliscos en las Profundidades, ¿eh?

Otra de las cosas que cabe mencionar es un mundo más vivo, con muchos más NPCs que su predecesor. ¿Son menos memorables? Sí, pero personajes como mi amada Shanalotte, Lucatiel o Vengarl son, al menos para mi, igual de memorables que Siegmeyer o Solaire. La storyline que comparten Pate y Creighton me pareció bastante buena, no entraré en spoilers pero es larga y tiene varios finales. 

Si, sigue habiendo numerosos pactos, con añadidos muy interesantes como el primer pacto que encontramos, que nos ofrecerá un compañero cada vez que nos invade un jugador rojo, o el Pacto de la Oscuridad, que nos ofrecerá incluso un nuevo jefe, con uno de los combates más memorables de la saga y con mayor dificultad.

Poco puedo decir sobre el PvP, ya que no me he centrado mucho en él. Eché unos combates en el puente de la Fortaleza de Hierro y lo único que encontré fueron Havels lanzando rayos y algo de lag, así que se puede deducir que el equilibrio brilla por su ausencia. Lo que si ha mejorado frente a su predecesor es el cooperativo, ahora podrás lanzarte en Jolly Cooperation sin los problemas que había en el juego anterior gracias al magnífico GFWL.

Para acabar, ¿es mejor que Dark Souls? Si y no, ambos se complementan a la perfección y mejoran en lo que el otro falla. ¿Te lo pasarás bien? Por supuesto, sobre todo en Ciudad Infestada 2.0. ¿Está Solaire? No, pero estoy yo. 

Ojalá pudiera ser tan incandescente...