Cientos de jugadores midiendo sus fuerzas en un inmenso campo de batalla. Combinando de forma increíblemente acertada la estrategia, acción y rol, la vertiente PvP de Guild Wars 2 promete convertirse en un nuevo referente en el género de los MMORPG gracias a su adictiva y espectacular fórmula de juego. Intensa, apasionante y muy desafiante, la guerra contra otros jugadores nunca fue tan emocionante.
Hace pocas semanas os desvelamos algunos de los puntos clave de la experiencia PvE (Jugador contra Entorno por sus siglas en inglés) del prometedor Guild Wars 2, y tras un nuevo e intenso fin de semana con el juego en nuestras manos, hemos decidido centrarnos en esta ocasión en su vertiente competitiva y, sobre todo, en el ambicioso Mundo vs Mundo que enfrentará a cientos de jugadores de distintos servidores en cruentas batallas campales.
En ambos casos, como ocurre con la experiencia cooperativa de esta esperado MMORPG desarrollado por ArenaNet, la versatilidad de opciones y la intensidad de los combates será una seña de identidad de un juego que es capaz de sorprender constantemente con cada uno de sus enfrentamientos.
Adáptate o muere
Con el lema "todo el mundo puede hacer de todo", Guild Wars 2 se ha convertido en uno de los juegos de rol multijugador masivos en línea más dinámicos que recordamos, sobre todo gracias a la facilidad con la que cada una de las ocho clases de personaje disponibles pueden modificar sus roles de batalla para adaptarse a las situaciones del combate.
Defensores que se convierten en brutales máquinas de matar, magos especializados en el combate a distancia que se transforman en sanadores y unidades de apoyo; soldados con armas de fuego que pasan al combate directo con armas blancas en cuestión de segundos… cada jugador, dependiendo del equipamiento y las habilidades que haya desarrollado, puede afrontar la batalla como le venga en gana y, rápidamente, modificar su estrategia para acometer otra tarea sin trabas de ningún tipo. Algo que en la vertiente PvP de Guild Wars 2 enriquece la experiencia de juego hasta cotas insospechadas.
No en vano, durante el transcurso de las partidas, en las que todos los jugadores cuentan con las habilidades propias de un personaje de nivel máximo (80) aun cuando en el juego principal no han alcanzado esta meta, hemos vivido tal cantidad de batallas distintas con un mismo personaje que solo podemos aplaudir a los desarrolladores por tan brillante trabajo.
Además, ya no solo hablamos de lo que se refiere al balanceo de clases y al sistema de combate, sino también al gran diseño que presentan los dos escenarios PvP disponibles actualmente, con zonas estratégicas a conquistar que incitan a movernos constantemente para no perder la batalla de puntos contra el bando rival. Un elemento que también fomenta de forma muy acertada, la cooperación entre jugadores para defender una zona en peligro, o atacar coordinadamente otra fuertemente protegida por varios jugadores y diversos sistemas defensivos, como las torretas y trampas que pueden usar los ingenieros.
Y el resultado es, como decimos, tremendamente bueno, porque a todo esto también debemos añadir varios eventos especiales como los que presenta el PvE de Guild Wars 2, que pueden declinar la balance hacia uno u otro lado con la presencia de personajes muy poderosos que lucharán junto al equipo que se haya ganado su favor.
Guerra total
Si combatir contra un reducido grupo de usuarios supone un gran desafío y una experiencia de juego muy satisfactoria, enfrentarse a cientos de jugadores en un mastodóntico campo de batalla solo puede catalogarse como un monumento a la diversión más intensa y adictiva. Y eso es lo que propone la vertiente Mundo vs Mundo de Guild Wars 2.
En dicha modalidad pueden enfrentarse tres equipos de hasta cien jugadores -pertenecientes a tres servidores distintos- en cuatro inmensos escenarios de guerra con numerosos puntos estratégicos y recursos materiales para organizar portentosos asedios y defensas numantinas. Y es que ArenaNet no se ha conformado con simular simples escaramuzas entre grandes grupos de usuarios, proponiéndonos, directamente, combatir en una guerra total.
Un enfrentamiento en el que cada personaje jugará un papel fundamental en su lucha contra otros rivales humanos y las decenas de guerreros controlados por la inteligencia artificial del juego, que tendrán una gran presencia en la mayoría de combates. No en vano, se le ha dado mucha importancia a la gestión estratégica de los recursos que seremos capaces de generar conquistando puntos clave del escenario, obteniendo así la materia prima necesaria para fortificar nuestras posiciones con todo tipo de armas como balistas, cañones o el siempre eficaz aceite hirviendo; a la vez que los atacantes cuentan en su haber con catapultas, Golem de asedio y demás elementos ofensivos para reventar estas mismas defensas.
Los jugadores, que mantendrán el nivel y habilidades de la aventura principal aunque su poder se equiparará al de la mayoría de usuarios para obtener ciertas garantías de supervivencia, podrán reparar también este tipo de armas y construir otras nuevas siempre que cuenten con los recursos necesarios; a la vez que el equipo puede mejorar la eficacia de estos elementos defensivos y la fortaleza de sus guerreros con diversos extras.
Al final, sumando la versatilidad del sistema de combate con todo este fondo estratégico, el resultado no podía ser más intenso y espectacular, con una sucesión de brutales combates entre decenas de jugadores que nos han dejado con ganas de más, mucho más.
Por supuesto, como podéis comprobar en alguno de los vídeos de gameplay que hemos publicado junto a estas impresiones, todavía queda mucho trabajo a nivel de optimización del motor gráfico, ya que sobre todo en la vertiente Mundo vs Mundo, la tasa de imágenes por segundo se resiente una barbaridad incluso con todos los detalles en su nivel más bajo. Con el PvP normal y la aventura principal, en cambio, hemos notado cierta mejoría con respecto a lo visto hace unas semanas, lo que denota que el equipo de ArenaNet está aprovechando muchísimo el tiempo para no dejar ni un cabo suelto.
Y es esta obsesión por crear el juego más completo posible la que nos tiene tan ilusionados. Las expectativas en torno a Guild Wars 2 son muy altas, pero sus desarrolladores, en vez de decepcionarnos con cada nuevo avance, lo que hacen es aumentar nuestras ganas por disfrutar del que promete ser uno de los juegos más apasionantes y divertidos de este género cuando se ponga a la venta.