En 2017, el dibujante chileno Guido Salinas parodiaba una mítica portada de Wolverine valiéndose de toro título y otro personaje. Bajo el nombre Galvarine, la imagen le descubría al resto del mundo la historia de Galvarino, un héroe que, tras luchar en la guerra de Arauco en el Chile del siglo XVI, fue mutilado por los colonizadores españoles.
El girito al que hace referencia la portada y que ha convertido al ya de por sí héroe chileno en algo más, está en la similitud que arroja en ese mismo homenaje. Cuenta la leyenda de Galvarino que, tras la ofensa de verse sin manos, decidió volver a la guerra con cuchillos atados a sus muñones, recordando así a las garras del Lobezno de Marvel pero en versión mapuche.
Lo que cuentan las crónicas de Galvarino
No hay duda alguna de que Galvarino fue un guerrero mapuche real. Las crónicas de la época y los cantos alrededor de la guerra de Arauco así lo indican. Las mismas cuentan que, con apenas 21 años, el gobernador García Hurtado de Mendoza desembarcaba en Chile en abril de 1557 con una legión fuertemente equipada que le acompañaba desde Perú.
Bajo la orden de hacerse con la región y enfrentarse a cualquier resistencia, la guerra va encrudeciéndose durante meses hasta que, el 8 de noviembre del mismo año, se produce una batalla entre los españoles y el pueblo de los mapuches en Lagunillas, en un terreno pantanoso en el que Hurtado de Mendoza se hace con la victoria gracias a sus ingentes huestes.
Para intentar frenar la resistencia de los mapuches, los españoles deciden mutilar a los prisioneros capturados y enviarlos a casa para escampar el aviso de lo que podría llegar a pasar a quienes se atrevan a cuestionar su autoridad. Entre las amputaciones se cuentan casos en los que algunos soldados pierden la mano derecha, a otros la nariz, y en casos como el de Galvarino, también las dos manos.
Las mismas crónicas cuentan que, durante la amputación, Galvarino "tendió el cuello" despertando la admiración de los presentes por su nulo miedo a la muerte. Pese a sus acciones, fue liberado y convertido en una suerte de embajador del miedo. Pocas semanas después y pese a estar sin manos, Galvarino regresaba a la carga para combatir en Millarapue, donde volvía a ser capturado y ejecutado.
De héroe mapuche a leyenda del cómic
A partir de ese punto es donde las fuentes de la época empiezan a bailar. Lo hacen con las cifras de capturados y ejecutados, pero también en la forma en la que acaban con la vida de Galvarino. Algunos hablan de la horca, otras de perros hambrientos (podéis imaginar cuál caló más), pero en lo que todas coinciden es en que el héroe mapuche volvió a la guerra. Y lo hizo, sí, pero se desconoce cómo.
En esos cantos y crónicas no hay señal alguna que indique que Galvarino volviese a luchar tras atarse cuchillas en los muñones, pero esa capa de la historia empieza a crecer entre la cultura popular de la época extendiéndose hasta nuestros días. En la búsqueda de un héroe aún más legendario, la leyenda de Galvarino convertido en un superhéroe mapuche termina calando entre la población chilena.
Lo hace hasta el punto de que, cientos de años después, el dibujante Guido Salinas decida recrear una de las portadas más icónicas de Wolverine con Galvarino y sus cuchillas como protagonista.. Una imagen lo suficientemente potente que, atada a una leyenda con todos los números para convertirse en algo viral, le abre a Salinas otra puerta, la de crear un cómic sobre Galvarino.
Lo hace de la mano de Guardianes del Sur, una suerte de Vengadores mapuche que recoge la figura de Galvarino y la de otros personajes de la época. Su intención, narrar cómo la épica del pueblo chileno quiso hacer frente a los avances de la colonización en su territorio. Puede que el rigor histórico del Galvarino con cuchillas por manos esté lejos de ser lo más acertado, pero desde luego tiene todo lo necesario para convertirse en un icono capaz de traspasar fronteras.
En 3DJuegos | El nuevo juego de Wolverine de PS5 ya solo necesita una cosa para que los fans sean felices del todo
En 3DJuegos | Sí, Logan es la mejor película de Wolverine, pero he vuelto a ver Lobezno Inmortal y es mucho mejor de lo que todos recordamos
Ver 6 comentarios