Un viaje inolvidable a través de las estrellas. Pocas aventuras hay tan emocionantes como este desafiante videojuego que mezcla de manera brillante la acción, rol y exploración, creando un apasionante relato en el que tu tienes la última palabra. Análisis de Sunless Skies.
"Y desesperado, al borde de la muerte… acabé comiéndome a la tripulación". Cualquiera que lea esto pensará que me he vuelto loco, "¡qué te ha pasado Alberto!", pero es una de tantas locas y salvajes situaciones que plantea Sunless Skies. Sobrevivir. Esa es la máxima en un videojuego que transmite como pocos el miedo a morir. Que no os engañe su estética, su apuesta por el texto frente a la imagen. Como dijo el escritor H.P. Lovecraft, "el más antiguo y más intenso de los miedos es el miedo a lo desconocido", y esto es algo que el equipo Failbetter Games domina a la perfección. Son maestros creando tensión, atormentando tu mente con un temor irracional hacia peligros que no ves… pero siempre están ahí. La amenaza a ese fatal destino es una fiel e indeseable compañera de viaje que no os abandonará en esta aventura roguelike que en lo narrativo es oro puro.
Lo sabes. Tarde o temprano llegará ese momento, tu triste final; el desenlace que no deseas pero parece es inevitable en este extraño mundo que recorres, ¡volando!, a bordo de una locomotora. La premisa es idéntica a la del notable Sunless Sea pero, aquí, todo es mejor. La narrativa, los combates, la progresión, el misterio, el terror; sin darte cuenta serás atrapado por un increíble relato que crece y crece hasta que ya no dejas de pensar en él; hasta que tu mismo te sientes parte de esa gran y despiadada historia cuyo común denominador son las desgracias. Y por raro que os parezca a algunos viendo sus imágenes, entendiendo que aquí no hay vísceras ni gráficos hiperrealistas al estilo Resident Evil 2, lo más increíble de Sunless Skies es su capacidad para hacerte sentir incómodo. La muerte está ahí, esperando su momento, acechando en las sombras, sin prisas, porque sabe que tarde o temprano ganará… y tu morirás.
¿Siguiente parada? ¡El cielo!
A bordo de una locomotora capaz de surcar las estrellas, con unos pocos bidones de combustible y algo menos de suministros para alimentar a la tripulación, el viaje a lo desconocido que propone Sunless Skies es simplemente maravilloso. Terrorífico, sí, pero a su manera también emocionante y cautivador. Sabes que de una u otra forma sufrirás un fatal destino. Puede que sean los piratas, las bestias salvajes, el hambre o una traicionera tripulación enloquecida por los horrores cósmicos, pero al final del día, la muerte terminará alcanzándote. ¿O no? Y es esa esperanza la que te motiva a seguir adelante, a querer explorar un universo genial repleto de misterios y personajes cautivadores.
No es un viaje fácil de superar pero sí emocionante gracias a su capacidad para sorprender con relatos e historias en las que tu tienes la última palabra. Es otra de las fortalezas de Sunless Skies. Aunque hay una pizca de rol, mucha exploración y hasta emocionantes combates contra toda clase de enemigos, la mejor forma de describir este título de Failbetter Games es hablar de él como un juego de decisiones; una aventura que explota como pocas el concepto "escoge tu propio camino" con consecuencias imprevistas. Hay mucho texto, ¡muchísimo!, por desgracia solo en inglés -a falta de que los aficionados traduzcan el juego-, pero os garantizo que devoraréis con pasión todas esas locas historias que narra. De eso trata. De descubrirte relatos increíbles y hacerte partícipe de ellos viviendo aventuras imposibles en un mundo aún más imposible.
Sin darte cuenta serás atrapado por un increíble relato que crece y crece hasta que ya no dejas de pensar en él
Todo depende de tus decisiones, del tipo de capitán que has creado, pero también de los oficiales que te acompañen, la afiliación a las facciones que pueblan este oscuro universo, o incluso los recursos y tesoros que has acumulado en tus viajes. Té, néctar, bebidas alcohólicas, munición… ¡y también historias! En el mundo de Sunless Skies podrás intercambiar con otros las aventuras que has vivido a bordo de tu locomotora, siendo esta una moneda de cambio fascinante. Y es que tiene todo el sentido del mundo. ¿Una taberna? Seguro que los parroquianos, más que tu dinero, se mueren de ganas por escuchar grandes historias. Y a cambio de ellas os recompensarán con generosidad. Me parece una idea brillante que ahonda en una de las grandes virtudes del videojuego: su guión.
La historia que relata es apasionante. Cuesta no emocionarse con las increíbles y trágicas aventuras en las que te embarca un videojuego que nunca deja de sorprender, que siempre guarda un as bajo la manga, sea este una terrorífica criatura capaz de devorar en segundos tu nave, o una conspiración orquestada por un culto a un dios olvidado. Hay tantas amenazas, tantas posibilidades de morir, que de una u otra forma el miedo se apoderará de vosotros. Y sin embargo, como ya ocurría en Sunless Sea, ni con esas querréis dejar de jugar. Al contrario. La emoción por descubrir nuevos puertos, conocer a otros supervivientes o descifrar nuevos enigmas os guiará con una fuerza arrolladora a través de un gigantesco universo por el que toca moverse con suma cautela. No es una advertencia baladí. La valentía, rara vez, tiene recompensa; aunque cuando la hay… la sensación es increíble.
Gestionar el combustible y los alimentos será esencial para sobrevivir, pero también cuidar el estado anímico de una tripulación que sufrirá ante la presencia de los horrores cósmicos que os rodean. No le restéis valor a ello. Nada hay peor que ver cómo la demencia acaba con la vida de tus camaradas, que incluso pueden alzarse en tu contra. Hay formas de evitarlo. También de luchar contra las muchas amenazas que se ciernen sobre ti. Es aquí donde encontramos importantes mejoras con respecto al anterior título de la serie. El combate, de entrada, es más emocionante y divertido. Los enemigos atacan cuando menos te lo esperas, son ágiles, y saben aprovechar muy bien las armas con las que van equipados. El resultado son unas batallas frenéticas, con mucho de estrategia, en las que no vale solo con apuntar bien; también es importante esquivar y gestionar el calor para evitar quedarse indefensos durante unos segundos que podrían resultar fatales.
El diseño de los escenarios es fantástico, con ese aire misterioso que también define a los propios personajes
Con opción de mejorar la locomotora y equipar nuevas armas, en caso de morir, el castigo no será tan cruel e implacable como el que presentaba Sunless Sea. Podéis optar por cargar la partida desde el último puerto seguro en el que atracasteis, o bien apostar por un estilo de juego más propio de los roguelike, tomando el control de un nuevo capitán que legará parte de los conocimientos y mejoras que le dejó su antecesor. En cualquier caso se evita el tedio que suponía empezar la partida desde cero, que fue uno de los aspectos que más critiqué en el anterior trabajo del estudio. No todo es perfecto en Sunless Skies. De entrada a veces puede resultar frustrante por lo vago que se muestra a la hora de dar indicaciones. "Dirígete a ese puerto, situado en el sur-sureste de New Winchester", te dicen, y tú buscas, exploras y maldices sin dar con él mientras agotas el suministro de combustible. Luego, cuando empiezas a entender mejor la exploración, también comienzas a disfrutar mucho más del viaje, pero esta es una barrera que puede echar para atrás a más de uno.
También hay momentos de cierta inactividad, con poco que hacer, en los que te verás viajando de un puerto a otro para ganar mucho dinero con el comercio, pero sin esa emoción que define a otras grandes aventuras que plantea un videojuego que, también en lo audiovisual, resulta de lo más atractivo. El diseño de los escenarios es fantástico, con ese aire misterioso que también define a los propios personajes con los que nos cruzaremos, y de los que querremos saber más y más con el paso de las horas. Por otro lado, también destaca lo cuidado de la interfaz de usuario, que permite gestionar el viaje con gran facilidad, así como la gran banda sonora y efectos de sonido, que casan a la perfección con la ambientación del videojuego.
Sunless Skies hace muchas cosas bien pero, sin duda, su mayor virtud es crear un emocionante relato de suspense capaz de inquietar tu alma de igual forma que sufren los tripulantes que te acompañan en este oscuro y dramático viaje por las estrellas. El videojuego es genial en la forma de contar una historia que atrapa, y en la que tu tienes la última palabra. Es desafiante, sí, pero las sensaciones que transmite son dignas de ser vivida, y denotan la grandeza de esta aventura.
- Una historia que atrapa de la que te sientes partícipe
- La sensación de estar perdidos en un universo repleto de peligros
- La narrativa, los personajes que te acompañan y la libertad de acción
- Los combates son divertidos; también personalizar la locomotora
- A veces puede ser frustrante por lo ambiguo que es dando instrucciones
- Ciertos momentos de inactividad hasta adentrarte en otra gran aventura
