Análisis de Dark Devotion, un roguelike de luces y sombras

Análisis de Dark Devotion, un roguelike de luces y sombras
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En un antiguo templo en ruinas, los templarios ponen a prueba su fe hasta las últimas consecuencias. Nos adentramos en sus oscuros secretos con el análisis de Dark Devotion, un juego de acción de claras inspiraciones, lleno de desafíos y peligros para los más arduos jugadores.

Ensayo-error. Una relación que ha acompañado a los videojuegos desde siempre. Hay algo mágico en equivocarse, en aprender de nuestros errores que comulga con nosotros como jugadores y probablemente como especie. Porque la única forma de enfrentarse a lo desconocido, sin ayuda de una práctica guía, claro está, es fallando estrepitosamente. Hay mucho de ello en Dark Devotion que atraviesa hasta las fronteras más polémicas de dar algunos consejos al jugador. Durante buena parte de los primeros pasos en este templo destruido, he caminado torpemente, afrontando el peligro de no saber tan siquiera algunos conceptos más básicos. Cosas como agacharte unos segundos para mirar abajo, a la antigua usanza, son elementos que se aprenden tras unas cuantas muertes cayendo a un abismo o a unos mortales pinchos.

Es una espada de doble filo, una que en ocasiones se disfruta más que en otras. Cuando esta relación está bien construida, Dark Devotion sabe cómo seducir al jugador. Hacerle partícipe de su laberinto de trampas, enemigos y peligros mortales. Cuando no funciona tan bien, la experiencia puede llegar a ser algo frustrante. Propia de un juego que todavía no ha terminado de pulir todos sus sistemas, hasta el punto de que esa vez en la que tienes que sacar fuerzas de flaqueza, armarte de voluntad, prefieres hacer un descanso e intentarlo más tarde.


Sabe cómo seducir al jugador, pero a veces la experiencia llega a ser algo frustrante

Las pequeñas frustraciones se acumulan. En forma de decisiones de diseño, como digo, poco pulidas. A modo de ejemplo, en Dark Devotion, pierdes todo tu equipo al morir, pero el herrero conserva algunas de tus armas. Algo parecido a Dead Cells, pero aquí puedes seleccionar tu preferida dentro del catálogo. El problema es que se hace bastante incómodo pasar por esta gestión tras cada muerte. Como esta pequeña incomodidad, hay muchas. El inventario se compone de apenas cuatro ranuras, y la organización de cada objeto pasa por recoger ítems del suelo de forma muy poco práctica (teniendo que agacharse en el punto preciso y pulsando un botón). En definitiva, Dark Devotion podría hacerlo mucho mejor en cuestiones de ritmo para evadir esa sensación de pereza que invade al jugador cada vez que eres devuelto a la casilla de salida.

La oscuridad oculta trampas y peligros a cada paso. Hay que andar con buen ojo.
La oscuridad oculta trampas y peligros a cada paso. Hay que andar con buen ojo.


Es algo fácilmente solucionable, que ayudaría a disfrutar de las otras fortalezas del videojuego, como es el combate. Aprender cada patrón de un enemigo desafiante en un juego 2D es algo siempre de agradecer, pues es un ejercicio desafiante por parte de los desarrolladores al tener más limitadas las opciones, y Dark Devotion logra un buen dinamismo en las luchas, con esa relación entre los ataques y el coste de energía, encontrando las aperturas de cada oponente. Mejor aún son los jefes finales, muy numerosos y que ponen a prueba tus nervios con un buen conjunto de ataques y patrones que aprender, además de varias fases según la barra de vida.

Análisis de Dark Devotion, un roguelike de luces y sombras


Cuestión de fe

Dark Devotion usa bien su condición de juego 2D. Cuando se apuesta por menos ambición técnica, hay que tener siempre en cuenta la posibilidad de ofrecer un buen número de variantes, en este caso para el combate, y el juego de Hibernian Workshop sabe cómo crear un interesante sistema de habilidades, magias y equipo que acercan al juego a la fórmula del roguelike más que a ninguna otra. Mediante los puntos de experiencia que obtenemos con las muertes de los enemigos, podremos poco a poco adquirir nuevas habilidades que nos permitirán movernos más deprisa, consumir menos energía o ser más hábil con las armas y escudos, mientras que algunas runas que encontraremos en el camino mejorarán nuestros parámetros también permanentemente.

Los jefes finales son algunos de los mejores momentos de nuestra aventura.
Los jefes finales son algunos de los mejores momentos de nuestra aventura.


El sistema de fe también es muy interesante. Los enemigos no solo sueltan puntos de experiencia, sino que también podremos acumular fe gracias a ellos, que nos servirá para acercar nuestra clase a una con poderes mágicos. No sólo será un maná más, sino que en ciertos monumentos podremos rezar para conseguir efectos beneficiosos (si es que tenemos suficiente fe acumulada), como por ejemplo sanarnos, recuperarnos de alguna enfermedad, conseguir objetos o abrir puertas. Todos estos sistemas se combinan perfectamente entre sí, pero como decía anteriormente, también añade a la fórmula un poco de frustración por ese ritmo lento y una progresión que busca a veces el castigo más de lo necesario.

Análisis de Dark Devotion, un roguelike de luces y sombras


La variedad de armas y hechizos está asegurada, pero no todas son tan efectivas.
La variedad de armas y hechizos está asegurada, pero no todas son tan efectivas.


Principalmente, porque Dark Devotion no termina de encontrar un nivel adecuado en su fórmula roguelike, que siempre se ve favorecida por juegos de rápido avance. El progreso aquí es lento y pausado, y mientras que las distintas armas y equipamiento debería favorecer una variedad de soluciones ante los distintos desafíos, muchas de las que hemos encontrado en nuestro camino son poco efectivas o directamente inútiles, logrando incluso, en ese ensayo y error de nuevo, que muchas de las veces que te adentras a lo desconocido seas incapaz de responder adecuadamente. No ayuda un esquema de control que puede no ser el adecuado para todos los jugadores, y que no hay forma de modificar a nuestro antojo.

Pese a que dentro del pixel art no sea el trabajo más destacado que hemos visto, lo cierto es que Dark Devotion posee cierto atractivo. Si bien sus escenarios se antojan algo repetitivos, las animaciones son fluidas y destacan los jefes finales por encima de todo. Además, no es común ver la representación de las armaduras en sprites, pues requiere un nuevo trabajo de animación en cada frame del personaje, y el equipo ha tenido la valentía de sacarlo adelante con firmeza y buen tino. Lo mismo se puede decir de una banda sonora que ambienta muy bien, pero que sobre todo tiene grandes momentos en los enfrentamientos contra los jefes finales.

Análisis de Dark Devotion, un roguelike de luces y sombras


Quizá una buena forma de definir Dark Devotion es que resulta poco intuitivo. Esto ayuda a descubrir ciertas cosas por nuestra cuenta, más allá de burdos tutoriales, pero en ocasiones el castigo implica algunas muertes más de las necesarias. Con todo, su empeño en ser desafiante, otorgando esas pequeñas ayudas permanentes que se van ganando con cada varios intentos, equilibran la experiencia, aunque a veces acabe con la paciencia del más estoico. Hay una chispa de brillantez en él, fácil de lustrar, a poco que se retoquen ciertos aspectos para que el resultado final pierda frustración y gane ritmo. Cuando esto ocurra, seremos los primeros devotos.

Interesante

Sin sello
Análisis de Dark Devotion, un roguelike de luces y sombras

Dark Devotion

Por: El equipo de 3DJuegos
Sin sello

Dark Devotion es un exigente juego de acción con algunas mecánicas del roguelike, ideal para quienes buscan fuertes desafíos. Es, sin embargo, poco intuitivo en sus primeros compases y algunas decisiones cortan el ritmo más que favorecer ese "nuevo intento más" al adentrarse en cada mazmorra. Una buena experiencia que, con algunas mejoras, puede brillar más.

  • Grandes jefes finales.
  • El sistema de experiencia y fe es muy entretenido.
  • Buena banda sonora.
  • Poco intuitivo en los primeros compases de la aventura y en los controles.
  • Algo incómodo en las gestiones de inventario que ralentizan la experiencia.
  • Falta de equilibrio en algunas armas y en la progresión.
Jugadores: 1
Idioma: Textos en español
Duración: 20-25 horas
Ver requisitos del sistema
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