Mafia es un clásico que sorprendió por la fuerza de su historia, el carisma de sus protagonistas y lo emocionante de su acción. 20 años después podemos revivir esa gran historia de gánster gracias a un remake que deslumbra con su puesta en escena y gran ambientación. ¿Está a la altura? En el análisis de Mafia: Edición Definitiva verás que es un videojuego de acción que merece la pena probar.
Cada nuevo tiroteo en el que me veía involucrado; cada persecución, cada asesinato, cada conversación que mantenía con mis aliados y enemigos me hacía recordar por qué en su día, hace ya 20 años, quedé enamorado de Mafia. Por aquel entonces no era más que un chaval, así que me impresionó mucho la idea de vivir mi propia historia de gánsters con un tono adulto, muy en la línea del mejor cine y literatura de mafiosos; pero también me sorprendió el realismo que imperaba en las calles de Lost Heaven. En una época en la que todo el mundo alucinaba con el genial GTA III, saber que cada bala contaba en un tiroteo; que ir demasiado rápido era motivo suficiente para sufrir una persecución policial, o que incluso el mero hecho de conducir era en sí mismo un desafío me hizo valorar más si cabe este clásico de la acción. Así que revivir la historia de Tommy Angelo ha sido muy especial.
Siempre da miedo volver a disfrutar de esos videojuegos que nos marcaron en la infancia. Es una experiencia increíble, sí, pero no exenta de "riesgo", pues aunque la nostalgia es un arma poderosa, el paso del tiempo lo es todavía más. Y se nota en Mafia: Edición Definitiva. Es un gran remake que da nueva vida a todo un clásico de la acción, creando en lo visual un escenario de juego verdaderamente espectacular con una puesta en escena escandalosamente buena. Pero a su vez, si bien los tiroteos y persecuciones han mejorado una barbaridad con un estilo más de película, más impactante, el diseño de las misiones, fiel al del juego original, se siente irregular. Las hay emocionantes, de esas que te tienen con el corazón en el puño; pero también hay otras más simplonas con un desarrollo más propio de otro tiempo, dejándote con la sensación de que no se le termina de sacar todo el provecho a la por momentos trepidante acción del videojuego. Hay escenas, momentos clave que saben a poco; que se sienten limitados y atados a unas reglas que hoy en día ya no se estilan. Y esto, claro, le resta atractivo al conjunto final.
Hangar 13 firma un trabajo extraordinario en lo artístico recreando con un gusto exquisito la historia del original, ambientada en Estados Unidos de la década de 1930. Son las mismas escenas, los mismos diálogos, pero con una presentación digna de elogio capaz de emocionar a cualquiera gracias a la fuerza de sus imágenes, su imponente banda sonora, y unos personajes bien escritos, con carisma, que acabarán conquistándote como ya hicieran en el pasado con toda una legión de fans. Pero como digo, a la hora de pegar tiros y escapar de policías y criminales, este Mafia: Edición Definitiva no siempre alcanza la excelencia. Y es una pena.
Una historia de gángsters que atrapa
El alma de Mafia es su historia, los personajes que la protagonizan, su poderosa puesta en escena y las -por momentos- locas situaciones de juego en las que te embarca. Es algo que me fascinó hace casi 20 años y sigue siendo increíble hoy en día. Hay muchos clichés de por medio, es verdad; las típicas emboscadas, persecuciones y tiroteos que hemos visto en muchos clásicos del cine, pero no por ello pierde efectividad. Al contrario. Cuanto más peliculera se vuelve la acción más disfrutas de este remake del mítico Mafia, que como gran novedad renueva su combate con el sistema de coberturas visto en Mafia 3. Y le sienta muy bien... la mayor parte del tiempo, porque como decía es en la acción y el diseño de las misiones donde más flojea este trabajo de Hangar 13. Los tiroteos son por lo general bastante emocionantes porque siempre acompaña la puesta en escena, la música, la épica de saber que estás contra las cuerdas viviendo una situación desesperada. Pero a veces… a veces la acción se siente demasiado artificial, demasiado encorsetada, sin apenas opciones más allá de correr por escenarios lineales en los que Tommy Angelo no siempre se desenvuelve bien debido a un control algo torpe.
Puede que el objetivo sea trepidante, ¿escapar de la policía saltando de edificio en edificio?, ¡suena genial!; pero a la hora de la verdad no es tan divertido ni emocionante como debiera. Y esta es una sensación que me ha acompañado en varias de las misiones de Mafia: Edición Definitiva, que son exactamente las mismas del original, pero con algunos cambios que buscan dotarlas de mayor espectacularidad. Se queda a medias. Una y otra vez volvía al original para comparar, para ver cuánto había cambiado esa misión o esa cinemática que en su día quedó grabada a fuego en mi memoria, y una y otra vez me sorprendía de la enorme fidelidad con la que el equipo de Hangar 13 ha recreado el clásico de Illusion Softworks. Pero a la hora de pelear, a la hora de jugar, te quedas con ganas de más. Los tiroteos son muy divertidos y la apuesta por las coberturas es todo un acierto, pero apenas hay interacción con los escenarios más allá de un par de barriles explosivos; y el combate tampoco varía prácticamente nada de principio a fin. Insisto. Es divertido, es espectacular, pero a veces se siente algo limitado y simple.
Y sin embargo ahí sigues, devorando su historia con pasión, disfrutando de cada paseo por las calles de Lost Heaven, sorprendiéndote con cada nuevo tiroteo en el que te ves inmerso, pues como decía, la historia y puesta en escena son el alma de Mafia, y en este remake cobran si cabe un mayor protagonismo. Si hace casi 20 años veíamos al pobre Tommy Angelo correr desesperado con unos matones a sueldo siguiendo sus pasos por calles desérticas, sin apenas vida, hoy esa misma persecución es más propia de una película; por su música, por todo lo que te rodea, por cómo se desarrolla la acción. Y resulta emocionante, claro. Es la tónica predominante en un juego que claramente entra por los ojos. Hay otra escena, en las afueras de la ciudad, que en el original… bueno, es luchar por tu vida en mitad del campo. Pero el remake logra transformar esta misión en algo más propio de una historia de terror, con relámpagos rasgando la noche con una luz tan intensa que hasta asusta. Es un ambiente tétrico, sucio, ideal para un buen tiroteo entre mafiosos.
Esta genial puesta en escena contribuye a que la acción de Mafia sea por momentos apasionante, pero sin ella, los tiroteos pierden bastante, principalmente por una inteligencia artificial algo errática que nos enfrentará a enemigos capaces de flanquearnos, de obligarnos a salir de una cobertura segura, pero también con tendencias suicidas; con propensión a ponerse al descubierto y caminar hacia nosotros como si lo de morir de un balazo en la cabeza no fuera con ellos. Se ha realizado un gran trabajo a la hora de plasmar las sensaciones con armas de época en nuestras manos, pero sin apenas variaciones, con poco margen para improvisar, te quedas con ganas de más. Y lo mismo me vale para las peleas cuerpo a cuerpo, que con demasiada rapidez muestran sus limitaciones, o el sigilo, que aunque tiene mayor importancia de la que recordaba, no es especialmente divertido; si bien contribuye a que puedas encarar algunas batallas con cierta ventaja.
La ciudad del crimen, un escenario de película
En lo visual un escenario de juego verdaderamente espectacular
Puesto que Mafia nos permite conducir por las calles de Lost Heaven, se suele pensar que estamos ante un juego de acción y mundo abierto, pero nada más lejos de la realidad. Esta es una aventura de acción lineal, con una estructura de misiones bien definida que no da mucho margen para el libre albedrío. Tienes una misión, conduces hasta tu destino, pegas unos cuantos tiros, y huyes a toda velocidad esquivando el tráfico y la policía. Así una y otra vez, enlazando misiones cuya premisa suele variar bien poco, aunque el ambiente consigue que se sientan muy distintas entre sí. Hay momentos de máxima tensión, como tiroteos en espacios cerrados sin apenas zonas seguras, y otros en los que debes lidiar también con el fuego de los francotiradores, que obligan a actuar con presteza. Lástima que no haya más momentos del estilo; batallas que te hagan pensar de un modo diferente para romper con la habitual monotonía de cubrirse y disparar.
He hablado de la acción, de la puesta en escena, pero también es importante mencionar la conducción, pues es otro de los aspectos que más cambian en este remake, con un estilo más amigable, no tan duro como el del original, si bien podéis optar por jugar como antaño, incluyendo el cambio de marchas manual. Gracias a estos ajustes las persecuciones son más emocionantes, más cinematográficas, logrando también que una de las escenas más memorables del original, que es esa carrera de Fórmula 1 que tantos dolores de cabeza nos dio por su dura conducción, se vuelva una experiencia más divertida, no tan frustrante, con una atención por el detalle y sensación de velocidad increíble. Estos momentos son trepidantes; como cuando disparas desde el coche mientras esquivas policías a diestro y siniestro, pero se echa en falta mayor variedad en estas misiones. Hay un par que cambian ligeramente las reglas, como conducir un coche con una avería, o esquivar controles policiales, pero saben a poco.
He disfrutado mucho, muchísimo, de este reencuentro con Tommy Angelo, Paulie, Sam y el resto de miembros de la familia Salieri. Es una experiencia narrativa de alto nivel, que junto a una puesta en escena de película te anima a jugar sin descanso, y que es capaz incluso de tocar la fibra sensible con algunas de sus escenas. Esta es la gran fortaleza de un remake que si bien en lo jugable es algo irregular, que no malo, lo suple con una ambientación soberbia. Es fascinante poder pasear por algunas de las calles más concurridas de Lost Heaven con tal nivel de detalle; ver a los peatones o todos esos coches de época recreados con tanto esmero yendo y viniendo de aquí para allá, a veces incluso, colapsando las vías principales de la ciudad. Y si por el día luce bien, cuando cae la noche Mafia: Edición Definitiva se vuelve si cabe más espectacular, dibujando estampas memorables, que son aún mejores los días de tormenta.
El alma de Mafia es su historia, los personajes que la protagonizan
Cuando combates al enemigo en estas condiciones climatológicas y hay explosiones, y rayos, y partes del escenario desmoronándose, el remake de Mafia está a otro nivel. E insisto una vez más en la calidad cinematográfica de las escenas, porque Hangar 13 lo borda en lo visual, narrativo y sonoro. Aunque algunas animaciones son bastante robóticas, en contraste con otras más naturales. Por eso es una pena que no se hayan añadido algunos extras en forma de misiones adicionales o retos especiales para fomentar la exploración y regreso a las calles de Lost Heaven una vez completas la campaña. Tenemos un Modo Libre que nos da libertad para movernos por la ciudad a nuestro antojo con todos los vehículos del juego, incluidas las motos (novedad en este remake), y abundantes coleccionables que están ocultos por los escenarios (son cómics y cartas con un fantástico diseño artístico), pero al menos en mi caso, me habría gustado tener más excusas para seguir unas horas más en Lost Heaven.
Completar la historia puede llevarte en torno a las 15-16 horas de juego, aunque si vas a por todos los coleccionables y aspiras tener todos los coches en tu garaje la cifra puede ascender hasta las 20 horas. Son horas más que suficientes para disfrutar de un gran remake que ha sabido rescatar con gusto todo un clásico de la acción como es el primer Mafia. En este punto no puedo más que agradecer a 2K Games que haya doblado al español el juego, conservando algunas de las voces del trabajo original. Sin olvidar tampoco todas las canciones licenciadas y la propia banda sonora del juego, que da gusto escuchar dentro y fuera del juego. Son muchos detalles de calidad, muchas virtudes, que me han hecho disfrutar de mi regreso a este.
Mafia es un gran videojuego de acción pero ante todo es una gran historia de gánster que atrapa con su fantástica puesta en escena y el carisma de sus protagonistas. Lo hizo en el pasado, y repite 20 años después gracias a un notable remake que deslumbra en lo visual, con un estilo propio de una película, pero que también hace bien los deberes actualizando las bases jugables del original con una mejor conducción, tiroteos basados en las coberturas, y escenas de acción más emocionantes. Es algo irregular en el diseño de sus misiones, pero es una experiencia que merece mucho la pena.
- La historia, los personajes y la puesta en escena. Es como vivir una película de gánsters
- Genial ambientación, con una gran banda sonora y doblaje al español
- Los tiroteos con coberturas y la conducción actualizan bien el clásico de Illusion Softworks
- Aunque las misiones son divertidas, algunas se sienten anticuadas, simples
- Una IA irregular, con enemigos capaces de lo mejor y lo peor
