Es uno de los RPG más exitosos de los últimos tiempos, ¡y aún sigue vendiéndose muy bien!, pero los fans de Skyrim ya miran al horizonte con ilusión, esperando grandes cosas del ambicioso The Elder Scrolls 6. ¿Qué podemos esperar del nuevo juego de Bethesda? En este especial repasamos todo lo bueno que tiene Skyrim, qué ha envejecido peor con el paso de los años y por supuesto... ¡nuestros deseos para TESVI!
Todavía recuerdo con mucho cariño mis primeros pasos en el legendario Morrowind. Esa música que años después aún resuena con fuerza en mi cabeza; esa lluvia que agitaba el agua de los ríos como nunca antes había visto; ese inmenso mundo de fantasía que podía explorar libremente y sobre todo… esa sensación; la emoción de vivir tu propia gran aventura en un mundo que parecía estar vivo. Por eso, pasen los años que pasen, nunca olvidaré esos primeros pasos en el que fue mi primer juego de la saga The Elder Scrolls. ¿Por qué os cuento esto? Aunque parezca mentira, no ha sido hasta ahora que he podido jugar y completar el exitoso The Elder Scrolls V: Skyrim, ¡que ya me vale!, y a pesar de su veteranía, pues tiene casi diez años de vida, he disfrutado enormemente de este épico RPG que aún es capaz de plantar cara a títulos recientes. Su frío mundo nórdico es inmenso, ¡una locura!, pero lo que hace genial a este videojuego de Bethesda es que de alguna forma te hace sentir parte de ese universo de fantasía.
Hay aventuras por doquier, decenas de misiones y encargos, y cada vez que superas una, el mundo cambia, evoluciona, ¡sigue adelante!, contribuyendo a que de verdad sientas que cada acción tiene sus consecuencias. Es una tontería pero que un aldeano de la zona más remota de Skyrim hable de rumores, o tragedias, o simplemente te reconozca por tus gestas ayuda a identificarse con ese héroe al que encarnas. Y lo confieso. Mientras disfrutaba de TESV no dejaba de compartir con amigos las emocionantes batallas a las que había hecho frente; relatar las decisiones que había tomado o narrar las épicas luchas contra los dragones. ¿Imperio? ¿Capas de la Tormenta? Aunque obviamente se nota el paso de los años este sigue siendo un extraordinario RPG que se deja disfrutar como pocos consiguen y, claro, tanto he disfrutado con él, que mientras jugaba no dejaba de imaginar cómo será el ansiado The Elder Scrolls 6. ¿Qué debe cambiar? ¿Cómo debe evolucionar la franquicia de Bethesda?
Skyrim, un RPG colosal que sabe cómo sorprender
Llevaba cerca de cuarenta horas de juego y a pesar de todo Skyrim seguía sorprendiéndome. Por las titánicas dimensiones de su mapa, sí, pero también por toda esa retahíla de misiones que se van apilando en tu diario. Siempre hay algo que hacer; alguien a quien ayudar, cuevas que explorar, asesinatos que cometer o armas que forjar. Y ahí seguía, jugando, batallando, ¡explorando sin fin!; y las horas pasaban, los días volaban, y en mi cabeza ya empezaba a resonar el "déjalo ya que hay otros juegos a los que dedicar tu tiempo". Y aún con esas, me costó dejar de lado las misiones secundarias o las aventuras que proponen los DLC de TESV.
La grandeza de Skyrim, como lo fue de sus antecesores, es que siempre tiene algo nuevo que ofrecer. Es verdad que algunas misiones son o muy simples o, a medio plazo, algo repetitivas; pero hasta cuando afrontas tareas tan mundanas como transportar instrumentos musicales de aquí para allá el juego jamás se desprende de ese halo de épica que define a su acción. Bandidos, enemigos jurados o hasta dragones pueden aparecer en cualquier momento, y entonces, con esa música, con esa intensidad propia de las mejores aventuras de fantasía, te olvidas de que este RPG tiene diez años de vida.
Aunque los gráficos ya no sean los más llamativos o las animaciones de los personajes sean robóticas, sigues disfrutando a lo grande. Así que sí, a pesar de los años Skyrim aún tiene capacidad para sorprenderte como pocos juegos consiguen, y esa es una de las razones por las que resulta tan divertido y emocionante perderse en su colosal universo de fantasía. No es la única.
¿Qué sigue siendo genial en Skyrim?
- Su gigantesco mundo de juego, con tantas zonas que explorar, aldeas que visitar y dragones contra los que luchar.
- Gran libertad para recorrer Skyrim en la piel de un guerrero, ladrón, mago ¡o lo que quieras! Y lo mejor es que cada decisión que tomas tiene consecuencias en este mundo.
- La banda sonora, por buena, pero también por ser parte esencial de la experiencia. Los combates contra dragones son épicos, en parte, gracias a la música.
Los años pesan y, sí, hay cosas que han envejecido mal
Resulta admirable que tras todos estos años Skyrim todavía se sienta un juego actual, pero claro, los años no pasan en balde para nadie y si eres de los que ya ha disfrutado de otros videojuegos de mundo abierto como Red Dead Redemption 2 o, sobre todo, el genial The Legend of Zelda: Breath of the Wild, sin duda echarás de menos toda esa vida que se respira en sus respectivos mundos virtuales. Es sin duda uno de los pilares que más se tambalean en la titánica obra de Bethesda Softworks, aun cuando a día de hoy sigue siendo un videojuego colosal con un universo bien construido, cargado de lugares que visitar, y cientos de personajes con los que interactuar. ¿Qué pasa? Que, en pleno año 2020, se siente algo artificial.
También el sistema de combate peca de ser demasiado simple para lo que hemos visto en los últimos años. Hay opciones, sí, porque puedes combinar magia y espadas, o usar arcos, aprovecharte del sigilo para asestar puñaladas o incluso machacar a tus rivales a puñetazos. Pero el combate es muy mecánico, sin apenas alternativas para improvisar o crear situaciones de juego increíbles. Y por último está la narrativa. Aunque la historia es interesante y sabe cómo involucrarte en ese gran conflicto que recrea el juego, se echan en falta unos diálogos más trabajados, que sepan emocionar, huyendo de la estructura del simple recadero que va de aquí para allá cumpliendo los deseos de todos aquellos con los que se cruza. Aún me sorprende la facilidad con la que el juego te embarca en un sinfín de aventuras por todo Skyrim, pero ciertamente, la fórmula necesita reinventarse.
Pese a la libertad de acción y la posibilidad de explorar su mundo de juego como te plazca, Skyrim se siente muy rígido en su estructura de misiones. Apenas hay variaciones durante la aventura y aunque es verdad que puedes resolver muchos retos del modo que prefieras, forzando cerraduras, robando, persuadiendo ¡o matando a todo el mundo!, ya hemos visto otros juegos que van más allá presentando un diseño de niveles más complejo, o aportando matices a las propias acciones del jugador, para que no todo sea blanco o negro, matar o escabullirse.
¿Dónde se nota más el paso de los años en Skyrim?
- A pesar de las opciones que tienes a tu disposición, los combates se sienten algo simples y mecánicos. Hay pocas variaciones en la lucha cuerpo a cuerpo.
- Aunque la historia es interesante su narrativa se siente anticuada. Tienes varias opciones de diálogo pero las conversaciones se sienten rígidas.
- A estas alturas la jugabilidad exige un planteamiento más orgánico de las misiones; que no todo sea hablar con alguien, ir a un lugar para cumplir el encargo, y regresar a por la recompensa.
Nuestros deseos para The Elder Scrolls VI
Presentado en el E3 2018, hasta la fecha poco se sabe del nuevo The Elder Scrolls pero claro, es imposible no dejar volar la imaginación e imaginar de qué modo nos sorprenderá el equipo capitaneado por el veterano Todd Howard. ¿Hay algún territorio de Tamriel que te encantaría visitar? ¿Qué crees que debería hacer Bethesda para crear el RPG definitivo? Con un notable The Elder Scrolls Online que ha expandido este universo llevándonos a una gran variedad de localizaciones, ¡incluida la mítica isla de Vvardenfell de Morrowind!, me muero solo de pensar en los increíbles parajes que exploraremos en esta aventura de rol.
También me ilusiono como un niño imaginando un renovado sistema de combate, con muchas más opciones y un estilo más trabajado, que no sea tan mecánico, dándonos así mejores sensaciones con el uso de espadas, hachas y otras armas cuerpo a cuerpo. ¿Más opciones de artesanía? ¿Nuevas formas de relacionarse con los gremios? ¿Mayor personalización? ¿Y cómo se potenciarán los gráficos? Hay tan poca información referida a este proyecto que las dudas se agolpan en mi cabeza, ¡el ansia me puede!, y no hago más que imaginar y pensar en todo lo que me gustaría ver en The Elder Scrolls 6.
Por eso aquí encontrarás mis deseos, las cosas que me gustaría que incluyera el ambicioso TESIV, pero quiero que tú también seas partícipe y nos cuentes en los foros de la revista, o bien en Twitter usando el hashtag #MiDeseoParaTES6, qué le pedirías al nuevo juego de la saga The Elder Scrolls.
- Quiero perderme en un mundo gigantesco, vivo, que nunca pierda la capacidad de asombrarnos como lo hiciera Breath of the Wild.
- Deseo perderme en parajes de una belleza sin igual; adentrarme en ruinas ancestrales y sortear innumerables obstáculos con el único objetivo de disfrutar del viaje. Que la exploración sea en sí misma la mejor de las recompensas.
- Me encantaría encontrarme con un sistema de combate al estilo de Dishonored, con mejores sensaciones para la lucha cuerpo a cuerpo, pero también nuevas habilidades especiales y conjuros mágicos con los que sorprender a los enemigos.
- Por supuesto sueño con batallas masivas entre grandes ejércitos, al estilo del asedio a Cuenca del Dragón, para que la acción sea si cabe más épica y espectacular.
- A Bethesda también le pido un mejor diseño de mazmorras, con muchos más puzles que pongan a prueba nuestro ingenio, y más desafíos que exploren las habilidades de progresión de nuestro avatar.
- Y por descontado, quiero una gran historia con personajes memorables, difíciles decisiones que lo cambien todo, una narrativa capaz de emocionarnos.