La conclusión de la trilogía XIII de la marca Final Fantasy está a la vuelta de la esquina. Lightning Returns busca ser una nueva demostración de los resultados que puede ofrecer una franquicia que, quizá, no ha vivido en los últimos tiempos sus mejores momentos. Sin embargo con esta nueva entrega hay motivos para la esperanza, con un sistema de combate distinto y abundantes cambios.
Recientemente Square Enix ha anunciado Lightning Returns, una nueva entrega de la saga Final Fantasy en el marco de las celebraciones del 25 aniversario de la conocidísima franquicia de carácter JRPG. La revelación no ha estado exenta de cierta polémica, y es que muchos han recibido con alegría el acontecimiento mientras que otros han acusado a la compañía nipona de exprimir la marca de forma incontrolada.
La trilogía Final Fantasy XIII va camino de su conclusión, y con ella también la figura de la propia Lightning a la que volveremos a controlar. La IP JRPG más clásica está de vuelta con una nueva entrega cargada de cambios y deseosa de recuperar el favor de crítica y público.
Sin Descanso
El último capítulo. Ese es un concepto en el que Square Enix está insistiendo mucho durante la presentación del nuevo juego de la franquicia, y también en el protagonismo claro y absoluto del personaje que da nombre al juego. Se trata de la propia Lightning, que es la dueña y señora de todo lo que nos cuenta en esta nueva entrega y que será el único héroe (heroína en este caso) al que controlaremos.
La ambientación tiene lugar en el mundo de Novus Partus, dividido en cuatro grandes islas y todo ello enmarcado en los últimos 13 días del universo del videojuego... Eso sí, mucho tiempo después de los eventos de Final Fantasy XIII-2. La contextualización de lo que se nos cuenta así como la dirección artística de todo lo que se mostrará en pantalla será de enorme importancia, y sus responsables han anunciado ya la intención de volcarse en recoger un feedback de aficionados al que quizá en el pasado no prestaron tanta atención, y para el que ahora recogerán las opiniones de los usuarios a través de su Facebook y Twitter.
¿Cómo funcionará? Los jugadores podrán dar su opinión tanto de los materiales que se vayan haciendo públicos para este Lightning Returns como sobre los pasados videojuegos de la serie, que no han sido acogidos siempre con idéntico cariño pero que han dejado hasta ahora dos muy buenos entretenimientos de calidad.
Lo que sí sabemos por ahora es que este mundo será cambiante en función de nuestras acciones, y también que habrá una metrópolis descomunal denominada Luxerion que será la urbe más grande que alberga este mundo. Su retrato está muy cuidado, con un ciclo de día/noche presente y con las actividades de los NPCs afectadas por ello e incluso con horarios prefijados para los monorraíles que unen las cuatro islas. Hay que dejar claro, sin embargo, que Square ya ha admitido que habrá únicamente un final para la aventura, pase lo que pase, así que a pesar de que nuestros actos alteren ciertas cosas durante el transcurrir de la campaña individual, la conclusión permanecerá inalterable. El programa, según declaran, está pensado para ser fuertemente rejugable.
También podemos participar del aspecto de Lightning desde el punto de vista físico y de rendimiento, pudiendo alterar por completo sus prendas y decidiendo pormenorizadamente sus armas o blindajes. De momento hay que matizar que no han explicado si la heroína podrá equiparse con algo más allá de los escudos y espadas de variados tamaños.
Espadas, escudos... ¿Y el combate? El juego seguirá apostando por la mecánica de lucha denominada Paradigm Shift, que se mantiene de episodios anteriores aunque con importantísimos matices. Podremos manejar con libertad a la protagonista alrededor del escenario, e incluso permitiéndonos blandir y cambiar las armas simultáneamente mientras lo hacemos. Este componente en tiempo real y que elimina muchos de los interfaces de lucha para el combate será una adición bienvenida para algunos aficionados, rompiendo radicalmente con el estilo (aunque no el concepto) de Final Fantasy XIII y Final Fantasy XIII-2. Dinamismo absoluto para unos actos que, por supuesto, consumirán tiempo de nuestra barra de personaje a pesar de accionarse en un sistema que nada tiene que ver con los turnos mediante los botones del pad, pero que conformarán escenas de acción mucho más espectaculares de las que todavía, por desgracia, no se conocen grandes cosas.
Esta sensación de tiempo real parece querer entroncar con el aspecto contrarreloj del que hace gala el título al completo. Esos trece días en los que se desarrolla la aventura van a pesar a nuestras espaldas constantemente, hasta el punto de que al morir deberemos escoger entre resucitar con los progresos enteramente conservados y perder parte del valioso tiempo que juega en nuestra contra o, por el contrario, perder nuestros últimos avances y no sacrificar tanto tiempo.
Desde la distancia que todavía nos separa hasta su lanzamiento, Lightning Returns: Final Fantasy XIII parece un videojuego sencillamente extraordinario al que seguir muy de cerca. En las próximas semanas comenzarán a conocerse informaciones mucho más tangibles y certeras, pero de momento la despedida de su bella protagonista da la sensación de que podría ser épica.