The Division: Mundo abierto, acción y caos en la Gran Manzana

The Division: Mundo abierto, acción y caos en la Gran Manzana
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Nueva York está en estado de alerta. No hay agua, no hay comida… es un completo caos. La sociedad está a merced de aquellos que quieren aprovechar la situación, criminales y saqueadores contra los que sólo puede luchar un grupo de agentes entrenados. Ahí entramos nosotros, en un videojuego de mundo abierto que pretende aportar cambios no sólo a Manhattan, sino a la industria del videojuego.

A poco de iniciarse la actual generación ya intuíamos que el género de los mundos abiertos en cooperativo, basado en la interacción con una comunidad de jugadores online, iba a convertirse en uno de los más importantes, o al menos innovadores. Daría paso a otro tipo de juegos, nuevo exponente de lo cual es The Division, un shooter de acción y exploración con elementos RPG y "sandbox" multijugador para hasta cuatro jugadores formando equipo.

Esto era en realidad lo más importante, y no tanto el espectáculo gráfico que se nos mostró en el E3 2013, el cual dio tanto que hablar. Han sido muchos años de desarrollo por parte de Ubisoft Massive y otros tantos estudios del gigante galo a nivel de colaboración. Un proyecto enorme y que además trata de "romper el molde" (como nos asegura Marcus Jansen, Creative Director). Este estudio de origen sueco ya lo hizo en su día con el género de la estrategia a través de exponentes tan destacados como World in Conflict.

Por eso, resulta tan curioso. The Division al final es una laboriosa combinación de elementos que crea algo muy original. Por una parte, tenemos la acción shooter, muy intensa y presente a lo largo de la aventura. Luego la potente exploración, con una Nueva York abierta desde el mismo comienzo del juego. Por último, una sensación de progresión muy rolera que promete decenas de horas frente a la pantalla, la cual se fortalece por ese aire estratégico que no sólo emana de la compañía, sino de la propia marca Tom Clancy. "Sentimos que todo encaja de forma sorprendente", nos sentenciaba Jansen al respecto.


Terror en la Gran Manzana

Esta era la primera ocasión en que la prensa tenía la oportunidad de probar el juego durante sus primeras horas y verlo con cierta profundidad. Uno de los aspectos que por supuesto más ganas teníamos de ver era el mundo abierto, esa Nueva York aislada del mundo a causa de una pandemia de origen desconocido. Nuestra tarea a lo largo del juego es ir descubriendo lo que pasa, pero lo mejor es que lo hacemos recorriendo una ciudad que es posible explorar libremente desde el principio.

La recreación de Manhattan es uno de los aspectos más brillantes del título, sobre todo en términos de ambientación.
La recreación de Manhattan es uno de los aspectos más brillantes del título, sobre todo en términos de ambientación.


Cada región contiene enemigos de distinta dificultad, saqueadores y otros personajes hostiles que nos atacan en cuanto nos ven aparecer. Por eso, al final nuestro progreso está ligado a este sistema, siendo lo más lógico ir de las zonas más asequibles a las más peligrosas (en cada distrito se nos sugiere el nivel que debemos tener para superarlo). Para eso tenemos un conjunto de misiones, y otra vez aquí lo interesante es que no existe orden predeterminado para completar la historia, sino que somos nosotros los que decidimos en cada momento lo que nos apetece.

Jansen nos comentó a este respecto que "supuso un auténtico reto para los guionistas", puesto que fuera cual fuera tu decisión, debía adquirir sentido narrativo dentro del avance. Por ello en realidad el juego se estructura en base a tres personajes fundamentales: la doctora Kandel, el capitán Benítez y el ingeniero Rhodes. Serán nuestros otros compañeros de aventura, encargados de las alas médica, de seguridad y de tecnología dentro de nuestra base de operaciones. El fortalecimiento de cada una de las alas guía la trama, suponiendo el hilo narrativo a través del cual la resistencia se hace poderosa dentro de Manhattan.

Hay variedad en los combates, algo a lo que contribuye que los enemigos se nos presenten con escudos, lanzallamas, armas blancas..
Hay variedad en los combates, algo a lo que contribuye que los enemigos se nos presenten con escudos, lanzallamas, armas blancas..


No obstante, los personajes más importantes seremos tanto nosotros como nuestro equipo de aliados, esa es la gran clave de The Division. Podemos formar equipos de cuatro personas para avanzar, acabar con enemigos, subir de nivel, mejorar equipamiento, pero también hacer "looting" entrando en determinados edificios. En definitiva, investigar. Hay muchas tareas secundarias que todavía nos queda por conocer, pero el videojuego está hecho para tener una cierta amalgama de opciones. También podremos jugar solos, siendo necesario estar conectados a Internet en todo momento, aunque no es imperativo poseer una cuenta PlayStation Plus o Xbox Live Gold.

The Division: Mundo abierto, acción y caos en la Gran Manzana


Los personajes más importantes seremos tanto nosotros como nuestro equipo de aliados, esa es la gran clave de The Division

Según nos comentó Jansen, sólo necesitas la cuenta para jugar en cooperativo y entrar en la Zona Oscura. Durante estas primeras horas de juego, lo cierto es que lo que más nos ha gustado ha sido esa sensación de cooperar, de librar tiroteos en compañía, comunicándonos entre nosotros. Como ocurrió con Destiny, pensamos que esta es la gran fortaleza del lanzamiento, puesto que indudablemente se hace más sencillo avanzar en compañía que en solitario.

Desconocemos en este punto si tendremos mazmorras o raids, pero lo que sí nos ha dado la impresión es que, al menos en lo que hemos probado, la ciudad de Manhattan aparece limitada. Es decir, no es posible acceder al distrito financiero ni tampoco más allá de Central Park (de hecho el parque no parece incluido). Sabemos que tendremos DLCs, algunos gratuitos y otros de pago, pero los responsables no han dado ninguna pista. Será un aspecto importante. Mucho creemos que la evolución de The Division tras el lanzamiento será muy importante. En cualquier caso, en 3DJuegos nos han adelantado que los contenidos gratuitos "irán más allá de la reparación de bugs y ajustes generales en la experiencia".

The Division: Mundo abierto, acción y caos en la Gran Manzana


Acción a nivel de calle

A nivel de jugabilidad, otro de los aspectos que más nos ha gustado es que The Division se desenvuelve bastante bien en los tiroteos. La tercera persona aporta un nuevo enfoque con respecto a juegos con los que comparte atributos, como podría ser Borderlands. Aquí tenemos coberturas, con un funcionamiento generalmente satisfactorio, así como uso de armas tanto de largo como de corto alcance (nos ha encantado la escopeta, realmente fulminante). A esto se añade el uso de habilidades y perks, entre los que se encuentran explosivos remotos, torretas de todo tipo y curación de aliados. Es decir, se trata de una acción con profundidad, ya que hay mucha variedad gracias al desbloqueo de técnicas como usar un escudo. Si queremos ser más tácticos, es fácil conseguirlo.

The Division: Mundo abierto, acción y caos en la Gran Manzana


El hecho de poder levantar a un compañero una vez ha sido abatido también añade sensación de unidad, puesto que es importante ir en grupo y no separarnos demasiado. La presencia enemiga llega a ser importante por momentos, presentándose en distintas formas, desde locos que vienen hacia nosotros con bates de béisbol hasta otros armados hasta los dientes y que poseen una armadura muy difícil de reducir. Su comportamiento en el escenario también nos ha convencido. Se cubren y usan distintos flancos para ponernos las cosas complicadas.

En definitiva, la acción shooter es interesante y está muy presente, siendo importantísima para ganar experiencia con cada enemigo abatido. Todos los sistemas se compenetran, y es aquí cuando tenemos que hablar de la progresión. Al principio del juego se nos pide crear nuestro protagonista, con un sencillo editor, pero eso es más bien el comienzo, la punta del iceberg. La verdadera construcción viene después, escogiendo equipamiento, objetos, habilidades… para así progresar en el sentido que deseemos. Recordemos que aquí no tenemos clases.

La Zona Oscura se erige como otro los grandes ingredientes del juego

La Zona Oscura se erige como otro los grandes ingredientes del juego. Se trata de un área situada en el centro de la isla neoyorquina y a la que sólo podemos acceder pasando el muro de cuarentena. Es una región especialmente peligrosa pero que también nos proporciona armas y equipamiento de mejor calidad. Lo interesante de esta zona es que combina cooperativo y competitivo, en el sentido de que podemos entrar solos o acompañados, y decidir si nos aliamos con los demás o actuamos como lobos solitarios. En el momento en que disparemos a alguien, nos convertiremos en un hostil, así que depende de los jugadores decidir quienes son sus amigos o enemigos en esta parte del juego.

Existen situaciones muy siniestras que demuestran la situación de caos que se vive en Manhattan. La Zona Oscura es en este sentido el epicentro del mal.
Existen situaciones muy siniestras que demuestran la situación de caos que se vive en Manhattan. La Zona Oscura es en este sentido el epicentro del mal.


Esto introduce en escena una importante palabra: tensión. La sentiremos por la propia ambientación, la de una región en cuarentena en la que debemos usar una máscara para no infectarnos. El objetivo es hallar un botín y extraerlo, pero la magia reside en que una vez llamemos a un helicóptero, el resto de jugadores (se nos ha dicho que en una partida podrían caber entre 20-24) acudirá para sabotearnos… o quién sabe, puede que decidan ayudarnos. Todo depende de las intenciones de cada uno.

A través de esta primera experiencia hemos sentido el sistema un tanto confuso, pero lo que no se puede negar es que resulta original y cuenta con gran carisma. La ambientación, como en el resto del juego, consigue atraparte, con un sistema meteorológico que varía del día a la noche, y aunque casi siempre está nevando, el sol nos acaba visitando de vez en cuando. No hay transiciones entre partes, con sólo breves momentos en que el juego puede sufrir un poco más en términos de "frame-rate" para cargar determinadas zonas.

The Division: Mundo abierto, acción y caos en la Gran Manzana


El videojuego posee un sistema día-noche que según los desarrolladores influye en la forma en que se comportan los enemigos.
El videojuego posee un sistema día-noche que según los desarrolladores influye en la forma en que se comportan los enemigos.


Es decir, un rendimiento notable que como ya podíais intuir no viene acompañado de ese espectacular aspecto gráfico que se nos mostró en 2013. Aún así, el conjunto se muestra sólido. Seguramente se echa en falta un poco más de detalle en ciertas parcelas, pero a nivel global es un juego muy evocador, transmitiendo una atmósfera de caos y supervivencia que se acompaña por un apartado sonoro no muy presente, pero que sabe acompañar con temas más vivos en los tiroteos y otros más tranquilos mientras exploramos libremente.

En resumen, nos convence lo que hemos visto y jugado. The Division se enfrenta aún a varias dudas, propias de este tipo de lanzamientos, principalmente por si el contenido inicial de lanzamiento estará a la altura, y en segundo término por cómo irá evolucionando con el paso del tiempo. Estas son cuestiones cruciales, pero de momento la base la vemos sólida, con un planteamiento de mundo abierto muy atractivo y unos ingredientes RPG tan abundantes como adecuados a la propuesta. La primera respuesta antes del lanzamiento (8 de marzo) la tendremos en realidad muy pronto, con una beta que comenzará el día 28 de este mes para Xbox One y el 29 para PS4 y PC. Sin duda, la mejor forma de comprobar si la propuesta de The Division es para vosotros.

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