The Callisto Protocol es el próximo survival horror de ambientación espacial de los creadores de Dead Space, uno de los estandartes del mal rollo de su generación. Para despejar cualquier duda que puedas tener, hemos entrevistado a Chris Stone, su director creativo, y te contamos todas las claves y secretos del que promete ser el juego más terrorífico de 2022.
Uno de los juegos que todos los amantes de los survival horror tenemos bien apuntado en nuestra lista de deseos es The Callisto Protocol, una nueva experiencia de terror desarrollada por algunos de los creadores originales de Dead Space. El título viene de la mano de Striking Distance, estudio fundado por Glen Schofield (vicepresidente de la ya extinta Visceral Games, entre otros muchos cargos), y ocupó un lugar especial tanto en el último State of Play como en el ambivalente Summer Game Fest. Después de verlo en acción, lo cierto es que entiendo por qué hay tanta expectación: ambientación muy tétrica en una desolada y gélida luna de Júpiter, engendros y mutaciones con muy mala leche, clara inspiración en películas como Alien o Un lugar tranquilo.
Sus bazas son muchas, pero también había cierto ruido alrededor del proyecto; por tanto, hemos aprovechado la ocasión para charlar largo y tendido con Chris Stone, el director creativo de The Callisto Protocol, y te contamos todas las claves de un título que viene con una idea muy clara: sentar cátedra en el género. A continuación hablamos de hasta qué punto es posible que lo consiga.Uno de los aspectos más llamativos de The Callisto Protocol es, sin duda, su atmósfera opresiva y oscura, circunstancia que nos permite establecer paralelismos constantemente con Dead Space, uno de los mejores survival horror de su generación y probablemente el auténtico salvador de un género que estaba a la deriva allá por mediados de la década de los 2000. No obstante, la cuestión de la ambientación de The Callisto Protocol tiene truco, porque no estamos ante el clásico terror especial al uso. La acción no se centra en la Nostromo, el legendario buque insignia de Alien, ni en una nave similar a la USG Ishimura de Dead Space, sino que acontece en un lugar mucho más real, más tangible: Calisto, quizás la luna más inhóspita de Júpiter.
Horror y misterio en la Luna Muerta de Júpiter
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Chris Stone nos comentó que no tardaron mucho en escoger el lugar, ya que sabían de las duras condiciones que presenta el satélite. "No hay manera de que alguien pueda sobrevivir en la superficie. Y, por supuesto, tener a Júpiter ahí al lado crea un paisaje precioso". Pero para poner un poco de contexto, en Calisto hace más frío que en Burgos (no se calienta por la gravedad de Júpiter, a diferencia de otros satélites), está hasta arriba de dióxido de carbono, y hay evidencias de que puede existir un océano a más de cien kilómetros de profundidad. Imagina la presión y lo que puede salir de ahí.
El objetivo es que te pongas en la piel de protagonista mientras intenta escapar de Calisto
Por si eso no fuera poco, en The Callisto Protocol estás en una cárcel de mala muerte. Más específicamente en Black Iron Prison, un centro de máxima seguridad al que van los peores criminales del sistema solar: asesinos en serie, sediciosos en potencia, ticktockers… Hay un poco de todo, pero nada es bueno aquí. Nos queda un poco en duda el papel de Jacob Lee, nuestro protagonista, que se despierta de pronto en la cárcel, justo en los prolegómenos de una auténtica pesadilla espacial que, cómo no, involucra tanto motines violentos como movidas de mutaciones muy bestias. El estudio nos aseguró que se han pasado los tres últimos años perfilando la experiencia al máximo, y que el objetivo de este survival horror en tercera persona es que te pongas en la piel del protagonista, que empatices con sus desesperados intentos por salir con vida del frío abismo de Calisto.
¿Expectativas de éxito? Más bien pocas, me temo, porque Black Iron es un poco como la Alcatraz del futuro; no solo tienes que escapar de la cárcel, sino que tienes que sobrevivir hasta recuperar tu libertad. En este caso, no tienes que nadar hasta San Francisco, sino aguantar temperaturas inferiores a -190 grados y robar una nave. Buena suerte, Jacob.
Lo cierto es que a Striking Distance se le notan las cosas muy claras en materia de horror interactivo; a fin de cuentas, la desarrolladora está compuesta por un montón de profesionales de largo recorrido, de los cuales muchos de ellos trabajaron directamente en Dead Space. "Hemos perfeccionado nuestras habilidades a la hora de desarrollar el terror y de hacerlo efectivo: el ritmo, los personajes, el sonido, todos estos aspectos colaborando al unísono es lo que crea una experiencia verdaderamente cautivadora e inmersiva", nos dijo el director de este brutal survival horror. Eso sí, tenemos que tener en cuenta que tener éxito con un survival horror no es fácil, ni de lejos. Necesitas una excepcional dirección artística, clave para que lo morboso no se torne cutre y de mal gusto, pero también un gran apartado audiovisual y una jugabilidad que ponga al jugador en situaciones complicadas, que lo saquen de su zona de confort continuamente. Esa es la razón por la que el género se ha tenido que reinventar tantísimas veces. La inmersión es también imprescindible; en este caso, la sensación de aislamiento y el miedo a lo desconocido son los dos pilares del terror de The Callisto Protocol según sus propios responsables.
De fondo tienes la cuestión del sonido, que también se las trae, con gemidos lejanos, susurros que no puedes entender plenamente, o movimientos furtivos de seres que parece que te están rodeando para saltar sobre ti cuando menos te lo esperes. Quizás el mejor ejemplo de esto sea el mítico Silent Hill 2, si bien aconsejo cierta prudencia a la hora de establecer comparaciones de este estilo, tanto por temas de lejanía temporal como por la esencia de cada uno: la experiencia de The Callisto Protocol va por un sendero mucho más gore y palomitero, mientras que la obra maestra de Konami era mucho más reflexiva, más metafórica. Sin embargo, sí que he visto la intención de currarse un sonido brutal por parte del estudio; es más, el propio Chris Stone nos sacaba a colación Condemned, un título desarrollado por Monolith Productions (autores también de F.E.A.R o los más recientes Sombras de Guerra y Sombras de Mordor), como su mayor inspiración en temas de audio, y decía que era increíble cómo "habían conseguido tanto con tan poco". Tiene razón.
Sangre, vísceras y muchas mutilaciones
En esencia, la fórmula de The Callisto Protocol es heredera directa del survival horror con cámara al hombro, a caballo entre la acción y el terror propiamente dicho. Ya el mismo Dead Space era una especie de reimaginación del alma de Resident Evil, pero con más mala leche, y el primer título de Striking Distance sigue ese camino casi como si fueran las sagradas escrituras. Por consiguiente, podemos esperar lo típico: un ritmo más bien lento (aunque hay un botón para esquivar), algo tosco en términos de reacciones para favorecer la sensación de peligro, cierta escasez de recursos y un compendio de armas brutales. Hay una pistola que es clavadita a la cortadora de plasma de Isaac, en el sentido de que también se basa en apuntar a las extremidades para mutilar gravemente a los enemigos, y también hemos visto una especie de porra-eléctrica y una motosierra de mano que lo pone todo perdidísimo de sangre y órganos… Y todo ello con un enfoque realista que debo admitir que me ha dejado reflexionando, tanto para bien como para mal. Pero eso es un tema para otra ocasión, de momento estoy a tope con ver una pierna volando por ahí.
Hemos perfeccionado nuestras habilidades a la hora de desarrollar el terror y de hacerlo efectivo
Por otro lado, también pudimos ver el uso de la gravedad como poder ofensivo. Más que una capacidad sobrenatural al uso, al estilo de Eleven en Stranger Things, creo que se trata del GRP del que nos habló Chris Stone, es decir, un dispositivo de pacificación de prisioneros que utilizan los guardias de la prisión para controlar a la peña cuando todo se desmadra, básicamente. Eso nos permite levantar a los bichos y tirarlos contra turbinas, con una posterior explosión visceral que casi parece una referencia al estudio que EA cerró, para desgracia de todos nosotros, pero me atrevería a decir que también abrirá vías para la resolución de puzles ambientales y para poner distancia en situaciones límite. Ambos aspectos son fundamentales dentro del género, y en el gameplay del State of Play se sugiere su presencia en más de una ocasión. Todavía es pronto para asegurarlo, pero no creo que estemos muy desencaminados. Además, el combate promete estar muy bien medido, con transiciones muy suaves entre el uso de armas a distancia y el duelo a muerte con cuchillos que es el cuerpo a cuerpo.
¿Y qué pasa con las versiones de nueva generación? Ya sabemos que The Callisto Protocol fue desarrollado nativamente en PlayStation 5, Xbox Series y PC, y que a partir de ahí han ido quitando determinados elementos para que el título pudiera funcionar en PS4 y Xbox One. El resultado todavía está por ver, pero nos han asegurado que la experiencia se mantiene prácticamente intacta. ¿Cómo es esto posible? No está del todo claro, pero parece que tiene que ver con las facilidades que ofrece Unreal Engine 5 como motor, cuyo rendimiento en las consolas anteriores también es bastante convincente. Eso sí, nos señalaron que la inmersión está más conseguida en la nueva generación; para ser más precisos, nos dijeron que estaban especialmente encantados con las posibilidades que ofrece el DualSense de PlayStation 5 de cara al desarrollo de un survival horror.
The Callisto Protocol es heredero directo del survival horror con cámara al hombro, entre la acción y el terror
"Es una bendición para nosotros; el altavoz que tiene incorporado nos permite jugar más con el sonido, y los gatillos y todo eso son una manera más de sumergirte en una gran experiencia. Detallitos que prometen meterte más en la acción, en el pánico generalizado que tiene lugar en Black Iron Prison. Como suelo decir, recomiendo coger todo esto con pinzas (nadie te va a decir que su producto es malo), pero hay unos cuantos motivos para darles credibilidad. En definitiva, The Callisto Protocol está cuidando muchísimo cada detalle para crear una de las experiencias survival horror más terroríficas de los últimos años. Y ya solo queda esperar al 2 de diciembre para descubrir qué se oculta tras la luna muerta de Júpiter.