Con el videojuego sobre la memorable película de El Caballero Oscuro en un limbo de posibles cancelaciones, la única esperanza para los fans de Batman reside en Arkham Asylum. Sin embargo no debe cundir el pánico, puesto que su apuesta parece de una calidad indudable. En este segundo avance profundizamos en los aspectos más puramente jugables de este prometedor lanzamiento.
Rocksteady y EIDOS traman algo grande. Los creadores del más que notable Urban Chaos echan el resto con su segundo proyecto, y toman la senda del entretenimiento violento y adulto de, por ejemplo, Bioshock; para plantearnos un reto impresionante y opresivo con el que sumergirnos en los lúgubres pasillos del mítico sanatorio mental de Arkham.
En el Primer Contacto que publicamos hace ya unos meses profundizamos en el argumento y en el contexto-cómic con el que cuenta este título a sus espaldas. No vamos a volver a incidir en ello ni en su argumento, emplazando al lector a echar un vistazo a ese texto para ponerse al corriente puesto que como acabamos de comentar, en esta ocasión vamos a centrarnos en los aspectos jugables.
Batman Año Uno
¿Qué es Batman Arkham Asylum? ¿Es un juego de acción?, ¿Es un juego de sigilo?, ¿Es un juego de investigación?, ¿Es un Hack and Slash?... Rocksteady ha decidido apostar acertadamente por hacer de su lanzamiento sobre el oscuro superhéroe alado, un potente y agresivo cóctel en el que mezclar raciones de todos y cada uno de los elementos nombrados.
El denominado FreeFlow Combat es lo que este estudio londinense pretende aportar al género del combate, y para ello apuesta por un estilo libre con el que combatir con varios enemigos al mismo tiempo sin perder la fluidez, el ritmo y el carácter intuitivo del que hace gala el videojuego. Para ello se ha optado por distribuir eficazmente los controles en los cuatro botones frontales del pad, repartiéndolos entre las acciones de golpeo, forcejeo, patada, etcétera.
El botón izquierdo del pad será el que más emplearemos para combatir, y será el del ataque principal. El superior será el de la réplica, mientras que con el de la derecha dejaremos inconscientes a nuestros oponentes por unos instantes. El botón inferior queda, por último, para las maniobras evasivas; si lo pulsamos una vez saltaremos sobre un enemigo, si lo apretamos en dos ocasiones esquivaremos sus ataques, y si lo dejamos presionado servirá para desplazarnos en sprint.
Esto sólo será el comienzo, puesto que según vayamos progresando con Batman durante el videojuego iremos desbloqueando nuevas maniobras y combos con las que sacar el máximo partido a las combinaciones de botones. La maestría con estas maniobras será fundamental, especialmente si no gustamos de emplear el sigilo. Acabar con un enemigo es relativamente sencillo en Arkham Asylum, pero las brutales aglomeraciones de éstos que llegan a juntarse contra nosotros suponen un desafío tremendamente exigente.
La Danza de la Muerte
La clave de Arkham Asylum es el combate rápido y brutal, con lo cual pasaremos mucho tiempo planeando nuestro próximo movimiento antes de llevarlo a cabo, puesto que un error en esta faceta puede hacer que nos veamos rápidamente rodeados por un sin fin de enemigos a los que no podremos vencer.
Esta es una de las virtudes del título de Rocksteady, puesto que si bien el sigilo y la táctica son opciones muy recomendables -la mejor, probablemente,- nadie nos obliga a llevarla a cabo, con lo cual los suicidas y amantes del combate más salvaje también tendrán sitio en su jugabilidad. Así pues el nuevo título de Batman abarca varias vertientes, premiando a los jugadores que opten por unas u otras con diferentes recompensas.
Si escogemos el “lado salvaje” disfrutaremos de unos combates de lo más intenso, en los que los rivales harán uso de su superioridad numérica para ponernos las cosas muy difíciles. Aquí la lucha será lo más parecido a una danza de la muerte que podamos experimentar, con unos enemigos y un protagonista muy ágiles que combaten entre sí con descomunal precisión y ligereza, al más puro estilo God of War.
Los escenarios, sin embargo, están fundamentalmente pensados para sacar el máximo partido de un estilo más discreto y disciplinado, que nos permita acabar con los enemigos uno por uno y de una forma más sutil y menos aparatosa. Para elegir esta segunda opción contamos con toda la tecnología que siempre ha caracterizado a Batman, y también con su traje oscuro, fácilmente camuflable en los entornos oscuros y tenebrosos de Arkham.
Colocación de explosivos, lanzamiento de Batarang o sencillos estrangulamientos por la espalda… Para knockear a nuestros oponentes cualquier técnica vale, y si empleamos el sigilo nos será mucho más sencillo localizar y aislar a los matones que merodean los pasillos de este sanatorio mental que muy a menudo pueden incluso superar la decena.
La mejor de las tácticas será la de entrar a una zona amplia y encaramarnos silenciosamente hasta las alturas para tener desde ahí una visión táctica extraordinaria. La visión térmica puede echarnos una mano a la hora de localizar a los rivales, y la colocación de explosivos nos ayudará a acabar con ellos con una potente onda expansiva, y también a redefinir el aspecto de un escenario casi completamente destructible.
Así es la jugabilidad de Arkham Asylum. Un delicioso compendio capaz de satisfacer a los amantes del Hack and Slash con sus combates masivos y su complejo sistema de combos, y al mismo tiempo de hacer las delicias de los fans de Splinter Cell o Metal Gear Solid gracias a unos entornos muy cuidados y a una abundancia de gadgets y artefactos tecnológicos muy avanzados con los que jugar.
Arkham: Muros de Pesadilla
Pero los combates, las plataformas y los gadgets no son toda la jugabilidad del nuevo Batman, y es que incluso Arkham Asylum cuenta con un pequeño componente rolero para enriquecer su profundidad. La experiencia se obtiene en cada combate, y nos permite ir progresando en los árboles de habilidades y movimientos especiales del superhéroe, para desbloquear formas más eficaces de combate.
La experiencia aparece representada en pantalla por una barra junto al medidorde salud, y al acabar con enemigos veremos cómo ésta se va llenando y cómo unos pequeños marcadores en forma de murciélagos inundan la pantalla para advertirnos. Al comprar nuevas habilidades dispondremos de sus nombres y del precio en puntos de experiencia que requieren, pudiendo de este modo escoger el camino con el que personalizar nuestro estilo de combate.
En Rocksteady son, de momento, muy secretistas con el tema de las nuevas habilidades a desbloquear. Hasta ahora a la prensa sólo le han mostrado el Hang-Attack, algo así como el “ataque desde las alturas”. Este es un movimiento clásico de Batman, y fácilmente reconocible por películas y cómics. Su empleo es sencillo, en el momento en que nos encontremos en lo alto de algún mapa y haya un rival bajo nuestros pies, veremos un indicador en pantalla que nos advertirá de que podemos realizar este movimiento especial. Accionándolo, Batman descenderá a toda velocidad sobre su oponente, lo cogerá y lo dejará inconsciente en la parte superior, lejos de la visión de sus compañeros.
Batman Arkham Asylum llegará a nuestro país en un momento todavía por determinar del presente año 2009, y lo hará para las plataformas Xbox 360, PlayStation 3 y PC. El oscuro superhéroe creado por Bob Kane se enfrentará a la más oscura y siniestra de sus aventuras, la que se desarrolla tras los muros del sanatorio más peligroso de Gotham City.