El lanzamiento de Counter-Strike 2 tendrá lugar a lo largo de las próximas semanas, pero Valve guarda en secreto la mayor parte de las novedades que llegarán al videojuego. La compañía mantiene su política de escasa comunicación con la comunidad y los pocos cambios que han podido descubrir los jugadores han llegado a través del 'datamining'. Está práctica consiste en analizar el código del juego para descubrir ajustes que aún no están implementados, pero que forman parte de los planes de la desarrolladora. Llevando a cabo está técnica durante la última actualización de la beta (16 de agosto) los usuarios han descubierto que los desarrolladores estarían trabajando en acortar la duración de las partidas.
Un posible cambio que no convence a los jugadores
Los datos obtenidos analizando el código del juego indican que las partidas de Counter-Strike 2 pasarían de una duración máxima (sin prórroga) de 30 rondas a solo 24. Aunque la comparación no es del todo justa que el shooter táctico de Valve utilizó este sistema durante los primeros años de la saga, sería exactamente el mismo modelo de funcionamiento que utiliza Valorant. Cabe destacar que los cambios no están confirmados. Aunque resultan evidentes analizando el código del juego, podría tratarse solo de una prueba que tendrá lugar durante la beta o aplicarse únicamente a partidas no competitivas. Esta fase previa al lanzamiento está pensada, a fin de cuentas, para probar grandes ajustes que no necesariamente tienen que llegar a la versión final.
Pese a esta situación, los jugadores de Counter-Strike no han tardado en reaccionar. En la mayoría de las ocasiones, las opiniones han sido negativas. "¿Quién ha pedido esto exactamente? Significa que tienen que cambiar literalmente todo el funcionamiento de la economía. Las rondas de pistolas ya son cruciales ahora, imaginaos como será con partidas en formato al mejor de 24", explicaba un jugador. Ditello, quien fue manager del club de esports x6tence, se pronunciaba en una dirección similar: "Reducir el número de rondas no va a hacer que la experiencia de juego sea más dinámica o entretenida, solo acortará la partida. Replegarse a la mínima o aguantar hasta el último segundo para atacar es lo que vuelve el juego pesado. Eso no se soluciona reduciendo las rondas".
El 'datamining' tras las actualizaciones de Valve nos acompaña desde el inicio de la beta de Counter-Strike 2.
Lo cierto es que las partidas de Counter-Strike: Global Offensive pueden alargarse hasta cerca de una hora de juego. Es una dedicación temporal bastante exigente, sobre todo para los usuarios menos comprometidos con el shooter táctico. Casi todos los juegos competitivos han ido reduciendo de forma progresiva la duración de sus enfrentamientos. En ese sentido y si es que se lleva a cabo, el ajuste podría ayudar a Valve a convencer a los usuarios que buscan una experiencia algo más ligera. Sin embargo, no parece que los veteranos estén tan satisfechos. En este sentido, quizá los desarrolladores deban explorar otros caminos para conseguir el mismo objetivo.
Pese a este posible ajuste, el lanzamiento de Counter-Strike 2 promete ser uno de los eventos del año. Valve ha aprendido de sus errores lanzando otras versiones del juego. Source o Global Offensive fueron entregas muy divisivas en su estreno, mientras que esta gran actualización parece dar pie a opiniones generalmente positivas entre los jugadores. Al menos, es así en lo tocante a la jugabilidad. Ahora solo falta que la desarrolladora sea capaz de atinar con sistemas como el 'matchmaking' y que resuelva adecuadamente esta posible polémica en lo referido a la duración de las partidas.
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