Podríamos caer en el "está todo inventado" en el mundo de los videojuegos, pero la realidad es que en la última década hemos presenciado el estallido de los MOBA, la revolución de los shooter en forma de Battle Royale primero y extracción después, así como el advenimiento de los hero-shooter de la mano de Overwatch y su progresiva caída. Y este medio sigue siendo uno tan creativo que puede llegar alguien, hacer un juego 2D pixelado, venderlo a poco más de 2 euros y crear un nuevo género.
Estoy hablando, claro está, de Vampire Survivors. La mezcla de roguelike, bullet hell y simplicidad extrema en la premisa le valió a la obra de Poncle el GOTY honorífico en muchos medios y aún más corazones. Pero es que además de eso, son muchos los juegos independientes que han seguido su camino, ya sea refinando la fórmula, o mezclándola con aún más referentes.
Ya sea el notable Brotato, el interesante Boneraiser Minions o incluso el hijo bastardo del género con los ARPG tipo Diablo, Death Must Die, todos ellos ponen algo sobre la mesa. Para empezar, darle más valor aún a Vampire Survivors y convertirlo en un verdadero referente histórico del desarrollo independiente. Pero para seguir, optimizar y buscar sublimar la forma perfecta del Horde Survivor.
Y, después de comprarlo de oferta por unos míseros 8 euros esta semana, creo que quien más está haciendo por ello es Deep Rock Galactic: Survivor. Nacido como un spin-off del exitoso e inclasificable Deep Rock Galactic, toma la base de Vampire Survivors (mejora en cada run en base a armas y perks, esquiva de enemigos o progresión fuera de las partidas), para darle un empujón en apartados tan importantes como la progresión, el apartado técnico o los objetivos en partida.
Es un spin-off de un exitoso videojuego
Lanzado como acceso anticipado el pasado mes de febrero, ya recibió su primer pack de contenido con un nuevo mapa hace apenas unos días. Más de un millón de copias vendidas en todo este tiempo implican que el público está interesado en el juego, y también que el género tiene espacio para crecer.
Tiene todo el sentido del mundo, porque se trata del primero que intenta sacar provecho de la fórmula Survivor, a la vez que se asienta sobre una franquicia exitosa. Porque sí, Deep Rock Galactic es un pelotazo de más de 8 millones de copias vendidas a fecha de enero de este año.
Este acercamiento es justo el que va a hacer Riot Games, que lanzarán una adaptación del género a su más preciada licencia: League of Legends. Con Teamfight Tactics ya lograron quedarse el grueso de los jugadores de autobattlers, y el estudio californiano busca realizar la misma maniobra con el camino abierto por Vampire Survivors.
Un bucle jugable muy logrado, y con mucho potencial
Pero volvamos a Deep Rock Galactic: Survivor. Lo que me ha mantenido al borde de la silla durante mis partidas ha sido un detalle concreto, y es el loop jugable. Mientras en Vampire Survivors el mayor empuje a seguir jugando es la propia sensación, el gamefeel originado al recoger cada vez más cristales de experiencia y la fantasía de poder originada por la mejora de las armas, en este juego pasan muchas más cosas durante una run.
Cuando avanza la partida se alcanzan momentos realmente tensos.
Esto es así porque la progresión está mucho más integrada en el bucle jugable, así como es mucho más explícita. Vampire Survivors tomó la decisión de ser un poco "souls", si me lo permitís, ya que más allá de indicaciones interrogantes en el mapa, no se habla de forma directa de qué hacer para desbloquear según qué personajes, habilidades o mejoras.
Deep Rock Galactic: Survivor apuesta por decirte qué necesitas para hacer todas estas cosas, hilándolo además con la temática de su universo. Eres un enano minero espacial, así que tiene sentido que necesites metales concretos para subir tus habilidades entre partidas.
Pero no se queda ahí, ya que la interacción con el mapa es superior a muchos de los Survivors-like. En todo momento podemos dirigirnos hacia una pared y picarla. De esta forma, las dinámica básica del género, la de escapar del enjambre enemigo, adopta una jugabilidad mucho más emergente.
El Deep Rock Galactic original es un shooter cooperativo con entornos destruibles.
También se añaden misiones y desafíos concretos. No son nada revolucionario, y nos pedirán mejorar un arma a cierto nivel, hacer una cantidad de daño concreto de un tipo particular, o recoger unos objetos desperdigados por el nivel. Pero, de nuevo, suma para aumentar la rejugabilidad y la agencia del jugador.
Otro punto importante es el ritmo de la partida. Aquí seleccionamos el bioma, el nivel en esencia, y la partida se desarrolla por pisos. Me explico: Deep Rock Galactic Survivor da unos objetivos concretos como aguantar cierto tiempo o esperar a un enemigo particularmente duro, tras lo cual debes salir pitando a la tuneladora para bajar otro piso... Aumentando la dificultad en el proceso.
Aunque la cantidad de contenido disponible ya te tendrá unas cuantas horas entretenido, es de esperar que este crezca casi de forma exponencial. Ahí está un importante vector del éxito a largo plazo del proyecto. Pero como base, la de Deep Rock Galactic Survivor es posiblemente la más sólida del género.
En 3DJuegos | Balatro, Los mejores combos de comodines y trucos para dominar
Ver 1 comentarios