Si hay una consola donde PES siga dominando, esa es Wii. Y tal vez por ello FIFA 11, como ocurrió con la anterior entrega, no quiere enfrentarse a su eterno rival de manera directa. ¿La respuesta? Un videojuego de fútbol arcade con personajes caricaturizados, estelas de disparos y, como novedad este año, fútbol en la calle. Te presentamos el once de EA para Wii.
Vuelve a oler a césped en nuestra Wii. FIFA regresa, y en la plataforma de Nintendo lo hace exactamente igual que como hace un año, explorando el lado más arcade del deporte rey y alejándose así de las versiones para Xbox 360 y PlayStation 3, que apuestan duramente por la mejor simulación futbolística dentro del mundo de los videojuegos.
Así pues, teniendo en cuenta las limitaciones de Wii, el director Kaz Makita y su equipo regresan a su original y a la vez -creemos- que acertada propuesta: diseñar un FIFA 11 repleto de licencias, con 30 ligas, 500 equipos y más de 15.000 jugadores... aunque marcado por una experiencia de juego arcade y un estilo mucho más desenfadado.
Para empezar, aquí eso de los rostros fidedignos y el "motion capture" se obvian por completo para dejar paso a unos diseños de futbolistas caricaturizados (eso sí, reconocibles), que se meten en estadios y partidos donde hasta el balón desprende ráfagas de viento visibles a su paso. Fue la anterior entrega, FIFA 10, la que nos sorprendió con esta fantasiosa perspectiva sobre el fútbol. En esta ocasión, gran parte de aquello continúa vigente, aunque con ciertas matizaciones (por ejemplo, se elimina el "slow motion") que logran un más cuidado equilibrio entre realidad y ficción.
Simulador parece, arcade es
Uno de los aspectos que más llamó la atención de los usuarios en la anterior edición fue el hecho de que se pudieran meter goles de falta y penalti mediante la simple pulsación de un botón del wiimote en el momento preciso.
Era la jugabilidad arcade llevada al límite de títulos recreativos como Super Sidekicks, así que EA ha decidido suprimirlo en esta ocasión. Ahora lanzaremos faltas teniendo en cuenta un indicador de potencia y -atención, novedad- la posibilidad de indicar también el efecto mediante otra particular barra. Una característica, esta última, que no está presente en los penaltis, aunque sí que se añade la oportunidad de amagar con el portero pulsando una de las cuatro direcciones de la cruceta direccional.
Precisamente, y hablando del portero, se ve que éste ha mejorado sustancialmente a la hora de despejar balones durante los saques de esquina y también cuando toca protagonizar brillantes estiradas, algo de lo que vamos a ser conscientes en cualquiera de los tres niveles de dificultad que nos propone FIFA 11, los cuales, por cierto, deberían ampliarse en futuras entregas, ya que resultan insuficientes.
De la calle a los estadios
En cuanto a modos de juego, una de las clamorosas carencias de la anterior entrega fue el no contar con una modalidad donde pudiéramos vivir el fútbol desde la piel de un jugador (Conviértete en Profesional). Pues bien, parece que las quejas se han escuchado, y el resultado es De la calle a los estadios, una modalidad en la que seguir a nuestro futbolista desde sus primeros partidos en la calle, hasta que termine jugando en estadios como el Nou Camp o el Santiago Bernabeu, formando parte de equipos de élite.
Pero eso no es lo más significativo. Nada más comenzar, deberemos crear a nuestro futbolista (a imagen y semejanza si queremos), seleccionando nombre, peinado, color de ojos, tipo de cara, atuendo y hasta cualidades. Y no todo terminará ahí, ya que a medida que progresamos ganamos puntos de experiencia y fama con la que obtener recompensas (unas botas nuevas, por ejemplo) o mejorar atributos de velocidad, pase, dispare, pase, resistencia...
Todo depende en gran medida de nuestros resultados y de los retos que completemos en cada partido, como podría ser el de realizar alguna pared, anotar un tanto de volea o simplemente marcar el último gol del partido.
Sin embargo, tal vez lo más destacado de la modalidad "De la calle a los estadios" sea precisamente la calle y los partidos que se libran en ella. Esto es algo completamente nuevo en esta edición, una especie de FIFA Street donde jugamos cinco contra cinco sobre terrenos de juego que bien podrían ser los de nuestro barrio. Todo sin faltas que valgan, comentarios "in game" ("¡Portero, cómprate unos guantes nuevos!") y porterías de distintos tamaños; incluso las hay que están colgadas en la pared a modo de canasta. Pero si no queremos pasar por este modo de juego, no tenemos por qué hacerlo. Fútbol callejero está destinado a ese simple fin.
Y no tenemos que dejar de comentar que regresa el modo manager bajo el nombre de Elegidos para la gloria (prácticamente sin novedades), aparte de un modo Torneo y un modo Entrenamiento para practicar libremente, para realizar saques de falta o experimentar los penaltis.
En definitiva, un buen repertorio de opciones de juego que no deja de lado a la faceta online, permitiendo encuentros de uno contra uno o dos contra dos. No obstante, y si no queremos sumergirnos en los servidores de EA, siempre podemos competir dentro de partidos en la misma consola hasta un máximo de cuatro jugadores.
El once de EA para Wii
Unos usuarios que, eso sí, cuentan con el beneficio de optar por el control tradicional mediante wiimote y nunchuk (o también el controlador clásico) y por el manejo con el wiimote en solitario, una alternativa que deja al jugador únicamente la función de pasar y disparar apuntando con el cursor a la pantalla. Una solución que sólo gustará a los jugadores más ocasionales, puesto que la máquina se encarga de que futbolistas corran.
Una máquina que, gráficamente, no nos ha sorprendido apenas en esta entrega. Los modelados de los jugadores, aunque caricaturizados, resultan demasiado poligonales; y las animaciones apenas se han ampliado, aparte de que el número de cámaras sigue intacto, es decir, sólo tenemos una vista a la que se le puede modificar el zoom y la altura. Algo claramente insuficiente.
Casi tanto como los comentarios de Manolo Lama y Paco González, que son prácticamente los mismos que el año pasado. Menos mal que se han sumado las voces desde el banquillo y, especialmente, las que escucharemos durante los partidos en la calle, una brillante incorporación que prácticamente resume las novedades de un FIFA 11 que intenta pulir -en algunos casos con éxito, en otros no- al videojuego del año anterior.
FIFA 11 mantiene la fórmula arcade de su precedesor y la expande con renovadas licencias, pequeños detalles de jugabilidad y, lo más importante, el fútbol de calle, una incorporación que, junto a una particular versión de Conviértete en profesional, conseguirá convencer a los fans para hacerse con esta nueva entrega. Eso siempre que les guste su estilo desenfadado y experiencia arcade.
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