FIFA llega a Nintendo 3DS, y lo hace con una versión que apuesta por el espíritu simulador, las licencias y, por supuesto, el efecto estereoscópico. La pregunta es: ¿habrá estado FIFA 12 a la altura de la portátil? Toma asiento, porque te lo retransmitimos en directo desde nuestra tribuna de comentaristas.
Parecía difícil, pero a finales de 2011, y sin que Nintendo 3DS haya cumplido un año desde su lanzamiento en el mercado europeo, nos encontramos con que la máquina ya dispone de un respetable catálogo. A ello han contribuido videojuegos muy trabajados como Mario Kart 7, Super Mario 3D Land o Pullblox, aunque no todos han sido así. En efecto, también hemos tenido títulos que han denotado poco interés por aprovechar la máquina, a la vez que falta de dedicación.
Actualmente, y por desgracia, no son pocos los ejemplos disponibles a los que hemos de sumar uno más: una versión de FIFA 12 a la que se le notan más ganas por salir a tiempo para la campaña navideña que un verdadero interés por satisfacer a los fans del deporte rey. De hecho, uno de los aspectos más criticables de la creación de EA Sports es que se muestre tan descuidada en su envoltorio (con una presentación y menús francamente mejorables) como en su contenido (que obvia aspectos tan importantes como la inclusión de partidos en línea).
Además, teniendo en cuenta que ya contábamos con un notable exponente como PES 2011 3D (el cual, por cierto, mejora con la edición de este año), los canadienses -y principalmente el productor Kaz Makita- deberían haber invertido muchos más esfuerzos en este lanzamiento. Y no es que este exponente para la máquina tridimensional de Nintendo carezca de aspectos positivos. Precisamente, se deja jugar, es entretenido y tiene cantidad de modos de juego; pero a cualquier producto FIFA se le debe exigir un mínimo de calidad, más ahora que la franquicia pasa por uno de sus mejores momentos de forma.
Fútbol de segunda división
FIFA 12 hace gala en 3DS de un sistema de juego muy tradicional, como era de esperar, apoyado tanto en la utilización del analógico como de los botones para llevar a cabo todo tipo de acciones: pases al hueco, entradas, vaselinas, presión con un segundo defensa, hacer salir al portero... Todo las opciones están contempladas, siempre desde una perspectiva jugable que no se puede comparar con la vista en Wii (más arcade), y mucho menos con las de Xbox 360 o PlayStation 3. Más bien, nos encontramos ante una concepción propia y específica. Eso sí, siempre tendente al factor simulación.
Es de agradecer que el título se preocupe por hacer entrar en juego a la pantalla táctil. Así, podemos tirar faltas y penaltis desde el panel inferior, marcando la trayectoria y efecto del balón con nuestro dedo para, a continuación, también establecer la precisión del disparo. Inclusive, durante los partidos, podremos ver la portería -cuando estemos lo suficientemente cerca- desde el marco táctil, a fin de tocar algún punto entre los tres palos para chutar. Y se agradece la opción, resultando útil en alguna ocasión, aunque en la mayoría se eche de menos un poco más de precisión.
Y es que, realmente, este FIFA 12 no está exento de buenas ideas, pero al equipo de desarrollo le ha faltado tiempo o talento para llevarlas a buen puerto. A este respecto, y más allá de la experiencia de juego, que no es para nada deleznable, lo que verdaderamente estropea el resultado final es el apartado visual, con animaciones demasiado bruscas y un diseño general carente de detalle, indigno de una plataforma como 3DS.
Por supuesto, es motivo de elogio que contemos con nueve cámaras para seguir la acción de los partidos (controlando incluso el zoom y la altura de cada una de ellas): de televisión, de línea de fondo, de banda, de grúa, dinámica... No falta a la cita la conocida perspectiva del modo Conviértete en profesional, aparte de la gran introducción que supone la vista en “primer plano” (que incluyó ya PES 2011 3D a principios de año), la cual sigue al jugador con la posesión de la pelota.
Gracias a todas estas cámaras siempre encontraremos el mejor ángulo posible desde el que jugar los partidos, a pesar de que la espectacularidad gráfica nunca existirá, tampoco cuando activemos el efecto estereoscópico. De hecho, será completamente prescindible, más cuando llevéis unos cuantos partidos y el cansancio de vuestra vista no compense la sensación tridimensional que se obtiene.
Al menos, es un alivio pensar que esta versión cuente con tantas opciones de juego. En este sentido, cabe destacar la presencia del Modo Carrera, en el que asumimos el papel del mánager de un equipo existente, realizando fichajes, mejorando instalaciones y hasta contratando a personal (como preparadores, ojeadores o médicos...). También destaca el añadido de Conviértete en profesional, con el que llevaremos a cabo la ya familiar tarea -para los que ya hayan jugado otros FIFA- de llevar a nuestro propio jugador (factor personalizable incluido) desde las calles hasta los estadios profesionales, jugando desde una cámara especial y ganando experiencia por nuestras hazañas dentro del terreno de juego.
No hay que olvidar las clásicas modalidades siempre omnipresentes, como los Torneos (al estilo de ligas y copas de todo el mundo). Adicionalmente, tenemos partidos callejeros amistosos (y sin reglas que valgan), muy a pesar de que no resulten atractivos ni en su forma, ni tampoco en sus mecánicas. Pero, sin duda, la característica más mejorable es la que tiene que ver con la conectividad. Se nos permite jugar en modo local con otros usuarios, pero no online, un defecto que resta muchos enteros a un producto que realmente sólo saca provecho de Internet para actualizar plantillas y equipaciones de equipos (los uniformes no tendrán sus escudos ni publicidad oficiales hasta que realicemos las descargas oportunas).
Todo esto, en suma, no hace más que poner de relieve la ambición por lanzar un videojuego antes de que estuviera terminado. Y es que, aunque jugablemente FIFA 12 no es el peor de los simuladores deportivos, gráficamente deja bastante que desear. Las animaciones son tan poco fluidas y están tan mal enlazadas, que tendremos la sensación de que existen problemas de “frame rate”. Asimismo, y a pesar de que los modelados faciales son correctos (podemos al menos distinguir a los futbolistas), el detalle tanto en el césped como en las gradas es casi inexistente, dando lugar a una ambientación que sólo se salva por los efectos de sonido.
Los comentarios de Manolo Lama y Paco González, rescatados de otras versiones de FIFA 12, ayudan así al conjunto, al unísono del griterío de la afición, que reacciona a las jugadas de peligro con mucho acierto. Tal vez sobren algunos comentarios desde la línea de banda (más propios de un partido de barrio que de uno profesional), pero en líneas generales nos encontramos ante el apartado más trabajado de un título que, en el resto de facetas, tiene todavía mucho que entrenar. La próxima temporada veremos cómo lo hace en el partido de vuelta.
La serie FIFA se estrena en Nintendo 3DS con un simulador futbolístico repleto de modos de juego y caracterizado por un estilo de juego correcto, pero desvirtuado y desfallecido por un apartado visual pobre, falta de dedicación y escaso interés por aprovechar el “hardware” de la nueva portátil. Teniendo en cuenta lo que Konami ha sido capaz de hacer con su particular saga de fútbol en la consola, lo nuevo de EA Sports sólo podría encajar en vuestras opciones de compra si tuvierais un afán absoluto por las licencias y el término “PES” no formara parte de vuestro vocabulario.
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