Era un reto prácticamente imposible, pero lo consiguió. Un usuario se propuso alcanzar el nivel máximo de Final Fantasy 7 sin abandonar la primera zona del videojuego. El desafío consiste en encerrarse con Cloud y Barret en el primer reactor para pasar cientos de horas aniquilando a los enemigos que aparecen en los encuentros aleatorios. Siempre la misma banda sonora, los mismos colores y los mismos rivales que ofrecen 80 puntos de experiencia. Es algo que casi nadie se atrevería a intentar y quizás a estas alturas te preguntes porque un jugador decidió hacerlo. La respuesta, en realidad, es la parte interesante de esta historia.
El desafío fallido de un usuario de internet
Este desafío de Final Fantasy VII ya era relativamente conocido por los fans de Square Enix, pero saltó a la fama gracias a una comunidad privada de internet. Un usuario que escribía con el pseudónimo "Dick Tree" lo propuso en septiembre de 2012. La promesa era simple: "En este hilo voy a hacer que Cloud y Barrett lleguen al nivel 99 en el primer reactor de Final Fantasy VII". Más allá de estar aburrido, no había grandes motivos por los que el jugador en cuestión se decidiese a iniciar el reto. Sin embargo, parecía que iba a cumplirlo. Los primeros días actualizaba regularmente su situación, compartiendo el progreso y llegando alcanzar niveles muy elevados apenas unas horas después de comenzar.
Subir al nivel cien en la primera zona de Final Fantasy VII requiere de más de 350 horas teniendo en cuenta solo la duración estimada de los más de 30.000 combates que debemos completar. Esto sin tener en cuenta ningún error ni el tiempo que tardan en aparecer los enemigos. Para los menos versados en estas primeras entregas de la franquicia, es un sistema similar al de Pokémon: caminas de lado a lado y 'saltan' batallas aleatorias. En este sentido, se esperaba un progreso lento pero constante y, en el peor de los casos, divertirse viendo como su compañero de foro fracasaba. Sin embargo, la comunidad no tardó demasiado en comenzar a cabrearse con la actitud de Dick Tree.
Completar el reto supone correr de un lado a otro durante quinientas horas en esta tubería (Vía CirclMastr).
Tras su comienzo fulgurante, pasó semanas sin aparecer en el foro. Regresaba, ponía algún mensaje o actualizaba la situación y no volvía a aparecer hasta pasado mucho tiempo. Lo que al principio eran ciclos de siete o catorce días pronto se convirtieron en meses y terminó siendo más de medio año. Puede que fuera la presión del resto de usuarios o que no podía asumir el reto, pero lo cierto es que casi dos años después de comenzar apenas había completado un 13% del desafío alcanzando el Nivel 50 con sus personajes. Todo esto, mientras discutía de forma regular con otros miembros de la comunidad creando un ambiente hostil y de enfrentamiento. Se convirtió en algo así como el gran villano del foro.
Un reto basado en el desprecio y la camaradería
CirclMastr era otro usuario de la misma comunidad privada que se había impacientado por la falta de progreso de Dick Tree y el mal ambiente que se generaba en el foro. Decidió coger la sartén por el mango y se propuso comenzar él mismo el desafío. Dos días más tarde compartió una foto con el título "Que te den, Dick Tree" en la que ya mostraba a sus personajes a nivel 10. Poco a poco avanzó y se ganó el cariño del resto de usuarios, que hasta le pedían retransmitir en directo su progreso a través de unos mensajes que todavía podemos ver gracias al sensacional trabajo de documentación y preservación de Cybershell en su canal de YouTube.
Subir de nivel en Final Fantasy VII requiere cada vez más experiencia.
A diferencia del que se había convertido en su gran enemigo, las actualizaciones de CirclMastr llegaban de forma regular más allá de algunos contratiempos de la vida cotidiana. Apenas cuatro meses después de comenzar ya había adelantado al que era su gran rival y, aunque las cosas se ralentizaron debido a una lesión en el brazo, continuaba progresando. Mientras tanto, Dick Tree no dejaba de enfrentarse a otros usuarios asegurando que ya había completado el reto, pero que no lo compartía con nadie. También defendía haber sido uno de los primeros jugadores del mundo en hacerlo, siendo quien popularizó el resto en las comunidades en línea.
Mientras estos mensajes se sucedían y pese a tener que pasar por una operación para recuperarse de su lesión en el brazo, CirclMastr seguía avanzando. Finalmente, el 8 de abril de 2017, completaba el desafío. Habían pasado casi cinco años desde que el reto había comenzado en el foro y dos desde que él mismo se había propuesto lograrlo. Tras conseguirlo fue a guardar partida a toda velocidad para no perder su última hora de progreso y no tardó demasiado en cortar la retransmisión en directo. "Quiero dar gracias a mis dos patrones, que me dieron un dólar cada uno. Se que en realidad no es nada de dinero, pero para mí significa algo", dijo. Viendo los últimos minutos resubidos a YouTube, es fácil notarlo emocionado, aunque sin sobrereaccionar.
Ni siquiera el lanzamiento de Final Fantasy XVI le ha quitado valor a la eterna séptima entrega de la saga.
Kotaku fue el primer medio en cubrir la historia cuando el desafío se completó en 2017 y, como no podía ser de otra forma, hubo críticas a CirclMastr por haber 'malgastado' tiempo con su desafío. Fue entonces cuando en la sección de comentarios del medio especializado en videojuegos anglosajón dejó dos párrafos muy interesantes. Uno por seguir con esta narrativa de enfrentamiento y camaradería, el otro, por ser casi una lección vital.
"La vida no tiene un significado inherente. Decir que nuestras vidas son absurdas y que nuestro logros no tienen sentido es obvio. Por grandes que sean nuestros logros o por amplio que sea su alcance, el tiempo lo convierte todo en polvo y la muerte destruye la memoria. Eso no significa que no podamos atribuir nuestro propio significado a lo que hacemos. Puesto que nada tiene sentido en sí mismo, somos libres de crear significados, de hacer metáforas y, al hacerlo, reflexionar sobre nosotros mismos y nuestro mundo".
"Llegar al nivel 99 en el primer reactor no tiene sentido. Entonces, ¿por qué lo hago? Lo hago para expresar mi odio y mi desprecio por Dick Tree. Lo hago para expresar la camaradería que siento por aquellos que hemos seguido este tema durante años solo para ser decepcionados por él. Lo hago, también, para demostrarme a mí mismo que puedo perseverar. El acto en sí no tiene sentido, yo le doy el sentido".
Ver 7 comentarios