Después de arrasar en ventas durante la pasada campaña de Navidad, Inazuma Eleven 3 está de regreso. ¿Y por qué motivo? Pues porque para complementar a las ya existentes ediciones Rayo Celeste y Fuego Explosivo, Nintendo ha querido cerrar esta trilogía con una edición muy similar a éstas pero que introduce alguna que otra pequeña innovación.
Desde que Campeones (Oliver y Benji, vaya) arrastrara a miles de espectadores cada tarde, no recordamos un fenómeno televisivo relacionado con el fútbol de dibujos animados como el que actualmente concentra Inazuma Eleven. De hecho, es posible que esta última serie manganime sea incluso más popular en la actualidad de lo que Campeones llegara a ser en su momento. Es una auténtica fiebre. Y claro, se trata de un filón que conviene explotar al máximo, algo que tanto Nintendo como sus desarrolladores originales, Level-5, están pertrechando. No en vano este mismo binomio nos presenta la tercera entrega, suponemos que definitiva, de Inazuma Eleven 3, que llega acompañada de la coletilla ¡La Amenaza del Ogro!
Y lejos de tratarse de una nueva versión, estamos ante una especie de "remix" de la misma que ya disfrutamos recientemente, dada cuenta que el 90% de la aventura (o un porcentaje mayor incluso) es exactamente la misma. Por eso mismo os avisamos desde ya que, a menos que seáis fans acérrimos de la saga, no corráis a la tienda más cercana para haceros con él si ya tenéis alguna de las dos ediciones previas de este título.
Sí, porque más allá de pequeños detalles jugables y argumentales que ahora repasamos, Level-5 lo único que ha implementado son los cambios pertinentes para adecuar el juego a la película de animación en la que se basa (la primera de la saga). Y ya está, poco más hay que llevarse al zurrón.
La otra vertiente del fútbol
Aunque se trata de una saga consolidada y muy conocida más allá de sus orígenes manganime, conviene dejar claro una vez más un aspecto singular de esta producción para todos aquellos que sean ajenos a la misma. Y es que lejos de tratarse de un simulador tipo FIFA, PES o, incluso, un arcade de fútbol al estilo FIFA Street o el clásico de SNK Super Sidekicks, la jugabilidad que nos ofrece este título se aleja de ambos conceptos.
De esta forma y tal y como sucedió precisamente con muchas de las conversiones realizadas para consolas como SNES (que, por cierto, jamás llegaron a nuestro territorio) de la serie Campeones, Level-5 ha optado por implementar una jugabilidad tipo aventura con toques de RPG. Y una de las actividades más amenas y excitantes que nos ofrece el desarrollo del juego son precisamente los encuentros, si bien éstos transcurren de una forma muy diferente.
Lejos de jugar de manera "convencional", en Inazuma Eleven debemos ir escogiendo las diferentes opciones que tenemos a nuestro alcance en cada momento como cambiar las posiciones de los muchachos sobre el terreno de juego, seleccionar a los futbolistas que creamos oportunos, efectuar las jugadas y disparos especiales ya famosos... Todo muy pausado, táctico y, también, absorbente. Nada que ver con lo dispuesto en los simuladores de fútbol convencionales.
Y esta mecánica de juego tan particular con que son plasmados los partidos se ve complementada por otros elementos jugables muy relevantes. Hablamos de los diálogos -muy frecuentes- entre los diferentes protagonistas, de la exploración de múltiples escenarios, la progresión paulatina de las habilidades de los miembros de nuestro equipo... En fin, lo que suele ser habitual en este tipo de propuestas que combinan la aventura con tintes de rol.
Leves innovaciones
Hasta aquí os hemos ofrecido un pequeño resumen de lo que nos depara Inazuma Eleven 3 en materia jugable, algo que ya explicamos en su momento en las restantes ediciones del juego. Ahora vamos a centrarnos en las novedades que presenta esta edición Ogro, que aunque no son demasiadas sí que conviene resaltarlas.
La más evidente tiene que ver con el cambio de protagonista y, también, de los personajes secundarios y hasta de algunos de los rivales. En lugar de manejar a Mark, en esta oportunidad el protagonista es su tataranieto, Canon Evans, un muchacho que, por razones relacionadas con su argumento, viaja en el tiempo para liderar a la selección japonesa en su lucha contra el equipo Ogro. No queremos dar más detalles acerca del argumento porque, al estar basado en la película, podríamos incurrir en los odiosos spoilers. Basta decir que los viajes en el tiempo tienen una gran relevancia en el transcurso de la aventura y, también, que el guión no es exactamente el mismo que se dejó ver en el film, existiendo ciertos cambios notorios.
Por otra parte, esta edición cuenta con alguna que otra escena inédita (incluyendo la introducción), así como leves retoques técnicos, un final distinto y demás detalles menores. Y también nos ha dado la sensación de que el nivel de dificultad se ha ajustado un poco más, siendo algo más complicado doblegar a los equipos rivales a medida que avanzamos en la historia, si bien puede que esto sea una mera percepción nuestra.
También merece ser destacada la nueva apariencia que presenta el Monte Magnitud, lugar que pudimos visitar en las pasadas entregas pero que en esta ocasión sus dimensiones son más amplias y en él podemos encontrar a los dos equipos especiales (Dark y Sky) que aparecían en las ediciones Fuego Explosivo y Rayo Celeste.
Y para terminar, se ha añadido un nuevo centro de entrenamiento así como alguna que otra nueva melodía, sumando un compendio de innovaciones interesante pero que puede quedarse muy corto para todos aquellos que ya jugaran a las dos ediciones originales.
Fiel y colorido
En términos técnicos, nos encontramos obviamente ante un calco de lo que ya disfrutamos en Fuego Explosivo y Rayo Celeste. De esta forma y a pesar de tratarse de un título para 3DS, se deja notar que, en realidad, este juego fue diseñado en origen para la anterior generación de portátiles de Nintendo: DS. Y eso queda de manifiesto atendiendo a múltiples detalles que se dejan ver en el título como la apariencia y el modelado de los personajes, la presencia de los múltiples decorados que acogen la aventura, etc. Y no porque todos ellos sean malos o estén realizados con poco gusto o detalle. Simplemente, ninguno de ellos explotan ni por asomo el potencial técnico de Nintendo 3DS.
Pero a pesar de esto es cierto que la fidelidad que presenta cada uno de los personajes que se dejan ver a lo largo del juego en relación con la franquicia manganime es elevadísima, un aspecto fundamental que conviene resaltar. Y, también, debemos valorar como se merece la diversidad de estancias y zonas que recorremos, la implementación del efecto 3D propio de la consola y su notable colorido.
Y en cuanto al sonido, queremos recalcar una vez más el minucioso trabajo de localización llevado a cabo por Nintendo, que se ha molestado en doblar y traducir cada línea de texto y diálogo a nuestro idioma. Sin duda esta faceta es sobresaliente, siendo quizá el aspecto más llamativo de todo el juego.
Como ya ocurriera con sus casi "gemelas" versiones Rayo Celeste y Fuego Explosivo, Inazuma Eleven 3 sigue siendo uno de los títulos más notables que podéis encontrar para Nintendo 3DS a poco que os gusten tanto la serie en la que se basa como el propio deporte rey. Si dejasteis pasar estas producciones que os acabamos de enumerar, haríais bien probando esta nueva vertiente del fútbol virtual.
Nintendo 3DS recibe una nueva ración del mejor fútbol táctico con Inazuma Eleven 3: ¡La Amenaza del Ogro!, título que nos ha dejado una vez más un gran sabor de boca... a pesar de tratarse básicamente del mismo título que ya disfrutamos hace unos meses. En nuestra opinión, aquellos jugadores que se hicieran con alguna de las ediciones previas de Inazuma Eleven 3 deberían dejar pasar esta entrega porque sus novedades no nos parecen motivo suficiente como para repetir. En el caso contrario, se trata de un título notable en todos sus campos.
Comprar Inazuma Eleven 3: ¡La Amenaza del Ogro!- Gran fidelidad con la serie en general.
- Su sistema de juego sigue siendo muy adictivo.
- El doblaje en español es brillante.
- El 90% del juego (o más) es el mismo que ya disfrutamos previamente.
- Su faceta técnica sigue siendo algo limitada por su origen DS.
