Need for Speed se hace profesional. No abandona del todo las calles, pero sí a los policías y a las carreras ilegales. Con una mezcla de simulación y arcade, la franquicia se reinventa también en Nintendo DS, máquina que no va a desmerecer en nada la calidad de las versiones “next-gen”. ¿Preparados para sentir el rugido de los motores en los pequeños altavoces de vuestra portátil?
Need for Speed se ha convertido a base de mucho talento en una de las franquicias más aclamadas dentro del sector de los videojuegos. Al principio era difícil sentir la velocidad de este simulador más allá del teclado de los PC, pero con el paso del tiempo la franquicia se expandió, siendo ahora casi imposible que máquina alguna se quede sin su ración de Need for Speed. Una buena testigo de este hecho es la "dual screen" de Nintendo, que no ha pensado ni por un momento en el hecho de perderse este espectáculo renovado y que viene con una innovadora propuesta jugable mezcla de arcade y simulación.
Como en el caso de sus hermanos mayores, la portátil de Nintendo recibe un videojuego que rompe en cierta manera con lo que había sido hasta ahora una de las más importantes sagas dentro del mundo del videojuego. Los policías abandonan las carreteras y las apuestas pierden su lugar para dar la bienvenida a las competiciones profesionales de fin de semana. Unos eventos que tendrán como protagonistas a coches de calle pero dentro de un escenario legal en el que deberemos de avanzar para demostrar que somos los mejores pilotos del mundo.
Conviértete en el rey de la pista
Poniéndonos en el lugar de Ryan Cooper y seleccionando el modo principal de juego (Modo Carrera), nos dispondremos a recorrer unos eventos que se agruparán dentro de una especie de mapa-esquema con rutas desbloqueables que acabarán por llevarnos hasta el mismísimo Ryo Watanabe, maestro del volante al que deberemos de batir para así acabar el juego. Un videojuego que, como en el caso de otras plataformas como Xbox 360 o Wii, se presenta como enorme y con los alicientes suficientes como para hacer de este título uno de los más destacados dentro del género de la conducción en Nintendo DS.
Dentro de cada evento (también conocido como Día de Carrera) se nos presentarán diversas pruebas a completar. No será necesario ser el primero en cada una de ellas, pero sí lo hacemos entonces lograremos dominar esa jornada, recibiendo a cambio un premio en forma de un nuevo bólido que sumar a nuestra colección. Si no somos tan buenos como para conseguirlo, también tendremos la posibilidad de comprar nuestro propio vehículo o incluso tunearlo o añadirle piezas de mayor calidad hasta que acabe a nuestro gusto. Alerones, llantas, pinturas, motores, frenos, chasis, neumáticos, suspensiones... todos estos elementos serán personalizables con múltiples mejoras que cambiarán no sólo la apariencia del coche, sino también el comportamiento.
Volante tradicional pero a doble pantalla
Un comportamiento que controlaremos gracias a los controles clásicos (durante las carreras no será necesario usar el stylus) que estarán gobernados por la cruceta digital y cuatro botones que servirán para acelerar, frenar, usar el freno de mano y para activar el nitro. Acciones todas ellas que tendrán en el botón “Select” un innovador y sorprendente aliado, ya que su pulsación significará que querremos ralentizar la acción durante unos segundos. Esto nos permitirá no sólo apreciar con más detalle el modelado de nuestros vehículos, sino también preparar con más tranquilidad una curva que nos podría permitir, por poner un ejemplo, ganar la posición al piloto que tenemos delante.
Las pruebas no sólo consistirán en dar varias vueltas a los circuitos con la finalidad de llegar el primero, sino que también nos encontraremos con situaciones en las que disputar carreras de aceleración o en las que derrapar a lo largo de un circuito en el que adicionalmente deberemos de llegar los primeros a meta. Propuestas todas ellas diferentes y que suponen una clara intención por mostrarnos una jugabilidad que no acabe por hacerse repetitiva. A ello ayudarán diversas modalidades como las carreras por sectores, por vuelta rápida o por eliminaciones.
Sin embargo, Need for Speed ProStreet para Nintendo DS incluye algunas modalidades adicionales, como es el caso de la Carrera Rápida, una buena manera de comenzar a quemar ruedas sin muchas complicaciones. También podremos optar por compartir carreras, en cuyo caso nos interesará entrar en el Modo Multijugador, disponible tanto si tenemos una tarjeta de juego como varias, y eso sin contar la conexión Wi-Fi de Nintendo, la cual nos lanzará a la red de redes en busca de otros jugadores que seguro alargan la vida de un título notable y que supone un gran añadido dentro del catálogo de videojuegos de conducción para la portátil de los de Kyoto.
Electronic Arts se ha esforzado y nos ha traído una versión de Need for Speed: ProStreet que aprovecha en gran medida el potencial de la portátil de los de Kyoto. No hará un gran uso de la pantalla táctil, pero sí que se servirá de una doble pantalla capaz de acercarnos al mundo de las competiciones (esta vez) legales. Es largo, entretenido y con una jugabilidad capaz de permitirnos ir más allá y disputar carreras contra otros amigos. Sin duda, una de las mejores apuestas de conducción actuales para Nintendo DS.
Comprar Need for Speed ProStreet