Tras una gran expectación y grandes esperanzas, este abanderado de los shooters de Nintendo Wii realizado por Ubisoft, debuta con todos los honores.
Luchar contra la mafia japonesa de hoy en día, manejar katanas y armas blancas, un diseño artístico cuidado y atractivo, una nueva forma de jugar a un shooter aprovechando el mando inalámbrico y el nunchaku de Wii… con estas palabras sobre Red Steel, no es de extrañar que desde que el proyecto saliera a la luz unas semanas antes del pasado E3, muchos jugadores siguieran de cerca un título que prometía tanto y despertaba la imaginación como pocos. Por fin, Red Steel está ya en las tiendas, y tras jugarlo y enfrentarnos a la mafia, podemos afirmar que la experiencia es de lo más intensa.
Una historia de amor, traición y odio entre clanes
En Red Steel asumiremos el papel de Scott Monroe, un joven enamorado cuya primera intención era ser presentado al padre de su novia, el señor Sato, –un importante hombre de negocios-, y al que los acontecimientos (tiroteos, traiciones, secuestro de su chica, asesinato y descubrimiento de que el señor Sato era además uno de los máximos dirigentes de los Yakuza), le llevarán al mismo Japón con una promesa pre-mortem que cumplir: rescatar a su amada, y poner fin a esta violencia entre clanes acabando con su máximo dirigente.
Éste es más o menos el punto de partida de Red Steel, un largo viaje de honor, amor y venganza, que nos llevará desde Los Ángeles a Japón, acompañados por una legendaria katana y un impresionante arsenal de armas de fuego que, nos ayudarán a crecer espiritualmente, aumentar nuestra reputación y poner fin a esta historia de violencia.
Controlando el acero
La primera impresión que deja Red Steel una vez que asumes los mandos, es desconcertante. Por un lado su perfecto doblaje y diseño artístico y sonoro, te sumergen desde el principio en la aventura, con una especie de semi-tutorial interactivo que sigue los acontecimientos de la historia; y por otro, la sensación de controlar por primera vez uno de los grandes primeros juegos para Wii, con un esquema de control totalmente diferente a lo que estás acostumbrado, te hace reeducarte a la forma en que concibes el dominio de un shooter.
Casi como nuestro personaje, te sientes una persona normal, sin ninguna habilidad especial para las armas, y al que le queda mucho camino por recorrer. Poco a poco das tus primeros pasos, miras alrededor, tiras algunas mesas, vas abriendo puertas, saltas, te agachas, empuñas tus primeras armas, haces tus primeras dianas… eres lento, te das cuenta de que queda mucho por mejorar para enfrentarte a la mafia japonesa de altos vuelos, pero hay esperanza.
En seguida vas adquiriendo práctica, eres capaz de cubrirte detrás de una columna y salir de repente apuntando a uno de los matones que no deja de acribillarte, puedes desplazarte rápidamente a otro lugar para sentirte más protegido e intentar hacer blanco sobre el enemigo que te increpa y dispara desde un piso superior… Vas avanzando en el juego, y cuando crees que te desenvuelves con más soltura, ¡llega tu primera incursión con la katana! El mecanismo es totalmente diferente, dominar un arma de fuego no tiene nada que ver con el acero. Por suerte, también te enseñan como hacerlo contra un enemigo bondadoso, hay que seguir aprendiendo… y cuando lo haces, empiezas a sentirte aún más poderoso, tu viaje no ha hecho más que empezar, todavía estás en Los Ángeles.
Con el arma en la mano
Esto precisamente, su control, es una de las partes que más polémica ha levantado entre la crítica, quizá por el incorrecto calibrado del mando o porque la mirilla, parte fundamental en un shooter, rompe el esquema clásico de apuntado automático y no va siempre unido a posibles movimientos de vista, sino de pistola, buscando una sensación más realista y cinematográfica.
Con una mano utilizamos en Nunchaku, con el que dirigiremos los pasos de Scott, y podremos saltar o agacharnos usando los dos botones que tiene en su parte inferior. También usaremos el Nunchaku y su detección de movimiento para, moviéndolo hacia abajo, recoger objetos, recargar la munición del arma que controlemos en ese momento, abrir puertas (si vemos un icono con forma de mano y color verde), o manipular objetos.
Con la otra sujetaremos el mando inalámbrico, con el que podremos utilizar la mirilla moviendo nuestro brazo o muñeca, girar la cámara llevando la mirilla hacia los extremos de la pantalla, disparar con el botón inferior, y hacer zoom hacia la zona que apuntemos, pulsando el botón A y llevando el mando hacia delante o detrás.
El control de Katana varía totalmente, y mientras que el Nunchaku lo usaremos para girar alrededor del enemigo (son combates uno contra uno), y moviéndolo hacia abajo y arriba para bloquear y cubrirnos del ataque que nos lanzan, el mando inalámbrico servirá para asestar katas, moviéndolo como si fuera una katana. Golpe de arriba abajo, de derecha, izquierda, central, etc. Es importantísimo bloquear los ataques, especialmente para repartir luego unas rápidas golpes de katana, una vez desequilibrado el contrario.
Mientras que al principio cuesta sentirse ágil, la práctica te desvela que el control en Red Steel, es grande y con muchas posibilidades. Cuesta coordinarse inicialmente, probablemente por la misma Wii, y aunque en algunas contadas ocasiones puedes experimentar ligeros problemas con la cámara, su punto álgido se alcanza en fases medias y avanzadas, donde el diseño de niveles gana en riqueza y atrevimiento, y los enemigos son hábiles y numerosos.
La técnica, el amigo en quien confiar
La acción se desarrolla siguiendo puntos de guardado automático, es decir, de forma lineal, con la posibilidad de volver a cargar el último punto guardado, o reiniciar el nivel, si nos aniquilan. A veces estos puntos de guardado son más cortos, en ocasiones más largos, e incluso esporádicamente y conforme avanza el juego y nuestro respeto, podremos elegir entre el orden a seguir de varios niveles.
La integración entre trama y acción real de juego, está muy bien realizada, con secuencias realizadas con el mismo motor gráfico del juego, y un estilo cómic realmente seductor y original, que nos ofrecerá varios giros argumentales interesantes. La sensación general que rodea a Red Steel es la de estar dentro de una película, muy fluida por cierto.
Visualmente Red Steel presenta un trabajo notable, con algunos decorados y ambientaciones soberbias, un desarrollo muy variado, y algunos efectos técnicos de explosiones, humo y luces, realmente bellos a nuestros ojos. El diseño artístico en líneas generales es excelente y muy variado, con localizaciones dispares, texturas muy ricas y detalladas, y buenas animaciones de personajes. Como puntos débiles, hay que mencionar que algunos niveles de interiores presentan un aspecto menos elaborado que otros, y que algunos enemigos al morir parecen quedar flotando en la posición en la que perdieron su vida, aunque son pequeños fallos cosméticos y esporádicos, que no afectan en absoluto a la jugabilidad del título.
A nivel sonoro, Red Steel da la talla con creces, con un repertorio musical variado e interactivo con la situación que vemos en pantalla. Frenético en los momentos de acción, ambiental en momentos de exploración, con subidas y bajadas de ritmo en momentos de batalla, y descenso cuando has liquidado a todos los enemigos.
El juego está doblado en castellano, con unas voces muy acordes a los personajes, y contando con unos efectos de audio muy correctos en todo momento. Destacar los momentos próximos a la muerte, en los que nuestra barra energía está bajo mínimos, y todo se escucha menos nítido, con una sensación de lejanía asfixiante, que se recupera una vez que tu energía remonta tras cubrirte y descansar unos segundos a cubierto.
Red Steel es un juego intenso, atractivo y sólido, con un excelente grado de inmersión y diversión, gracias a su control y trama argumental. Un juego muy adecuado como título de lanzamiento, que muestra las posibilidades que pueden ofrecer los shooters en Wii.
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