Cada año que pasa los videojuegos son más caros. Es una obviedad. Tanto para el consumidor, que ya está pagando cerca de 80 euros / dólares por título; como para los propios desarrolladores, que ya no lo tienen tan 'fácil' para publicar sus trabajos. Los equipos son más grandes, se tarda muchísimo más tiempo y la tecnología puntera requiere de inversiones millonarias que luego... bueno, cuesta bastante más recuperar. Así que vivimos un período extraño en el que cada día que pasa da la sensación de que terminaremos pagando todavía más por nuestros juegos, si es que queremos seguir disfrutando de esta clase de producciones.
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Pero luego tenemos el lado contrario. Juegos en los que hay una inversión de dinero infinitamente menor, y que sin embargo generan millones y millones en beneficios. Juegos creados como en los viejos tiempos, con equipos muy reducidos; a veces incluso hechos por una única persona. Los gráficos son lo de menos, aunque alguno hay con un buen apartado visual; la clave es dar con esa fórmula ganadora. Con el juego capaz de concentrar la atención de decenas de millones de jugadores de todo el mundo, sin dejarse una fortuna en su creación.
Ejemplos hay a montones. Desde el ya clásico Minecraft, a Stardew Valley, Terraria o fenómenos más recientes como Vampire Survivors. Todos estos títulos tienen algo en común: son algunos de los juegos que más dinero han ganado con menos. Y de esto te hablamos en nuestro último vídeo especial.
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