Las mecánicas de Zelda: Tears of the Kingdom no habrían pasado de ser una simple iteración más de las de Breath of the Wild si no fuese por los artilugios zonnan; esas piezas que ahora podemos emplear para combatir al acoplarlas a nuestras armas o construir todo tipo de ingenios con ellas. Y una de las funciones de los santuarios, en ocasiones, es enseñarnos a entender su funcionamiento. Es el caso del santuario de Ihena, que os explico cómo resolverlo en esta guía y haceros con su tesoro.
Ubicación del Santuario de Ihena
El santuario de Ihena esta bastante cerca del de Mog'awaq; concretamente, en el Parque de Mipha, en la región Zora. Lo más habitual para cualquier jugador que progrese de forma natural por la misión principal de Zelda: Tears of the Kingdom es completarlo cuando va a ver al príncipe Sidón durante el transcurso de la misión de encontrar al Rey Dorphan, Pista hacia el Cielo.
Pero antes de entrar, y como ocurriera con la Atalaya de la meseta zorana, vamos a necesitar de un fruto acuoso, ya que su entrada está bloqueada por el ''chapapote'' que cae del cielo. Basta con tirar uno a los pies de la puerta, golpearlo, y ya podemos entrar para empezar con él.
Prueba Pausa en el Aire del Santuario de Ihena
Como os decía en la introducción, este santuario nos presenta un nuevo artilugio zonnan que da nombre a la prueba que debemos superar: la Pausa en el Aire. Consiste en emplear las plataformas de zonnanio que veis para abrirnos un camino hasta el final.
El primer escollo es fácil superarlo, basta con reposicionar cualquiera de las losas flotantes a una altura media, y poner otra inclinada que no spermita subir con facilidad. Más adelante nos encontraremos con una gran sima y una plataforma de metal que no es lo suficientemente larga para hacer un puente sencillo.
Lo que tenemos que hacer es acoplarla a una de las piedras flotantes, activarla con un golpe y colocarla sobre el abismo para que podamos cruzar. Más adelante hay otro abismo pero en este caso la salida está un poco elevada. Es tan simple como volver a coger la plataforma de donde estaba y ponerla ahora en un ángulo ascendente para subir por ella corriendo.
La última prueba consiste en atravesar otra sima pero al otro lado hay un zócalo para una esfera que es la que abre la puerta al altar con el orbe de luz. Pero las plataformas flotantes no tienen movilidad por si mismas; tenemos que moverlas o nosotros u otro objeto. Por fortuna, hay un mecanismo activado por un pilar de luz que una pidera resorte empuje lo que tiene al lado.
La solución es, primero acoplar la esfera a una plataforma flotante y colocarla para que, al usar el resorte de piedra, empuje los objetos al otro lado del abismo. Y luego, hacer lo propio con otra plataforma, pero con nosotros subidos usando una flecha para ctivar el mecanismo. Luego sólo hay que sacar la esfera de la plataforma, ponerla en el zócalo y listos.
Dónde está el tesoro de Ihena
El tesoro de este santuario está en la sección final, en el extremo opuesto de la sala en donde está el resorte de piedra. Lo más rápido y sencillo, en este caso, es poner una piedra flotante en el suelo y ni siquiera hacer falta activarla: movedla arriba para que se quede a la altura del cofre unos segundos y bajadla de nuevo. Ahora os montáis en ella y usando la habilidad retroceso la hacemos subir otra vez a modo de ascensor para llegar a el.
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