Desde hace unas semanas está entre nosotros la expansión de Escarlata y Púrpura para el TCG de Pokémon: un set de 258 cartas nuevas basadas en las criaturas y personajes que conocimos a finales del año pasado en la región de Paldea, con alguna que otra novedad de carácter mecánico y otras tantas orientadas a modernizar el apartado visual del juego, lo cual viene a ser algo así como "rizar el rizo" porque las últimas colecciones han tenido un nivel altísimo en este sentido. Pero sí, la web oficial lista 54 ilustraciones especiales para SVI.
The Pokémon Company había anunciado anteriormente algunos cambios a la legibilidad de cada carta, como una nueva apariencia para las energías básicas o un código renovado en la esquina inferior izquierda para indicar la proveniencia exacta de cada copia: expansión, lengua de origen, número y rareza. Todo eso estaba previsto, lo que me ha pillado por sorpresa es más bien ese grupo de cartones diseñados —en palabras del editor— "para ser admirados", reza la guía para jugadores que se incluye en la caja de entrenador de élite.
Unos meses atrás, la expansión Cénit Supremo (Crown Zenith) había dejado el listón altísimo para TPCi, con algunas ilustraciones que se han convertido en auténticas leyendas como las de Mewtwo y Charizard V-Astro, Deoxys V-Astro, Zamazenta V o —mi favorita personal— Zoroark V-Astro; pero he de admitir que las nuevas cartas no se quedan atrás en absoluto. Incluso sin ese desfile de criaturas míticas, SVI ha sabido acertar con el apartado artístico con muchas cartas que son, sencillamente, interesantes de ver y emocionantes de conseguir.
Aquí tienes algunos ejemplos que me han gustado, pero no son los únicos.
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Como puedes ver, todas ellas transparentan el texto y dan mucho espacio al arte para brillar por sí mismo. La línea evolutiva de Gardevoir, de hecho, responde a un modelo de progresión que se ha convertido por méritos propios en uno de los favoritos de los fans: contar la historia de los entrenadores y sus Pokémon en el tiempo. Esto no sucede muy a menudo (ocurrió en 2013 con Tepig-Pignite-Emboar, en 2016 con Charmander-Charmeleon-Charizard y en 2021 con Cosmog-Cosmoem-Lunala, que yo recuerde) pero cuando llega, se gana nuestro corazón.
La verdad es que, por mi parte, he tenido una suerte relativa abriendo sobres: más allá del Miraidon de arte extendido que viene con la caja de élite, la única carta llamativa que me ha tocado es el caramelo raro, que tiene una rareza (je) de categoría "híper" o sea, la más alta del juego. Eso es bueno, pero creo que estaremos de acuerdo en que Koraidon ex y Miraidon ex son más vistosos. Desafortunadamente, son como ver un unicornio; pero en Pokémon TCG Live es posible probarlos en un mazo preconstruido con la versión más común del arte.
Ya que estamos con eso, por cierto, los Pokémon ex ("rescatados" de la era de Rubí y Zafiro en el JCC) no son lo mismo que los Pokémon-EX: por alguna razón, TPCi decidió que sería buena idea mantener en el mismo formato dos tipos de carta que pueden confundirse fácilmente pero que tienen una diferencia clave en la evolución. Los EX que llevas usando hasta ahora son todos de fase básica, pero los nuevos ex también pueden ser evoluciones; así que en muchos casos puedes elegir evolucionar un monstruo normal a uno con la etiqueta ex con muchos PS.
Apenas he tenido ocasión de hacer un par de partidas de práctica contra la IA en el momento de escribir estas líneas, y todavía no he probado cartas tan anticipadas como Magnezone ex o Annihilape, pero de momento, la cosa pinta bien: muchas de las nuevas cartas son un gustazo de coleccionar, nos han dado entrenadores muy interesantes y los Pokémon ex tienen una capa de profundidad que (intuyo) tienen mucho que decir a lo largo de la temporada. Me hubiera gustado ver algo más de amor para la Teracristalización, pero aún hay mucha generación por delante.
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