Se ha debatido el precio actual del mercado indie llegando a una pregunta clave: ¿Se infravalora su trabajo?
Ante los problemas y polémica que se ha generado tras la puesta a la venta del último videojuego del creador de Braid, el The Witness de Jonathan Blow, se ha creado un debate alrededor de los precios sobre los juegos independientes. El portal británico MCV se ha puesto en contacto con algunas empresas británicas metidas en el desarrollo y la distribución indie para conocer su opinión sobre el presente hecho. ¿Deberían subir de precio los juegos independientes? En las editoras se cree que sí, y que ayudaría a ofrecer mayor calidad, en general, a los productos.
"Como industria, sí, en algunos sectores estamos infravalorando el juego independiente", ha comentado Debbie Bestwick de Team 17. Ha instado a "trabajar de forma conjunta en ello: hay una brecha importante entre los pilares del juego independiente (que consiguen pasar la barrera de las 500.000 unidades) y el resto. El mayor desafío está en cambiar la percepción del jugador sobre el significado del juego independiente. No significa menos calidad y más barato; significa mayor libertad creativa y acercamiento más rápido a los consumidores y la propia industria".
Martin Mathers, de Rising Star, también ha hablado de ello: "En parte, sí, deberíamos cobrar más por los juegos indies. Pero hay una diferencia entre los juegos 'indies' y los proyectos de mayor envergadura", y echa la culpa de los bajos precios al mercado del PC y lo que se paga en el territorio del ordenador. En Curve Digital aseguran que una solución sería poner el precio del juego indie a la altura del AAA, aunque asegura que la decisión del precio está "meditada desde el punto de vista del tipo de juegos que estamos vendiendo".