Su desarrolladora ha confirmado de sopetón el retraso de las versiones de Xbox 360, Linux y Mac.
El mítico Keiji Inafune ha celebrado con Intis el lanzamiento americano y japonés de Mighty No.9, el llamado a ser sucesor de la franquicia Mega Man. Sin embargo, las primeras recepciones, incluida la nuestra, no están siendo acordes a lo esperado por la legión de seguidores del Blue Bomber. El artista sí ha querido defender a su equipo: "Hemos puesto todo en el juego. No hemos tratado de vender nada mediante microtransacciones o DLC: está todo disponible".
"Por ahora, lo que ves es lo que hay para el mundo de Mighty No.9", aseveró, "si las cosas van bien habrá secuelas. Al final del día, ciertamente, no es un juego perfecto, pero es mejor que nada. Al menos eso es lo que opino", se sinceró. Lo que no podían esperar algunos usuarios que hoy iban a recibir el juego ha sido el retraso del mismo en plataformas como Xbox 360, Linux o Mac. La llegada a PS Vita y Nintendo 3DS sigue sin fecha confirmada a día de hoy.
La versión de Xbox 360 parece que no ha recibido la certificación oficial por culpa de un bug; las versiones de Linux y Mac pasan por los últimos arreglos antes del lanzamiento definitivo. Los jugadores de la plataforma de Microsoft han recibido un código de Steam a modo de compensación hasta que arreglen el problema que le ha impedido llegar a tiempo para el estreno. Su lanzamiento oficial en Europa está fechado para el 24 de junio.
Nuestro compañero Sergio Martín se ha encargado de la reseña de Mighty No.9 en 3DJuegos. Ha garantizado que "si bien Mighty Nº 9 posee sus virtudes y es una aventura de acción y plataformas de desarrollo 2D que puede llegar a divertir a un grupo de usuarios, lo cierto es que queda lejos de lo que muchos esperaban. La falta de inspiración y de brillantez son evidentes y es difícil pasarlas por alto.
*ACTUALIZACIÓN
La declaración "al final del día, ciertamente, no es un juego perfecto, pero es mejor que nada. Al menos eso es lo que opino" es una opinión personal del traductor de Inafune, Ben Judd.