La compañía afronta causas abiertas en Washington y California, Estados Unidos, así como en Francia.
El "drifting" es un problema que afecta a los mandos Joy-Con de Nintendo Switch desde hace años. Hablamos de ese defecto de fabricación que, con el tiempo, causa que los joysticks de los jugadores se queden "pillados" en una dirección, y no regresen bien a su posición neutra, lo que obviamente afecta a la experiencia general. Esto ha dado pie a varias demandas colectivas contra Nintendo. La más sonada, aquella de los Estados Unidos que sigue en curso desde 2019, pero también alguna otra en varios países europeos.
Es la segunda demanda colectiva al respecto en Washington
Y ahora, se suma otra causa más contra la compañía de Super Mario. Según leemos en Polygon, el pasado martes 17 de noviembre se registró una nueva demanda colectiva contra Nintendo en las cortes de Seattle, Washington (Estados Unidos), debida nuevamente al problema de drift en los Joy-Con. Esta es la segunda demanda al respecto que se registra en el estado de Washington, tras aquella de la que os informamos en marzo. Pero aquí, la diferencia reside en los detalles.
Los nuevos demandantes han acompañado la causa con una serie de documentos técnicos sobre los mandos, verificados por expertos, que abarcan desde fotos de los componentes, hasta capturas con microscopio que "muestran el daño en los circuitos". En esto, los abogados alegan que Nintendo es consciente del problema y no están informando debidamente a sus consumidores al respecto, citando demandas similares como la que se encuentra abierta en Francia, así como en Bélgica y Suiza.
Nos disculpamos por cualquier problema que hayamos causado a nuestros consumidores
También citan el mensaje de Shuntaro Furukawa emitido en junio, donde el presidente de Nintendo se disculpó de forma oficial por los problemas causados a los consumidores. Y junto a ello, la nueva demanda colectiva relata la experiencia de un usuario menor de edad que experimentó el problema a los tres meses de comprar la consola. Nintendo le ofreció una reparación por una cuota de 40 dólares (pagados de su bolsillo), y estos fallaron de nuevo "tras varios meses más". Un hecho que se repitió con tres pares distintos de Joy-Con del usuario.
La demanda acusa a Nintendo de un posible fraude, por la falta de claridad y responsabilidades a la hora de afrontar un problema existente. Esta es, repetimos, la segunda demanda similar registrada en el estado de Washington, y la tercera en los Estados Unidos, junto a otra que continúa abierta en California.
Por su parte, Nintendo afirmaba en junio que "nos gustaría abstenernos de responder acerca de cualquier acción específica" sobre los fallos en los Joy-Con, mientras prosigan abiertas las causas legales al respecto. Mientras que el bufete de abogados CSK&D, responsables de la primera demanda colectiva, afirma que Nintendo no ve el drift de los Joy-Con como un problema real.