El retraso en el desarrollo permitió a sus desarrolladores corregir y mejorar varios aspectos.
El estudio 343 Industries por fin anunció la tan esperada ventana de lanzamiento de Halo Infinite: otoño del 2021. Si bien esta revelación es de lo que todo mundo está hablando ahora, no fue la única noticia que la desarrolladora aprovechó para brindar el día de hoy ya que, junto a ella, se encontraron algunas más que pondrán felices a todos los fans de la serie.
Dentro del comunicado ofrecido por el estudio, algunos miembros del equipo de desarrollo hablaron sobre varios aspectos que podemos esperar del juego. De entrada, agradecieron a todos los jugadores por la retroalimentación que han recibido, misma que consideran vital pues les ayudó a encontrar varios puntos que debían corregirse y hasta modificar elementos para que se ajusten a la visión que tenían del proyecto.
Habrá grandes mejoras en el apartado visual, incluido el modelo de Craig
Dicho esto, aseguran que hubo grandes avances en áreas clave como la iluminación global, oclusión ambiental, sombras, iluminación volumétrica, cielo y atmósfera, así como en apartados de renderización. Todas en conjunto hacen lucir aún mejor a Halo Infinite y muy alejado a la calidad mostrada en el polémico demo del pasado mes de julio.
Bajo esta misma idea, mencionan que han trabajado duro en el apartado visual del juego. Ahora, elementos como los ambientes, texturas y modelos y expresiones de los personajes cuentan con más detalles que los hacen ver más naturales y realistas. Y sí, entre ellos se encuentra el famoso modelo de Craig que, aseguran, no se verá tan acartonado.
Otro punto del cual hablaron fue el tema de los micropagos y contenidos adicionales para el juego. Aunque el estudio implementará una amplia gama de artículos y recompensas cosméticas, no planean añadir cajas de botín con artículos aleatorios, compras injustas ni ítems que afecten a la jugabilidad de cualquiera de los modos presentes en Halo Infinite.
Por último y no menos importante, los desarrolladores admiten que el cambio en su modelo de trabajo - de pasar de trabajar en un estudio a sus propios hogares - sí afectó el ritmo laboral que tenían e influyó directamente en el progreso del proyecto. Fue quizá uno de los retos más grandes que han enfrentado hasta ahora pero, tras observar los avances positivos obtenidos hasta ahora, saben que pudieron sobreponerse a semejante reto.