A nadie le gusta dar malas noticias, menos cuando se trata de hablar de un videojuego español como es The Crown of Wu, realizado por un pequeño grupo de desarrolladores en la que es su primera obra publicada. El proyecto ha sido apoyado por el programa PlayStation Talents, pero está claro que el juego no estaba preparado para ser lanzado. Una pena, así de claro. Y eso que su planteamiento me generaba interés. Es una aventura de acción en tercera persona que por momentos recuerda a los clásicos de principios de siglo, pero al que también se le notan las inspiraciones de Dark Souls y juegos de dicho calibre, principalmente en su sistema combativo.
No obstante, no hace nada especialmente bien. Tiene secciones plataformeras, que es algo que me parece fenomenal, pero el funcionamiento de los saltos es un desastre. Contiene muchas batallas, con una dificultad exigente, pero más dada por lo mal que responde tu personaje a los controles que porque haya un equilibrio jugable. También presenta algunos puzles, y oye, me parece lo mejor del conjunto, aunque no salva el hecho de que no pueda recomendarte una obra que no es que necesite un par de meses de pulido, sino que requiere un considerable replanteamiento en su ejecución.
Combates soulslike con saltos y puzles
Una de las cosas que más llaman la atención de The Crown of Wu es su premisa narrativa, la cual está directamente inspirada en Viaje al Oeste, un cuento tradicional chino de gran popularidad. Nos pone en el lugar de uno de sus protagonistas, el Rey Mono (Sun Wukong), con el objetivo de recuperar una corona robada por el antagonista de la aventura, un tal Zhu. Todo narrado sin grandes secuencias cinemáticas, sino aprovechando el motor del juego y, si acaso, presentando unas cuantas ilustraciones con algo de texto. Simple y directo, comprendiendo el lenguaje propio de los videojuegos a la hora de narrar historias, lo cual está genial.
La pena es que si bien la narrativa no está mal planteada, todo lo que se construye a su alrededor no merece mucho la pena. La exploración es limitada, con un diseño de niveles tosco y que recuerda a las aventuras de hace un par de décadas. Son espacios pequeños, muy delimitados, con paredes invisibles por doquier y una tremenda sensación de vacío. Lo justo para dar unos cuantos saltos, resolver algún que otro puzle y librar unos cuantos combates antes de enfrentarte a un jefe final.
Las secciones plataformeras son cuantiosas y se basan básicamente en esprintar, aprovechar el doble salto y calcular bien dónde vas a caer. Para poner las cosas difíciles, hay plataformas que aparecen y desaparecen, algo que te obliga a hacer gala de cierta habilidad a los mandos. Aunque hay partes que funcionan razonablemente bien, la mayoría son bastante frustrantes y acabas con tu personaje cayendo al vacío, obligándote a volver a intentarlo una y otra vez hasta conseguirlo. Y ese no es el problema, sino que la jugabilidad no es estimulante, porque ni los saltos son predecibles, ni el ángulo de la cámara se ajusta para mejorar las sensaciones.
Las partes plataformeras y de combate simplemente no son divertidas
Luego están los combates, que demuestran el mismo grado de tosquedad que el resto de la aventura. Las hit boxes no están bien ajustadas y la reacción a los golpes es prácticamente inexistente, además de que la IA es muy deficiente. En ocasiones, mis batallas se han resumido en atacar al enemigo y ponerme a cubierto para recuperar energía y acto seguido volver a por él: una dinámica absolutamente anticlimática y que denota lo mal que funciona. Puedes cubrirte y esquivar, pero lo que te digo: el flujo combativo es inexistente.
Lo que sí me han gustado más son los puzles, porque su resolución no es básica ni evidente, sino bastante intrincada en ocasiones. De hecho, algunos están pensados para jugadores veteranos, y su diseño precisamente resulta algo retro, con rompecabezas dignos de la época de Myst y otras aventuras gráficas clásicas. Me han gustado tanto los planteamientos adoptados que creo que es una de las fortalezas del estudio de cara a un futuro videojuego.
Personalmente, hubiese estado más animado a jugar si solo hubiese tenido puzles, porque las partes plataformeras y de combate simplemente no son divertidas (son más bien tediosas). No acompaña tampoco que gráficamente sea un juego con gráficos algo desfasados, varios errores de programación y e imperfecciones varias. No está bien diseñado, ni tampoco rematado. Como digo, una lástima, porque la idea original era potente y podría haber dado más de sí. Tal vez para la próxima ocasión…
The Crown of Wu es un juego de aventuras y acción con una idea potente, y tendría que decir que hasta ambiciosa, pero que cuenta con una mala ejecución. Sus secciones plataformeras y de combates soulslike no son satisfactorias de jugar, siendo las partes puzleras las mejor resueltas. Por todo ello, el resultado es un título muy mejorable en cuestiones de diseño, y que además requería una mayor dedicación a la hora de pulir sus imperfecciones técnicas (que no son pocas).
Comprar The Crown of Wu- El punto de partida es llamativo y potente, inspirado en Viaje al Oeste, con elementos futuristas.
- Las secciones plataformeras son interesantes, pero tediosas a los mandos.
- Los combates son estilo soulslike, aunque sin la precisión ni el equilibrio jugable adecuados.
- Los puzles suponen prácticamente lo mejor del juego: es satisfactorio resolverlos.
- Abundantes fallos de diseño y de programación, con falta de pulido.
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