Los 'gamers' como tal están desapareciendo poco a poco y en la próxima generación se jugará de manera muy diferente

La industria del videojuego evoluciona, aunque quizá no con el ritmo con el que lo hacen los propios proyectos. Sin embargo, sus cambios son más notorios e importantes porque dictaminan no solo las inquietudes y necesidades de los jugadores, sino también sus gustos. Y, en este caso, según el analista y creador de contenido Bellular, los jugadores de la próxima generación ya no se ven a sí mismos como "jugadores", sino como consumidores que prefieren experiencias muy concretas, sobre todo en dispositivos móviles. Este fenómeno plantea un desafío para desarrolladores y grandes editoras que históricamente han creado juegos pensados para un público más amplio y diverso.

Durante décadas, los videojuegos han crecido junto a sus jugadores. Desde los primeros títulos orientados a niños hasta los complejos juegos cinematográficos actuales, la industria ha evolucionado adaptándose a su público. Sin embargo, la Generación Alfa, compuesta en su mayoría por jóvenes que prefieren jugar en smartphones, podría alterar este paradigma: según encuestas, el 93 % de estos jóvenes elige dispositivos móviles frente al 15 % que prefiere PC.

Uno de los fenómenos más claros de esta transformación es la consolidación del "mono-gaming", es decir, jugadores que concentran su tiempo de juego casi exclusivamente en un solo título. Roblox, Fortnite o juegos específicos de móvil están captando a gran parte de esta audiencia, mientras que títulos nuevos luchan por atraer atención. Incluso franquicias AAA se enfrentan a que solo unos pocos juegos acaparan la mayor parte del tiempo de juego de los usuarios: en PC, cinco títulos concentran el 50 % del total de horas jugadas, y en consola la cifra es similar.

Los juegos nuevos solo representan el 6,5% del tiempo, y hay pocos logros que lo afirmen

La situación es aún más marcada cuando se observa la participación de juegos recientes. Según datos de 2023, apenas el 6,5 % del total de tiempo de juego se destinó a títulos lanzados ese mismo año. De ese porcentaje, solo cuatro juegos —Diablo IV, Hogwarts Legacy, Baldur's Gate 3 y Starfield— acapararon la mitad de las horas. Esto evidencia la dificultad de que nuevas IPs o secuelas independientes logren consolidarse en el mercado frente a gigantes consolidados.

Los modelos tradicionales de juegos tienen que cambiar o desaparecer

A pesar de estos datos, Bellular destaca que todavía hay espacio para títulos de calidad en cualquier nicho. La clave, según él, está en crear juegos enfocados en un público específico en lugar de intentar abarcar a todos. Ejemplos como Expedition 33 muestran que un desarrollo concentrado y sin elementos innecesarios puede ofrecer una experiencia exitosa sin depender de masas de jugadores casuales.

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Ni es una revolución ni es un juego malísimo. Lo que me ha enseñado Lost Soul Aside es que nos hemos olvidado de disfrutar de los juegos normales

Aun así, la industria del videojuego se encuentra en un punto de inflexión. Las estadísticas muestran una concentración del tiempo de juego en unos pocos títulos y una preferencia creciente por experiencias móviles y centradas. Aunque los desafíos son enormes, los desarrolladores que comprendan estos cambios y adapten sus proyectos a audiencias específicas podrían marcar el camino hacia la próxima etapa, mientras que los modelos tradicionales corren el riesgo de quedar relegados.

Vía | MeinMMO

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