El valor accionarial de la compañía nipona cae a su mínimo desde 2015 por la larga vida de PlayStation 4.
A pesar de que Sony está gozando de unas excelentes ventas para PS4, lo cierto es que el sistema tiene ya más de cinco años a sus espaldas y va notando que la demanda de hardware por ella no es tan alta como hace tiempo. Esto que, como el lector notará, es bastante obvio, suele pasar factura a los valores accionariales de las compañías, y es lo que ha sucedido con Sony.
El valor accionarial de la compañía nipona ha alcanzado su punto más bajo desde el año 2015, algo que la agencia de noticias Bloomberg atribuye a la "débil demanda" que hay por PlayStation 4. La caída en los valores del lunes fue del 8,1%, como castigo del inversor a unos números que ya advertíamos en aquella noticia que eran inferiores a los del año anterior.
"Definitivamente no han sido números positivos a pesar de lo que los titulares puedan sugerir. De hecho, es una sensación bastante negativa la que deja todo este asunto", dejaba claro Andrew Jackson, uno de los analistas del grupo Soochow CSSD Capital Markets, que explica lo volátil de los valores en bolsa.
Por supuesto, Sony no se compone únicamente de su división PlayStation, y también se destaca que se sigue perdiendo dinero con la rama de smartphones. Algo que otras veces se ha venido compensando con la venta de hardware de videojuegos pero que ahora, al sufrir ésta, se hace notar en mayor medida.
Los analistas, eso sí, consideran que este lógico descenso en las ventas de PS4 podría acarrear un lanzamiento de PS5 en 2020 que ya dan casi por seguro.