El paso de las generaciones ha traído consigo una serie de mejoras que los jugadores agradecen a diario. La ausencia de tiempos de carga, los 60 fps estables o la mejora de rendimiento de las consolas y PC son, en resumidas cuentas, algunos de los aspectos que más alabanzas acumulan en redes sociales, foros y conversaciones entre amigos. Sin embargo, existe un mal que las compañías son incapaces de dejar atrás pese a mejorar sus sistemas y dispositivos: el odioso drift.
Tal es el impacto del drift en los sticks que, desde que Nintendo lanzó Switch, se ha visto inmersa en varias polémicas con el drift de los Joy-Con, una situación que incluso le ha llevado a juicio. Como era de esperar, PlayStation y Xbox tampoco se libran, y los mandos de sus consolas de antigua y nueva generación también sufren de este mal. Pero, en una reciente publicación, el portal Mein-MMO ha compartido un truco para poder despedirte de este problema y, al mismo tiempo, ahorrar bastante dinero cada año.
Tienes que haber perdido la garantía
Como detalla el autor de la publicación, por culpa de este problema ha llegado a derrochar 140 euros anuales en mandos nuevos. Así, como consecuencia del drift, si lo has sufrido habrás notado que tu personaje se mueve o la cámara gira sin tu interacción. Al parecer, esto tiene relación con el potenciómetro, un elemento de color naranja o verde que está unido al stick de tu mando. Y, para evitar el drift, es necesario acceder a él, pero si lo haces por tu cuenta debes asumir que perderás la garantía, ya que habrás manipulado el mando por completo.
Así, si tu mando ya no está cubierto por la misma o no te importa asumir riesgos, los pasos para llevar a cabo el truco que relatan en Mein-MMO son los siguientes:
- Una vez haya desmontado los mandos de forma que tengas delante la placa base y los sticks analógicos, quita los sticks negros para tener ante ti los componentes del stick analógico y el potenciómetro.
- Cada stick analógico tiene dos potenciómetros: doblalos en la dirección opuesta con un poco de presión y un objeto pequeño.
- Observarás un componente blanco (responsable de los ejes X e Y del stick), coge unas pinzas y retíralo.
- No pierdas, dobles o destruyas el hilo metálico, ya que es el responsable de que se puedan hacer entradas en los anillos de fibra de carbono del potenciómetro.
- Una vez desmontado el potenciómetro, coge un cepillo pequeño y límpialo. Si está muy sucio, empapa un bastoncillo de algodón con un poco de alcohol. Realiza esta maniobra con mucho cuidado para evitar dañar el anillo de fibra de carbono.
Como ellos mismos señalan, la calidad de los sticks analógicos no es tan buena como los usuarios quisieran y, por desgracia, el uso continuado acelera el desgaste de estos. Así, al llevar a cabo esta rutina, tendrás la posibilidad de limpiar los componentes y eliminar la suciedad que se acumula en el potenciómetro. Sin embargo, al hacerlo te arriesgas a perder la garantía si ya está vigente, por lo que es recomendable que utilices esta técnica solo si ya no la tienes y, además, si tienes nociones básicas y habilidades como para volver a recomponer el mando.
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