Que Warhammer 40.000 es una de esas IPs con una auténtica legión de aficionados bajo su estandarte no es ningún secreto. Y ahora que sabemos de la existencia de una serie del sombrio universo donde sólo hay guerra que protagonizará Henry Cavill, -y que además producirá- uno sólo puede esperar que se produzca una leva importante en las filas del fandom del universo creado por Games Workshop, y que ha sido el buque insignia de los juegos de estrategia de mesa durante tres décadas.
Supermán "ha muerto", en cierta manera, después de la forma en que Warner haya decidido darle kiptonita a sus planes con Henry Cavill, pero puede renacer en forma de primarca, de señor del caos, de inquisidor, al frente de un "!Waaaaaaaghh!" orko... Las posibilidades, como el propio universo donde transcurrirá la serie son innumerables, y después del espléndido trabajo del actor, aficionado a buena parte de la cultura popular y los videojuegos, encarnando a uno de sus favoritos -Geralt de Rivia en The Witcher-, los fans de Warhammer 40.000 estamos tan ansiosos como una compañía de los Lobos Especiales antes de enfrentarse a una horda de astartes traidores de los 1.000 Hijos.
Pero no basta con depender de quien fuera Geralt o el Hombre de Acero en otros universos y medios. No, Warhammer 40.000 no es un universo centrado en un puñado de personalidades o figuras singulares; es uno en el que siempre se ha explorado la condición humana, sus virtudes más ensombrecidas por sus defectos más aberrantes, y siempre de una forma visceral, fría, y paradójicamente a la vez, literaria y poética.
Horus Vs Emperor. Ilutración de Adrian Smith para Games Workshop
En la serie de Warhammer 40.000, no sólo puede haber guerra
Echando la vista atrás, a lo que más de 30 años de relatos impresos, ediciones del juego de mesa, videojuegos y miles de proyectos multimedia han aportado a Warhammer 40.000, me doy cuenta de que este universo atrae no sólo por su brutalidad y frenesí, sino por sus historias y los debates morales a los que todos sus personajes se enfrentan. Es herejía -en la terminología del Imperio que espero que se utilice en los diálogos- el creer que bastará que Henry Cavill aparezca rodeado de enemigos y repartiendo estopa para que la serie triunfe.
Sinceramente, Cavill como Horus también sería homérico
En el universo de Warhammer 40.000 han habido más historias aparte de las grandes batallas que han dado forma a esta cruel realidad; historias de intriga política, de debacle religiosa, de héroes y villanos silenciosos cuyos actos han evitado o provocado los mayores desastres a los que la humanidad o las otras razas que pueblan la galaxia han debido de enfrentarse.
De hecho, no creo que sea descabellado pensar que en Amazon y GW esperan enfocar la serie -y sería interesante para conocedores y recién llegados a 40K a partes iguales- en alguna figura que responda a ese arquetipo. Uno de los personajes favoritos del fandom (y del propio actor) y para el que Cavill da el perfil, sería el Inquisidor Eisenhorn. Pese a lo adusto de su persona, es alguien a quien puedo ver interpretado perfectamente por el artista.
Imagen: Games Workshop
Incluso ya hay indicios de que ésta podría ser la ambientación y el periodo elegido que la serie trajese a nuestras pantallas. Hace poco menos de un año, el medio digital británico Nottinghamshire se hacía eco de cómo Games Workshop avanzaba que los detalles de la pre producción de la serie de TV centrada en el inquisidor progresaban. No se enfocaría en esas luchas épicas y grandilocuentes de los grandes conflictos, pero no por ello exhibirían menos gravedad, brutalidad o carga emocional que las que vemos en series como The Boys, Invencible o Battlestar Galáctica.
Pero lo cierto es que todavía no hay confirmación alguna de en qué periodo del trasfondo de 40K se ubicará la serie, o de quienes acompañarán a Cavill. Otro posible escenario y que a muchos fans agradaría poder ver -por lo menos a mí- con actores de carne y hueso es el relato de la Herejía de Horus. Una serie centrada en la figura del archi traidor Horus interpretado por el anterior Geralt de Rivia sería perfecta para introducir a muchos profanos en el universo de Warhammer 40.000. Y sinceramente, Cavill como Horus también sería homérico.
Imagen: Games Workshop
Henry Cavill no puede estar solo en esta serie
Por supuesto, deberían acompañarle otros grandes de la pantalla, ya sea para interpretar a parte del séquito de Eisenhorn, o para encarnar a alguna de las muchas prominentes figuras del relato de Horus o de las distintas razas xenos. Por poner algunos ejemplos y quinielas ¿Anya Taylor-Joy como Aelizabeth Bequin o quizás alguna vidente Eldar? ¿James Spader como Uber Aemos o el Iterador Kyril Cynderman? ¿Idris Elba como Midas Betancore o como el primarca Vulkan de la Legión de los Salamandras? ¿Jason Isaacs como Godwin Fischig o quizás algún capitán de las Legiones?
Naturalmente estas predicciones son castillos en el aire de un fanático de este universo, pero la cuestión es que lo que tiene entre manos Amazon es importante: la primera incursión de Warhammer 40.000 en la televisión puede ser determinante para el crecimiento en popularidad de la franquicia y un espaldarazo muy necesario de cara a salir de su zona de confort de los juegos de mesa, las novelas y videojuegos.
Aunque ya hubo otros intentos, como la discreta película de animación en 3D Ultramarines de 2010 con Terence Stamp y el difunto aunque inmortal John Hurt como protagonistas, éste es un mucho mejor proyecto que hay en perspectiva. Como se suele decir en la Sagrada Terra, el Emperador proveerá, y por quienes están implicados en el proyecto, por el mero hecho de ser fans, y por el inabarcable abanico de personajes, conflictos y situaciones que se han relatado y están por relatarse en el sombrío futuro dónde sólo hay guerra, creo que esta serie será otro gran hito en las adaptaciones al cine y TV de grandes juegos y universos de la cultura popular de los hobbys.
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