Chema Mansilla
Editor - Cine y TVA estas alturas, nadie puede negar que Christopher Nolan es uno de los directores más influyentes de Hollywood. Con su capacidad para crear universos complejos, emocionantes y visualmente impactantes, el británico ha logrado una notoriedad indiscutible. Desde Inception hasta Tennet, pasando por su épica trilogía de Batman, su firma es reconocible al instante. Y claro, como todo gran artista tiene sus propios referentes. Uno de los más importantes es Ridley Scott, quien deslumbró al joven Nolan con Blade Runner y Alien. ¿Y a quién no? Pero otro director que llamó la atención de Nolan fue David Fincher con una película que, a pesar de pertenecer también a la saga Alien, no es una de las entregas mejor valoradas, precisamente.
Franquicias millonarias y cine de autor
El propio Nola explicó esta influencia durante una entrevista en el podcast HappySadConfused, donde explicó cómo, a pesar de la mala recepción de Alien 3, esa película le hizo dar un paso adelante en su admiración por Fincher. El director de Oppenheimer reveló que, al ver la película en su estreno, inmediatamente se dio cuenta de que Fincher poseía una calidad única que lo hacía destacar: "Salí de ese cine y tuve una conversación con un amigo en la que dije, 'Acabo de ver al nuevo Ridley Scott. Sé quién es el nuevo Ridley Scott'. Y no me equivoqué. Está ahí, en la película, aunque Fincher no lo sepa".
El hecho de que la película que inspiró este comentario no sea una de las más queridas por los fans de la saga Alien resulta llamativo. De hecho, Alien 3 es una de las entregas más criticadas de la franquicia, en parte por su tono sombrío y la dirección creativa de Fincher, quien luchó contra los productores de la película durante su rodaje. Y tampoco puede decirse que se trata de unos de los trabajos más celebrados de Fincher. Nolan mismo lo reconoce: Alien 3 fue un proyecto plagado de problemas, que afectó la visión de Fincher, pero para él también fue un claro ejemplo del talento del director.
De hecho, uno de los puntos más interesantes de esta reflexión es cómo Nolan hace referencia a las secuelas y al crecimiento que éstas suelen tener en términos de escala, y el problema que eso supone para directores y productoras. En este sentido, Nolan considera que el fracaso de Alien 3 no radica en su ambición por expandir la franquicia, sino en el proceso de producción y las interferencias externas que afectaron el resultado final.
A lo largo de los años el cineasta ha hablado abiertamente sobre sus influencias, y Scott siempre ha sido uno de los nombres que más ha mencionado. Nolan no solo adora la estética de Blade Runner, sino que también ha manifestado su admiración por la capacidad de Scott para construir mundos complejos y visualmente fascinantes. En este sentido, se puede entender cómo Nolan vea algo de eso en Fincher. Películas como Seven o El Club de la Lucha se convirtieron en referentes para una generación de cineastas que, como Nolan, vieron en Fincher a un director capaz de trasladar a la pantalla historias perturbadoras pero profundamente cautivadoras llenas de personalidad.
Sigourney Weaver y David Fincher en el rodaje de Alien 3
Lo que más destaca de las declaraciones de Nolan es su sinceridad al hablar de la influencia de Fincher en su propia obra. Nolan ha reconocido que la película logró transmitir una visión de cine de autor que, en su opinión, aún no había sido vista en el cine de ciencia ficción hasta entonces. "Es una película que, personalmente, adoro más que Fincher mismo".
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