Desde su estreno en 1999, The Matrix se ha convertido en una película icónica que ha dejado una profunda huella en la cultura pop. La película dirigida por las hermanas Lana y Lilly Wachowski es conocida por su innovadora estética, efectos especiales revolucionarios y su presentación ante el gran público de una concepción de la realidad alternativa. Sin embargo, a medida que profundizamos en la película, es imposible no notar las numerosas similitudes entre The Matrix y el cómic Los Invisibles de Grant Morrison, lo que plantea preguntas sobre hasta qué punto es un homenaje o un plagio.
Es importante recordar la magnitud del impacto que tuvo la película en el emomento de su estreno: En 1999, The Matrix sorprendió al público y a la crítica por igual con su mezcla de acción trepidante, filosofía existencial y efectos visuales de vanguardia. La historia de Neo, interpretado por Keanu Reeves, un hombre que descubre que el mundo en el que vive es una simulación de realidad virtual, tuvo un impacto significativo profundamente en una era en la que la tecnología y la virtualidad comenzaban a cambiar el día a día y la realidad cotidiana del primer mundo.
La película se convirtió en un fenómeno cultural. que generó secuelas, videojuegos, cómics y una legión de fans incondicionales en todo el mundo. Sin embargo, a medida que el tiempo pasaba, surgieron preguntas sobre el origen de algunas de las ideas presentadas en The Matrix. The Matrix está lleno de homenajes y referencias a diversas fuentes culturales, desde la filosofía de Descartes hasta el cine de ciencia ficción como Blade Runner o Ghost in the Shell. Sin embargo, es en su vinculación con el cómic Los Invisibles donde las similitudes se vuelven tan abrumadoras que bordean el plagio más evidente.
Los Invisibles fue un cómic publicado por el sello Vertigo de DC Comics entre 1994 y 2000. Escrito y concebido por Grant Morrison, la serie de cómics tenía como objetivo crear un hipersigilo. ¿Y qué diantres es un hipersigilo? Se trata de una forma de magia narrativa que utiliza historias con el propósito de provocar un cambio en el lector o espectador. Puede ser tanto una narrativa personal como compartida, funcionando como un hechizo o meme (en el sentido original creado por Richard Dawkins en su libro El Gen Egoísta, que tanto gusta a Hideo Kojima) que influye en las creencias y acciones de las personas a través de la historia.
La idea es que las narrativas más poderosas han moldeado nuestra cultura y pueden inspirar tanto acciones admirables como atroces. El término, acuñado por el propio Morrison, refiere a una especie de ritual mágico a gran escala destinado a cambiar la realidad. Morrison, además de guionista, se considera a sí mismo un mago del caos, y cree que a través de representaciones simbólicas podían lograrse cambios en la realidad, y en un plano metatextual, tiene razón ya que las herencias culturales más significativas, y con ellas sus narrativas, no solo son fruto de sus sociedades si no que su perpetuación moldea comportamientos grupales posteriores.
Homenajes y similitudes
Pero al grano: Comencemos por las similitudes estéticas entre The Matrix (y sus secuelas) y Los Invisibles. Ambas obras comparten una estética distópica y subcultural propia de finales de los años noventas, heredera del punk británico de los 80 y del movimiento contracultural del thatcherismo y reaganismo. En Los Invisibles, vemos a un grupo de anarquistas luchando contra una conspiración alienígena que busca controlar la mente de los seres humanos. Este concepto de lucha contra una fuerza mental opresora se refleja claramente en The Matrix, donde los humanos son esclavizados por máquinas inteligentes, pero ese es solo el primer detalle.
Uno de los aspectos más llamativos es la relación entre los personajes protagonistas de ambas historias. En Los Invisibles, vemos una relación de mentor y pupilo entre King Mob y Jack Frost, donde King Mob guía a Jack en su despertar y desarrollo como líder de la revolución. Esto se refleja en la relación entre Morfeo y Neo en The Matrix, donde Morfeo despierta a Neo y lo guía en su camino hacia convertirse en el Elegido. Las similitudes también se extienden a partir de ahí a otros elementos narrativos. En ambas obras, encontramos personajes capaces de trascender los límites biológicos de los seres humanos, viajes a través de diferentes dimensiones mediante tecnología avanzada y escenas de acción con kung-fu. Estos elementos son parte integral tanto de The Matrix como de Los Invisibles.
The Invisibles Omnibus
Otro aspecto compartido es la influencia de diversas corrientes filosóficas y literarias en ambas obras. Tanto The Matrix como Los Invisibles se inspiraron en autores como Philip K. Dick, Jean Baudrillard y William Burroughs. Ambas exploran temas como la naturaleza de la realidad, el valor de la percepción y el control social, lo que contribuye a las similitudes en sus enfoques filosóficos. Si nos fijamos en la presentación artísticas, cualquiera que vea las viñetas pertenecientes a Los Invisibles podrá ver una traslación casi literal a muchos de los momentos y personajes clave de The Matrix, con alguna variación meramente puntual.
Entonces, ¿hasta qué punto se puede considerar que The Matrix se inspiró en Los Invisibles o, en el peor de los casos, plagiado su contenido? La verdad es que el debate sigue abierto, pero es comprensible que Grant Morrison expresara en su momento su frustración por la falta de reconocimiento por la influencia e su trabajo en The Matrix. Afirmó que las creadoras de The Matrix, las hermanas Wachowski, le debían ese reconocimiento debido a las muchas y evidentes similitudes entre ambas obras. Según Morrison, las directoras proporcionaron a su equipo de producción dos libros para leer como referencia antes de hacer la película, uno de los cuales era Los Invisibles.
Es innegable que The Matrix contiene numerosas similitudes con Los Invisibles, desde su estética distópica hasta elementos narrativos y filosóficos concretos. Aunque las hermanas Wachowski nunca han confirmado oficialmente que se hayan inspirado en el cómic de Grant Morrison, las coincidencias parecen demasiado evidentes para ignorarlas. The Matrix es una obra maestra del cine que ha dejado una marca indeleble en la cultura pop, todavía actual, vigente y completamente disfrutable, pero también es una clara oportunidad perdida de reconocer el trabajo y la influencia de Morrison más allá del mundo del cómics así como la validez e algunas de sus teorías sobre el valor del relato.
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