Te enseñamos una referencia de procesos básicos para guiarte en la transición entre móviles y no tener sustos.
Si acabas de desempaquetar (lo de los unboxings esos) tu nuevo móvil Android, lo sentimos, pero todavía no vas a poder jugar mucho con él; primero te toca configurarlo, sobre todo si vienes de uno antiguo, y como en esta casa nos gusta enseñarte cosas nuevas, vamos a enseñarte los procesos básicos para que no se te quede por el camino contacto, archivo, foto o vídeo alguno.
El proceso es mucho más sencillo de lo que parece, y no debes preocuparte por dejarte algo si tienes sobre el papel un esquema de todo lo que deberías recordar —conocemos bien esa angustia, descuida. Por otro lado, ahora tanto Google como las diferentes marcas de Android cuentan con sistemas o apps que transfieren archivos, datos y configuraciones de manera automática para que no te dejes nada. Pero como hay apps que todavía se resisten a entrar en estos procesos (como Whatsapp y su manía de no poner las cosas fáciles), hace falta repasarlo un poco.
Antes de empezar, vamos a recomendarte tener a mano los siguientes elementos:
- Tu teléfono antiguo
- La tarjeta SIM
- Los datos de WiFi
- Los credenciales de la cuenta de Google
- La tarjeta SIM
Cómo preparar tu teléfono antiguo antes de pasar al nuevo
Lo primero es respaldar todos los datos y archivos que quieras, tanto fotos, música o vídeos como documentos, mensajes y otros archivos más olvidables. Normalmente, con Google Services, el proceso es bastante directo, porque aplicaciones como Google Fotos alivian mucho el proceso de proteger tu biblioteca de imágenes o vídeos realizados (aunque según tu suscripción o ausencia de ella, se guardarán a mayor o menor calidad).
Luego hay aplicaciones como WhatsApp que pueden requerir una atención un poco más personalizada. Es decir, que te va a tocar entrar en la propia app (en Ajustes > Chats > Copia de seguridad) para realizar una última copia de seguridad de tus conversaciones antes de apagar el móvil y pasar al nuevo. Esto mismo puedes hacerlo con el propio sistema del teléfono, entrando en los ajustes para “forzar” esa última copia de seguridad (según el dispositivo, el itinerario para encontrar ese apartado difiere, así que busca directamente “copia de seguridad”).
Si tienes una capa de personalización de terceros como Nova Launcher, el proceso de conservar la ubicación de tus apps en las pantallas de inicio es muy sencillo, porque la propia app tiene un sistema de restauración incorporado, pero a estas alturas de Android, cada casa cuenta con un sistema de transferencia de datos al nuevo teléfono (sea Samsung, Xiaomi, Huawei, OnePlus, etc.) que realiza esa misma transferencia, aparte de muchas otras. Descárgala y reserva el móvil.
Cómo configurar tu móvil Android nuevo
Lo primero es que pases la tarjeta SIM entre los móviles, enciendas el nuevo, elijas el idioma, aceptes los términos y condiciones, te conectes al al Wifi… Son una serie de configuraciones básicas entre las que también se incluirán la introducción de una contraseña o una huella dactilar para acceder al dispositivo, pero lo que nos ocupa es que ingreses en tu cuenta de Google y llegues al proceso de transferencia nativo de los servicios de Google.
Al hacer esto empezarás a pasar de verdad tus datos antiguos, a razón de: contactos, entradas en el calendario, correos electrónicos, aplicaciones y juegos como tu querido Pokemon GO… esa clase de elementos ligados a tu cuenta de Google. Aprovecha este paso para dejar por el camino aplicaciones del pasado que ya no usarías o que quizá están desactualizadas.
En muchas ocasiones, este proceso puede complementarse y enriquecerse usando las apps de terceros que te indicábamos más arriba, sobre todo si se trata de dos teléfonos de la misma marca: es tan sencillo como instalar su aplicación (normalmente con el término “switch”, “clone” o “transfer”) en ambos y realizar el proceso de transferencia. Suele ser por WiFi, pero en algunos casis incluso permiten el uso de cables. Si puedes, elige esta segunda, que es más rápida y estable. Si no es viable instalar estas apps en el dispositivo que sea, como cuando se trata de marcas distintas tendrás que confiar en Google o hacer el resto de la configuración a mano.
Otro punto importante es aprovechar aplicaciones como Google Fotos, que a pesar de que requiere de una suscripción para realizar copias de seguridad de tus carretes de vídeos y fotos a alta calidad (y ofrecer con más espacio para guardar datos), la opción gratuita convence a la mayoría de los usuarios a menos que sean más exigentes. En esa misma línea de pensamiento, el móvil te pedirá sincronizar cuentas como Facebook, Twitter, Skype, etc. Para terminar, puedes configurar el Asistente de Google si quieres contar con esta herramienta.