A pesar de poseer una innegable calidad, Final Fantasy XIII no terminó de satisfacer a todos los seguidores de esta clásica franquicia de rol y aventuras. Por eso mismo sus creadores intentarán desquitarse con esta continuación directa de aquél y que presentará jugosas novedades jugables.
Teníamos muchas ganas de echar un ojo a esta continuación de Final Fantasy XIII, deseo que hemos podido saciar en la presente edición del E3. Y las impresiones han sido bastante favorables, ya que pensamos que las novedades y cambios que llevará consigo esta continuación serán suficientes para volver a enganchar a sus incondicionales, quienes quedaron algo insatisfechos con el rendimiento del mencionado FFXIII.
Novedades relevantes
El argumento de Final Fantasy XIII-2 se desarrollará varios años después de lo ocurrido al final de su antecesor. Así, y tras salvar la destrucción de El Nido, Lightning desaparecerá sin dejar rastro. ¿Seguirá viva? Ante este panorama tan desconcertante su hermana Serah -personaje secundario de FFXIII- emprenderá un viaje para buscar a Lightning, ya que Serah estará convencida de que su hermana seguirá con vida… en alguna parte. A su viaje se unirá muy pronto un nuevo personaje, Noel Kreiss, un tipo cuyas intenciones no están del todo claras pero que al comienzo de la aventura salvará a Serah del ataque de unos monstruos. Poco más sabemos acerca de su historia, pero la intención de Square-Enix es que ésta sea más adulta y seria que la vivida en FFXIII.
Pasando ya a hablar de la mecánica de juego, ésta seguirá la misma línea de lo vivido en FFXIII pero con importantes cambios. Así, se mantendrán inalterables aspectos como la combinación de múltiples elementos (exploración, combates, diálogos con personajes secundarios, etc.) pero se añadirán ciertas mejoras y nuevos elementos para expandir la jugabilidad.
Para empezar, el sistema de combates se verá enriquecido por varios factores, si bien la dinámica será similar a la disfrutada en FFXIII. El primero es que podremos seleccionar más roles para los personajes, lo que añadirá un grado más de flexibilidad y complejidad a los enfrentamientos. Y por otro lado, durante las batallas se incluirán breves secuencias QTE que, de realizarlas correctamente, desencadenarán ataques más poderosos. Un claro guiño a pasadas entregas de la franquicia.
Otro elemento curioso e inédito que se incluirá en FFXIII-2 -y que nos ha llamado mucho la atención- será la posibilidad de entrenar y añadir a nuestro equipo a una amplia colección de monstruos y criaturas, más de un centenar. Al más puro estilo Pokémon, dichas criaturas podrán echarnos una mano cuando llegue la hora de combatir, lo que aportará un grado extra de estrategia a las batallas y más variedad al desarrollo, puesto que primero tendremos que encontrarlos. A priori y por lo que hemos visto, la idea está bien concebida.
Pero quizá el cambio más importante vendrá dado por la mayor libertad de acción que gozaremos durante la aventura. La exploración ganará muchos enteros puesto que los decorados se compondrán de zonas más grandes y, además, en ellas podremos visitar varias ciudades donde nos esperarán decenas de misiones secundarias. Pero es que hay más. En determinados momentos del juego tendremos que tomar decisiones (Live Triggers) que afectarán al flujo y desarrollo de la historia. Y, en último caso, en función de las decisiones que hayamos ido tomando presenciaremos un final u otro. Este hecho, unido a otros factores más, dotará al título de una gran rejugabilidad.
Para complementar debidamente a todo este conjunto de cambios y mejoras de gran calado que se integrarán en la jugabilidad, también se incorporarán otras algo menos relevantes como la inclusión de puzles, nuevas acciones para los protagonistas (como la posibilidad de saltar) o una mayor interactuación con personajes secundarios, como los Moguri.
Un mundo más oscuro
En cuanto a su apartado gráfico, como es lógico éste mantendrá la misma calidad general (bastante alta) que la registrada en Final Fantasy XIII. Sin embargo, el estilo artístico será bastante diferente. Y es que en este caso el colorido que reinaba en los parajes y localizaciones que aparecieron en su predecesor dará paso a unos escenarios mucho más oscuros y sombríos, debido al clima de caos de corte postapocalíptico en el que se sumergirá la aventura. El nivel de detalle y carga poligonal que soportará cada uno de los es bastante elevada, así como el modelado de los personajes. Y en lo relativo a las secuencias de vídeo (todo un sello de Square-Enix), éstas volverán a ser bastante frecuentes y se sucederán a lo largo de las distintas fases.
La banda sonora recuperará muchas de las sobresalientes piezas que se dejaron escuchar en FFXIII, a las que se añadirán varias melodías inéditas para ambientar adecuadamente las nuevas localizaciones que visitaremos en la aventura.
Square-Enix parece estar poniendo toda la carne en el asador con esta continuación del universo Final Fantasy XIII. Su intención es mejorar aquellas áreas que fueron tan criticadas en su predecesor y, a su vez, ofrecer una historia más sólida y profunda. El título estará disponible en Japón a finales de este mismo año, mientras que en Estados Unidos y Europa lo hará a principios del 2012. Le esperamos con ansiedad.