Me cuesta creer que Metroid Fusion tenga más de 20 años, porque con un leve retoque visual y sonoro podría pasar perfectamente por un nuevo lanzamiento. Ha sido descargarlo en el servicio Nintendo Switch Online (incluido desde el mismo día de hoy) y no parar de jugar. De hecho, diría que se convierte en una de esas incorporaciones que más valor dan a la suscripción, que como sabéis ya incorpora los tan esperados títulos de Game Boy Advance, los cuales van a dar más de una alegría a los nostálgicos y amantes de lo retro.
Desarrollada por Nintendo en el año 2002 y respaldada por el mismísimo creador de la saga, Yoshio Sakamoto, esta entrega está reconocida como una de las mejores de la franquicia (y no me extraña). Su base realmente es Super Metroid de SNES, una auténtica joya de la que recoge todas sus virtudes para elevarlas a una nueva categoría. Sin embargo, es un juego que aporta también cosas nunca vistas, como una historia más elaborada, una estructura de juego más guiada y una particular némesis (SA-X) que no es ni más ni menos que un clon de Samus Aran. La verdad es que ya no recordaba ni la mitad de las cosas y me he llevado una grata sorpresa.
Metroid Fusion es fantástico incluso 20 años después
Si tenéis reciente Metroid Dread, os daréis cuenta de que en este juego nacieron algunas de las mecánicas que inspiraron al equipo de Mercury Steam. Hablo por ejemplo de las salas de navegación que te vas encontrando y que te van orientando en la aventura. Es un enfoque distinto al de anteriores juegos de Metroid en que se te decía "ahí tienes el mapa y apáñatelas como puedas". Aquí no se deja al jugador tan a su suerte, sino que hay un hilo conductor con varias misiones, las cuales son propuestas por un ordenador que nos va contando de paso cómo está la situación.
Aquí no se deja al jugador tan a su suerte, sino que hay un hilo conductor con varias misiones
¿Y cuál es esa situación? Tras su última aventura, nuestra heroína intergaláctica es atacada por un misterioso parásito (X). Logra recuperarse gracias a una vacuna fabricada a partir de ADN metroide, algo que la hace ganar nuevos poderes (y un importante cambio de apariencia debido al traje fusión). No obstante, el parásito X ha causado estragos en una estación de investigación, y debemos acudir para esclarecer lo sucedido. Aquí comienza una trama que está bastante presente durante el juego, con incluso pequeñas secuencias que sacan el máximo partido a los 240×160 pixels de resolución de GBA.
No lo digo como crítica ni mucho menos, sino como un absoluto halago. El acabado técnico es una delicia, e incluso en la actualidad me sorprende lo fluido que es. Mover a Samus a través de los entornos laberínticos de los Laboratorios Espaciales Biometrix es una absoluta maravilla. ¿Y el control? Lo mismo, espectacular. Saltar y disparar en distintas direcciones es una gozada, al igual que convertirte en morfosfera para colarte por caminos ocultos, que por cierto hallarlos sigue siendo uno de los mayores quebraderos de cabeza.
Por supuesto, tienes una tonelada de backtracking y esa estructura que puede hacer que te pierdas sin saber por dónde seguir. Puro Metroid. Todo mientras obtienes habilidades como los misiles, el disparo cargado, el supersalto, la aceleración… Samus comienza sin nada, pero acaba con un arsenal ideal para aniquilar a cualquier alienígena que se cruce en su camino. Esa sensación de poder también la he experimentado, con jefes que ofrecen reto e inventiva en su planteamiento. En fin, qué os voy a contar que ya no sepáis si sois fans de la serie.
Tal vez su única crítica es que es corto, del orden de 6-8 horas como mucho
Tal vez su única crítica es que es corto, del orden de 6-8 horas como mucho. No obstante, hoy en día y teniendo en cuenta la naturaleza de este relanzamiento para Nintendo Switch, me parece más bien una buena noticia. Para mí ha sido una experiencia retro ideal y que te recomiendo encarecidamente. Metroid está de moda con su último remaster y la llegada futura de Metroid Prime 4, así que hay que aprovechar la situación. Ah, y ahora toca esperar a que llegue también Metroid Zero Mission al servicio de suscripción, otro juegazo de Game Boy Advance del que seguro os hablaré en otra ocasión.
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