¿Qué pasaría si envías al hijo de la Muerte a visitar el Museo de Ciencias con su pandilla? Lo puedes comprobar con este juego de plataformas para PSP con el que te vas a reír un rato. Eso sí, no apto para miedosas y miedosos.
Probablemente, te habrás quedado extrañado con la introducción y por eso hayas seguido leyendo. Pues no es broma, la pandilla que da lugar a la historia de este título la forman el hijo de la muerte (a partir de ahora conocido como Dj ), Pandora (la de la famosa caja), dos gemelos unidos por la cabeza llamados Smith y Weston, alguien sin extremidades metido en una urna, Seep, y algunos más como un pez muerto. Vamos, la pandilla perfecta que querríamos para nuestros hijos.
Esta pandilla se va de excursión al Museo de Ciencias y se encuentran una caja expuesta que nadie puede abrir. Primero lo intenta Pandora pero no puede, ¿pero como puede ser eso? ;) y entonces Dj saca su enorme guadaña ( ¿¿?? ) y la destroza, liberando a unos terribles demonios que capturan a sus amigos. El objetivo está claro, empezando por el propio museo y a lo largo de 20 niveles que incluyen muy variados escenarios, tenemos que ir avanzando y destruyendo todo tipo de enemigos, aniquilando todo lo que veamos, buscando entradas secretas y objetos ocultos, hasta conseguir liberar el espíritu de todos nuestros amigos y devolverlos al museo. Pues eso, estamos ante el típico juego de acción, plataformas y niveles al que estamos acostumbrados, sólo que como podéis ver todo el juego destila un humor muy de moda últimamente, cuyo máximo exponente es Tim Burton y sus películas, como la reciente “La novia cadáver”.
Un juego un poco tenebroso
Como consecuencia de este tipo de humor, tenemos un juego bastante “oscuro”. Todos los decorados están diseñados tenuemente, como invadidos por el demonio y sus secuaces. Los enemigos son de todos los tipos imaginarios posibles, desde aves, monos, insectos… y por supuesto también existirán peculiares enemigos finales de nivel.
Cada vez que eliminemos un enemigo recogeremos su alma, que luego nos servirá como fuerza para poder destruir las trampas del demonio que bloquean los niveles y puertas especiales.
Empezaremos con nuestra espectacular guadaña multiuso, que nos sirve tanto de arma como de herramienta para escalar niveles, de forma bastante compleja, eso sí; y como hélices que nos permiten volar durante unos segundos si saltamos desde una altura considerable, vamos que ni las famosas navajas de Albacete hacen tantas cosas.
También tendremos unas pistolas, y a lo largo de la aventura iremos recogiendo escopetas, misiles, y alguna que otra arma sorprendente e igualmente peculiar.
Técnicamente sencillo
Técnicamente el juego es bastante correcto en todos sus aspectos, pero sin llegar a destacar en ninguno. Los gráficos son muy graciosos y peculiares, pero también bastante sencillos y sin aprovechar la potencia de la portátil, algo que si hemos visto en otros juegos de este estilo.
Lo mismo podemos decir de los gráficos de los escenarios y la música general, dignos, sin ningún tipo de alarde, pero con un especial aire tétrico. Los efectos especiales son bastante correctos y sencillos, exceptuando el espectacular efecto que se produce al cambiar de nivel y en el que se difumina toda la pantalla en espiral de una forma realmente impresionante. La tétrica pero graciosa música de fondo acompaña tenuemente todo el recorrido, haciéndonos estar en constante atención.
El movimiento en general también es correcto, pero como es habitual no podremos manejar la cámara debido a la ausencia de un segundo stick, por lo que a veces nos jugará alguna que otra mala pasada dejándonos sin ver algún enemigo que nos ataca por la espalda. Tampoco es nada fácil utilizar nuestra guadaña para colgarnos de niveles superiores, y eso que lo necesitamos con asiduidad.
En conclusión, estamos ante un juego bastante entretenido, muy correcto en todos sus aspectos, con un sentido del humor de lo más actual, pero que salvo ese humor tétrico al estilo Tim Burton, no aporta casi nada nuevo a un estilo que en esta consola ya tiene muchos títulos, alguno de ellos muy destacables.
Si quieres formar parte de una pandilla muy peculiar, y ser su líder siendo ni más ni menos que el hijo de la muerte, aquí tienes 20 niveles de acción, enemigos y un humor delirante. Un titulo muy correcto, pero sin estridencias ni novedades, que lo conviertan en uno de los grandes.
